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Cuatro años del taller-laboratorio de
Estimulación Sensorial Creativa en la Facultad de
Ciencias Naturales y Museo (UNLP):
integrando la naturaleza y el arte para el
bienestar de las personas mayores.
Gaddi, Ana Laura y González Nuñes, Gladis
Facultad de Ciencias Naturales y Museo, Universidad Nacional de La Plata.
enverdepalpitar@gmail.com
Eje III: Vejeces y envejecimiento activo: Desafíos en tiempos de pandemia
o Eje IV: Los sujetos y el derecho a la educación permanente: sentidos y
proyectos de vida
Resumen.
En este relato de experiencia presentamos una síntesis del recorrido transitado en estos
cuatro años del taller-laboratorio de Estimulación Sensorial Creativa para el bienestar
(ESC) en la Facultad de Ciencias Naturales y Museo (FCNyM Universidad Nacional de
La Plata): un espacio innovador y experimental destinado a la estimulación creativa-
expresiva de personas mayores, donde explorar recursos para el bienestar a través del
contacto sensoperceptivo con la naturaleza y el arte. Una propuesta que aporta recursos
lúdicos y creativos para el envejecimiento activo, que ha ido consolidándose con los
años como una actividad que integra conceptos, abordajes y prácticas de la biología y
las neurociencias, la estimulación sensorial, la sensopercepción y el mindfulness, y el
arteterapia y las prácticas eco-terapéuticas. Presentamos los antecedentes de este
taller-laboratorio, sus objetivos, una caracterización de las personas mayores como
destinatarias específicas, la dinámica de este taller-laboratorio y la transición desde la
presencialidad a la virtualidad a partir de la pandemia. Compartimos también reflexiones
y aprendizajes de la práctica para y con personas mayores, y sus testimonios que
cuentan en primera persona lo que les ha significado transitar el taller; que nos permite
identificar un impacto positivo en múltiples dimensiones (consciencia corporal, desarrollo
personal y creativo, autocuidado, bienestar y disfrute, vínculo con la naturaleza,
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socialización, experiencias intergeneracionales, valoración del contexto académico,
entre otras).
Palabras clave.
Sentidos, bienestar, naturaleza, personas mayores.
Introducción.
Cuando pasan ciertos años trabajando para y con personas mayores resulta necesario
-y en lo personal emocionante- hacer un balance integrando experiencias, aprendizajes,
registros y testimonios a fin de continuar mejorando nuestras prácticas con este
colectivo con el que tanto disfrutamos trabajar. En este relato presentamos una síntesis
de la experiencia transitada en estos cuatro años del taller-laboratorio de Estimulación
Sensorial Creativa para el bienestar (ESC) en la Facultad de Ciencias Naturales y Museo
(FCNyM Universidad Nacional de La Plata): un espacio experimental destinado a la
estimulación creativa-expresiva de personas mayores, donde explorar recursos para el
bienestar a través del contacto sensoperceptivo con la naturaleza y el arte. Una
propuesta que aporta recursos sensoperceptivos lúdicos y creativos para el
envejecimiento activo.
Este taller-laboratorio ESC fue creado en el 2017 por Ana Laura Gaddi (Lic. en
Biología con orientación en Zoología FCNyM, educadora por el arte, exploradora de las
artes, formada en arteterapia) en el marco de su proyecto independiente En verde
palpitar, y viene desarrollándose en espacios culturales de las ciudades de La Plata y
Saladillo (Buenos Aires) y asimismo de modo virtual. A inicios del 2018 comenzó a
también realizarlo como taller de Extensión Universitaria en la FCNyM a través del
convenio con el Programa UPAMI (Universidad Para Adultos Mayores Integrados), con
la incorporación de Gladis González Nuñez como colaboradora (estudiante avanzada
de la Lic. en Biología con orientación en Botánica FCNyM, con experiencia en la
agricultura sustentable y la alimentación consciente). La Facultad desde el 2008 viene
desarrollando actividades de Extensión Universitaria para personas mayores, y desde
el 2015 ofrece cursos y talleres en convenio con el Programa UPAMI con el fin de
acercar a los afiliados al PAMI al ámbito universitario a través de diversas temáticas
relacionadas a las Ciencias Naturales. En el caso del taller-laboratorio ESC transita su
cuarto año de experiencia ininterrumpida en la FCNyM, habiendo contado a lo largo de
estos años con la participación de más de 170 personas mayores.
Esta actividad ha representado una propuesta innovadora en dicho ámbito por la
diversidad de temáticas y recursos que hemos integrado a la biología como disciplina
de origen y que detallaremos más adelante. Enfatizando en el hecho de que la
naturaleza y el arte brindan estímulos terapéuticos en términos de bienestar: ayudan al
esparcimiento, a la recreación y al goce; propician la relajación y nos equilibran; facilitan
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una conexión más profunda y significativa con el momento presente, con lo que
sentimos, con lo que somos, con lo que deseamos. Cuestiones que muchas veces nos
resultan complejas de lograr teniendo en cuenta los ritmos cotidianos, las
responsabilidades y compromisos, el escaso contacto con la naturaleza en las ciudades
y la sobreexposición a los dispositivos tecnológicos. Los efectos terapéuticos de la
naturaleza y el arte desde hace décadas son objeto de investigación (Calzado
Almodóvar et. al. 2013; Cardona Zuluaga, M. & S. Franco Cuartas. 2014; Cena, M. 2000;
Duncan, N. 2007; Villar, C. 2016), y asimismo son parte esencial de nuestro recorrido
personal y profesional.
Los sentidos son nuestra ventana al mundo, pero nuestra percepción está
atravesada no solo por la información sensorial procedente del entorno, sino también
por nuestras experiencias previas, nuestro estado de salud integral, y nuestros modelos
mentales influenciados por el contexto cultural. Respecto a la estimulación y educación
sensorial abundan propuestas para la infancia sobre todo en su desarrollo temprano, y
para jóvenes y adultos en áreas vinculadas al teatro y la danza u otras disciplinas de
trabajo corporal consciente y sensoperceptivo. Para personas mayores el abordaje
sensorial generalmente está integrado a prácticas profesionales casi exclusivamente
biomédicas (atendiendo a ciertas problemáticas o patologías). Por ello desde los
comienzos de este taller-laboratorio nos propusimos facilitar recursos a las personas
mayores para su propia estimulación sensorial, y a partir de ello motivar su potencial
creativo, expresivo y comunicativo que mucho puede aportar a su bienestar cotidiano, y
a su salud desde una concepción integral. Nuestros sentidos nos permiten conectar y
maravillarnos con la naturaleza que somos y con el ambiente que integramos, un buen
punto de partida para entablar un vínculo más consciente y amoroso con el propio ser,
con otros/as y con la vida natural como algo sagrado con lo que InterSomos.
“Amplía la mirada, que uno tiene de sí mismo y de lo que lo rodea,
una ventana hacia adentro y hacia afuera, compartida. ”
Alicia Jubert (La Plata, 77 años)
Marco teórico y metodológico.
Pensando la ESC conceptualmente:
En estos años de ir explorando y madurando la propuesta de la Estimulación Sensorial
Creativa para el bienestar, fuimos progresivamente integrando conceptos, abordajes y
prácticas de distintas áreas que complementan nuestro punto de partida desde las
Ciencias Naturales sumando otros recursos y puntos de vista al tratamiento integral de
la sensorialidad como disparador creativo y como puente de conexión la naturaleza:
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● Biología y Neurociencias: la sensorialidad en el cuerpo humano, los sentidos
comparados con otros grupos de animales. Desarrollo sensorial durante el
desarrollo embrionario. Deterioro sensorial causado por el envejecimiento
normal y por factores socio-ambientales como la contaminación ambiental y las
condiciones del ambiente laboral. La relación estímulos - memoria - aprendizaje
- emociones. La estimulación sensorial cognitiva y la educación sensorial. Los
efectos positivos a nivel nervioso de la meditación y las prácticas contemplativas.
● Estimulación sensorial, Sensopercepción y Mindfulness: el trabajo sensorial
y corporal consciente, atención plena a los sentidos, manejo de la respiración,
exploración del movimiento consciente, auto-observación, reconocimiento y
discriminación sensorial. El camino de la sensopercepción nos posibilita un
proceso de sensibilización, reencuentro y recuperación del propio cuerpo con su
consecuente realimentación creativa (Cena 2000).
● Arte-terapia: los lenguajes artísticos (de las artes plásticas y visuales, danzas,
expresión corporal, teatro, música, literatura y demás) como medio para la
expresión de lo singular y las emociones. Lo sensorial como disparador creativo.
La creatividad como cualidad inherente a lo humano, como camino de
exploración y autoconocimiento; como posibilidad de pensar(se), buscar y/o
crear alternativas a lo ya conocido. El proceso creativo como oportunidad de
exploración espontánea desandando expectativas y condicionamientos técnicos,
estéticos y/o sociales.
● Eco-terapias o Terapias centradas en la Tierra: prácticas que facilitan
estímulos naturales para el desarrollo y bienestar personal, a la vez que motivan
nuestra autopercepción como seres integrados a ella, con implicancias para la
sensibilización ambiental y cuidado del vínculo con otros seres. Prácticas
meditativas, contemplativas, de contacto y/o creación artística en la naturaleza o
con elementos naturales (ej. Horticultura terapéutica u Hortiterapia, las Terapias
asistidas con Animales, los baños de bosques, las caminatas contemplativas,
entre otras).
Pensando la ESC desde la práctica:
Decimos también que es un taller-laboratorio porque a la par del desarrollo de los
contenidos teóricos realizamos actividades vivenciales que invitan experimentar, a
explorarse y a descubrirse en el hacer creativo en el contacto con la naturaleza y el arte.
La modalidad previa a la pandemia fue presencial en un aula de la FCNyM, y desde el
2020 continuamos de manera virtual con una videollamada semanal.
La actividad es grupal, generalmente en grupos de 20-30 participantes.
Hablamos de encuentros y no de clases pues se trata de un espacio plenamente
participativo donde cada tema es una invitación: un punto de partida, una propuesta
abierta planteada de manera simple y accesible, para que cada persona disponga, de
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curso como quiera, necesite o desee; con el acompañamiento permanente de la
facilitadora y la colaboradora. Asimismo es un espacio dinámico abierto a las propuestas
de quienes participan.
Un encuentro típico dura 90-120 minutos, focaliza en la estimulación de uno o
más sentidos (gusto, olfato, tacto, vista, oído, equilibrio, propiocepción e interocepción)
y contiene una secuencia de contenidos y actividades guiadas que desde el inicio hacia
el final generan climas propiciatorios. Se detalla la secuencia aunque en muchas
ocasiones se da de un modo más orgánico, o inclusive puede extenderse más de un
encuentro:
● Introducción conceptual: referida a algún aspecto teórico del sentido a explorar
en dicho encuentro, o a alguna de las temáticas mencionadas en la sección
anterior.
● Caldeamiento sensoperceptivo: práctica inicial para la relajación o la
activación de la energía (según el objetivo del encuentro). Actividad meditativa,
contemplativa o de expresión corporal acompañada de música, sonidos, aromas,
texturas, etc.
● Momento creativo: se propone una consigna acompañada de un estímulo que
actúa como disparador creativo (aroma, sonido, textura, imagen, color, sabor,
palabras, movimientos, etc.) para explorar un lenguaje artístico (pintura,
fotografía, escritura, movimiento, escultura, teatro de sombras, sonorizaciones,
etc.). A partir de ello y con los materiales solicitados cada participante comienza
a experimentar su proceso creativo, con nuestro acompañamiento como
facilitadoras y con aportes de otras/os participantes que muchas veces surgen
espontáneamente. Los materiales utilizados suelen ser de origen natural,
materiales artísticos o materiales reutilizables. Hay propuestas que comienzan y
terminan en el mismo encuentro, y otras que continúan en procesos creativos
que llevan más encuentros.
● Momento de registro: a lo largo de la experiencia y al final se propone a cada
participante registrar de manera escrita lo que sintió, pensó, recordó, asoció;
cualquier aspecto que considere significativo en su proceso creativo.
● Momento de reflexión y puesta en común: hacia el final del encuentro se invita
a compartir con el grupo -siempre que cada persona lo desee-. Este intercambio
de experiencias y sentipensares aporta un gran estímulo y motivación en
diversos aspectos: desde la posibilidad de expresar lo propio, de socializar e
intercambiar puntos de vista y sentires, y de apoyar, ayudar y valorar asimismo
los procesos creativos y los aportes de los/as demás.
“Recomiendo el taller a los amigos y les cuento las experiencias y aprendizajes vividos en él, porque
además de ser un lugar de encuentro con compañeros de lugares remotos es muy completo en su
organización, conocimientos y aplicaciones prácticas”.
Sara Cecilia Nardo (La Plata, 78 años)
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Objetivos.
El taller-laboratorio de Estimulación Sensorial Creativa para el bienestar tiene como
objetivo principal facilitar recursos para el autocuidado y el bienestar de las personas
mayores a través de la experimentación sensorial lúdica, creativa y expresiva en
contacto con la naturaleza y el arte.
Objetivos específicos:
1. Facilitar recursos para la estimulación multisensorial y cognitiva en actividades
experienciales exteroceptivas, interoceptivas y propioceptivas.
2. Potenciar el registro sensorial para la conciencia corporal en la vida cotidiana
como práctica de autocuidado y de atención plena, que ayude a transitar con
mayor presencia y disfrute el momento presente.
3. Incentivar prácticas contemplativas y de conexión sensible con la naturaleza
cercana, que generen espacios de relajación y bienestar diarios.
4. Facilitar recursos que desde la virtualidad ayuden a aplicar prácticas de bienestar
al entorno doméstico y/o laboral.
5. Estimular la exploración creativa y expresiva a nivel personal y grupal, a través
de experiencias que integran recursos de la sensopercepción, el arteterapia y
las eco-terapias.
6. Reconectar con lo lúdico como motor cotidiano, revalorizar el juego imaginativo
como recurso creativo, revitalizante, habilitador y vinculante en la vida adulta.
7. Propiciar un ámbito libre para el intercambio de puntos de vista, saberes,
recuerdos y vivencias referidas a la relación cuerpo-naturaleza-expresión.
8. Generar desde la virtualidad un espacio ameno y contenedor que ayude a
ampliar sus lazos en el contexto de aislamiento, y la posibilidad de experimentar
lo vivencial compartido desde el propio hogar.
Destinatarios y actores sociales del taller-laboratorio ESC.
Esta actividad está destinada a personas mayores de 60 años sin distinción de género
-y con o sin experiencia previa en este tipo de actividades-, aunque ha resultado más
convocante para las mujeres. La mayoría procedentes de las ciudades de La Plata y
Berisso, la comunidad cercana a la FCNyM. A partir de la pandemia y el cambio a la
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modalidad virtual no sólo se ha incrementado la cantidad de participantes sino su
procedencia ampliándose a otras ciudades y provincias; lo que ha diversificado y
enriquecido el intercambio sumando nuevas identidades y trascendiendo fronteras.
La convocatoria se ha dado a través de la web y las redes de la FCNyM, las
redes de En verde palpitar y la página web de UPAMI, alcanzando de modo directo a
las/os destinatarias/os o a familiares y/o amistades que les recomiendan la actividad.
Si bien sabemos que cuando hablamos de personas mayores nos estamos
refiriendo a un colectivo en el que existen diversos modos de transitar dicha etapa de la
vida, a lo largo de estos años hemos identificado aspectos frecuentes que han ido
modelando el desarrollo de nuestra actividad:
● Por un lado, la proyección de la esperanza de vida ha crecido con los avances
en el campo de la salud. Sumado a ello, generalmente son personas que cuentan
con mayor disponibilidad de tiempo al encontrarse más liberadas de las
responsabilidades laborales y/o de crianza. Asimismo poseen un recorrido
nutrido de saberes basados en sus experiencias de vida. Todo ello se traduce
en la posibilidad de poder dedicar tiempo a sumar nuevas experiencias,
conocimientos y de compartir los propios. Es una etapa con un gran potencial
para realizar actividades que disfrutan, que les permitan seguir cultivando sus
conocimientos, expandiendo sus capacidades y sus vínculos, y también
proyectarse en nuevos propósitos y proyectos.
● Respecto a los cambios naturales con la edad en las funciones corporales,
cognitivas y psicoemocionales, el deterioro sensorial impacta notablemente en
la calidad de vida, y en la capacidad de expresión y de vinculación. Por citar
situaciones frecuentes: quien casi no escucha y tiene dificultades para integrarse
en la comunicación con otros, o quien padece algún trastorno que opera sobre
la percepción del gusto/olfato y va disminuyendo interés en su propia
alimentación o no percibe el olor a gas de una hornalla abierta, o quien
paulatinamente va perdiendo su visión y tiene que aprender a manejarse
espacialmente de otra manera y a guiarse por sus otros sentidos. La posibilidad
de experimentar actividades de estimulación sensorial desde un abordaje
lúdico-creativo brinda asimismo recursos para potenciar desde lo atencional su
propio registro sensorial, ayuda a desarrollar una consciencia corporal más
activa que les facilita detectar cambios en sus funciones sensoriales e inclusive
estar más atentas/os a sus movimientos y acciones para evitar accidentes
domésticos.
● Otro aspecto interesante es que en muchos casos han tenido una infancia y
juventud en ciudades menos urbanizadas y/o inclusive en ámbitos rurales, con
experiencias, saberes y costumbres mucho más ligadas a la naturaleza que las
generaciones posteriores. Asimismo con tradiciones alimentarias ligadas a sus
lugares de origen e historias familiares; y eso es algo que ha dejado una huella
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sensorial en su memoria y en su afectividad, y que consecuentemente hace a su
identidad y a cómo se perciben respecto a los ambientes que han integrado su
vida. Otra cuestión relacionada es que muchas personas mayores destinan
buena parte de su tiempo al cuidado de sus plantas y/o animales, y que tienen
un registro lúcido sobre el efecto terapéutico que -en términos de bienestar- ello
les genera.
● También suelen referir que su crianza y educación ha sido mucho más rígida
o estructurada que en la actualidad. La posibilidad de habilitarse a sentir, a
conectarse con su cuerpo y sus emociones, a explorarse y crear libremente,
expresar y comunicar sus puntos de vista, deseos y necesidades, para
muchas/os no ha sido ni es algo sencillo. En general son personas que están
más acostumbradas a la censura, a la corrección o a ir en búsqueda de “lo
correcto” o “bien hecho”, que a tener espacios que les propicien manifestar lo
propio con libertad. En este sentido valoran poder acceder a ámbitos que les
permitan compartir sus sentipensares, donde socialmente se les reconozca y
valore por ello, y donde asimismo se les propongan experiencias que les ayuden
a explorarse creativa y expresivamente, si así lo desean.
“El taller me pareció muy BUENO, fue descubrir aspectos de la vida que uno tiene olvidados
o no les presta la debida atención. Participar fue una buena casualidad (quería ver de seguir
un curso de estimulación cognitiva pero no presté atención a la palabra *sensorial*,
digo casualidad pero debería ser causalidad”.
Susana Rodríguez (Santiago del Estero, 60 años)
● Sumado a lo anterior, la pandemia ha limitado las oportunidades de vinculación
y la continuidad de las actividades que cotidianamente realizaban. No ha sido
fácil reinventar la manera de sostener sus rutinas. Una de las principales
complicaciones que muchos/as atraviesan -además del encierro, el miedo y la
angustia- ha sido enfrentar un cotidiano más solitario y monótono que limita
su estimulación sensorial, cognitiva y socioafectiva. El aislamiento ha reducido
en gran medida la cantidad, la variedad y la calidad de estímulos y experiencias
cotidianas, restringiendo sus posibilidades de interactuar, comunicarse,
expresarse, compartir con otros/as, encarar proyectos, recrearse en otros
ambientes distintos a su hogar, entre otros asuntos. Asimismo en muchos casos
se ha visto restringido el contacto con los estímulos de la naturaleza y la
posibilidad de disfrutar del bienestar que generan. Cuestiones que comprometen
su salud desde una perspectiva integral.
● Por último, si bien los desarrollos en la comunicación facilitan nuevos canales
tecnológicos para su inclusión, la realidad es que el acceso a la alfabetización
digital y a la virtualidad sigue siendo una deuda social pendiente con esta
población. En el caso de nuestro laboratorio-taller hemos dispuesto un tiempo
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especial para asistirles con el manejo de las plataformas de videollamada y las
redes sociales que utilizamos, a fin de motivar una participación activa y que
puedan ganar recursos para una comunicación más autónoma, con mayor
alcance territorial y transgeneracional.
Reflexionando sobre la experiencia, haciendo camino al andar.
Producto del camino recorrido nos pareció fundamental concluir este relato de
experiencia con el devenir del taller-laboratorio de Estimulación Sensorial Creativa para
el bienestar en la FCNyM, integrando la voz de las participantes, testimonios cuentan lo
que esta experiencia les ha significado; y que nos permite identificar un impacto positivo
en múltiples dimensiones. Veamos:
La ESC ayuda a ampliar la conciencia corporal, la consciencia sobre las
potencialidades de nuestro cuerpo, y a fortalecer la conexión con lo que somos y
sentimos. Profundizando desde lo atencional nuestra capacidad de conectar
sensiblemente con el entorno, y de transitar con mayor presencia y atención plena las
experiencias que vivimos en cualquier plano y momento de la vida. Una sensorialidad
consciente ayuda a disminuir riesgos en cuanto a estar más atentas/os a los estímulos
a los que estamos expuestas/os, y a optimizar el disfrute sensorial de cualquier cosa
que hagamos. Como dijo una participante “estar atentos a los sentidos se vuelve
hábito”. La ESC como espacio de estimulación y autocuidado que facilita recursos la
auto-estimulación y para generarse momentos de relajación, motivación y recreación
mental en su cotidiano, solas o invitando a otras/os al juego. Las experiencias les han
aportado recursos y disparadores que inclusive algunas/os han manifestado de utilidad
en sus terapias personales de psicoanálisis.
“Me hizo conocer el valor de los sentidos, las experiencias prácticas me produjeron un compromiso
enorme y la satisfacción de verlo plasmado… las potencialidades del ser humano son inmensas, hay que
descubrirlo cuando se presentan las oportunidades y ésta es única e irrepetible para mí”
Mabel Venditto (La Plata, 86 años)
“Los recursos y estrategias que nos enseñaron, sirvieron para estar atenta a los estímulos externos y
atender de qué forma impactan en mí (estar consciente). También utilizo el dado de actividades
estimulantes y todos los días elijo hacer algunas de las actividades que me gustan y dan satisfacciones.
Como una forma de cortar el día con sus obligaciones y tareas, que muchas veces no son gratificantes y
no las elegimos sino que debemos realizarlas”
Susana Rodríguez (Santiago del Estero, 60 años)
“La experiencia sensorial realizada, fue el punto de partida para vivenciar a diario e incorporar y/o
modificar hábitos como forma de vida. Todo fue un gran aporte, sobre todo en esta etapa que estamos
transitando una continua adaptación en todos los aspectos”.
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Mónica Zavala (La Plata, 60 años)
Una sensorialidad consciente ayuda a potenciar el disfrute de las cosas
simples y a aprovechar los sentidos como fuente de placer; y a conectar desde un lugar
profundo con la naturaleza cotidiana que provoca efectos relajantes, equilibrantes y de
goce. Asimismo estimula nuestra autopercepción como seres integrados a la naturaleza,
y evoca recuerdos ligados a ella:
“El resultado es una conexión especial con la naturaleza muy lindo en pequeña y doméstica escala”
Mónica Novara (La Plata, 67 años)
“Todos los recursos sensoriales los aplico en lo cotidiano. Primero aprender a cuidar nuestros sentidos
conscientemente. También a contemplar simplemente la naturaleza en todos nuestros actos, en el hogar,
la huerta, las caminatas, los parques y plazas, siempre asombran. Y cuántas sensaciones y recuerdos de
sabores y aromas de comidas y postres de nuestra infancia. Realizo también una alimentación
consciente, trato de hacerlo despacio y disponiéndome a recibir y disfrutar de cada comida, apreciar sus
sabores y olores característicos”.
Sara Cecilia Nardo (La Plata, 78 años)
Los estímulos sensoriales ligados a la experimentación creativa introducen
lúdicamente a la novedad y a la sorpresa, en una instancia de la vida donde muchos/as
sienten tener adormecida o agotada esa posibilidad. Reactivar entonces la capacidad
lúdica imaginativa revitaliza y aliviana la vida adulta, permite experimentar distintas
posibilidades para la expresión de la propia esencia, trascendiendo miedos o
condicionamientos, habilitándose a crear. Explorarnos creativamente ayuda a
redescubrir que todas las personas podemos buscar, reinventar y/o crear nuevas
cosas, ideas o condiciones para nuestra vida.
“Me quedo con la práctica, no solo me divierto, me hace pensar y registrar cada cosa que vivo.
El taller nos da un espacio para socializar y volver a ser un poco niños. Repito no juzgo, lo vivo, y vos sos
las persona que logra esto”
Chachi Romaguera (La Plata, 79 años)
“Las clases prácticas mantenían nuestro interés con propuestas nuevas y lúdicas vinculadas con los
sentidos. También hablamos de nuestras experiencias como adultos mayores y la necesidad de cuidar y
conocer las limitaciones propias de la edad. Siempre con información complementaria y con situaciones
nuevas para asombrarnos haciendo las clases instructivas y a la vez divertidas”.
Sara Cecilia Nardo (La Plata, 78 años)
“Reflexionar más sobre lo lúdico y el papel que representa en nuestro bienestar y nuestra salud, y sin
embargo en tantas oportunidades lo relegamos al desván de los olvidos. Diría que es un espacio para
permitir que fluya lo que muchas veces está dormido esperando que lo despierten...o agazapado
esperando que lo descubran... o aletargado aguardando que lo sacudan…”
Perla Rodríguez (Comodoro Rivadavia, 67 años)
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Sobre el valor del aporte grupal: el compartir en grupo ha sido sumamente
enriquecedor en términos de poder alojar lo propio y también lo diverso, de cooperar y
co-crear conjuntamente, de debatir, de vivenciar “lo rico de conocer la experiencia del
otro” y de poder socializar la propia experiencia. La participación grupal ha ampliado
lazos y amistades, hay personas que han continuado participando año tras año en el
taller; con un sentimiento de pertenencia que las motiva y anima “compartimos
sentimientos y eso nos acompaña”.
*La dinámica grupal fue muy buena y permitió manifestar la creatividad, la empatía y necesidades de los
participantes”
Alicia Jubert (La Plata, 77 años)
“Recomendaría el taller y les diría que es una linda forma de empezar a bucear dentro de uno mismo
con buena y contenedora compañía. Agradezco las enseñanzas y el acompañamiento de parte
de las docentes y a todos los compañeros”.
Susana Rodríguez (Santiago del Estero, 60 años)
Previo a la pandemia hemos realizado también algunas experiencias
intergeneracionales en las que invitamos a participar a los estudiantes de la FCNyM:
en el 2018 realizamos un juego de postas multisensoriales dentro del aula del taller, y
en el 2019 una intervención con susurradores en el patio y en una clase de Geología,
susurrando poesía a las/os estudiantes y docentes que con sorpresa y entusiasmo
prestaron sus oídos y sonrisas. Durante la pandemia hubo participantes que
mencionaron haber realizado con sus nietos/as y niños/as cercanos algunas de las
experiencias del taller, con ánimo de compartir desde lúdico, desde la posibilidad de
crear juntos/as e incentivar otras maneras de entretenerse que los despeguen un poco
de las pantallas y los conecten con la naturaleza.
También entra en juego lo que representa participar de una actividad que se lleva
a cabo en un ámbito académico como el de la FCNyM: un espacio muy valorado e
inclusive la posibilidad de vivir algo de la experiencia universitaria que para
muchos/as ha sido un anhelo postergado. Esto reaviva la llama de la posibilidad de
aprender, de experimentar, de crear y de compartir cosas nuevas no tiene fecha de
vencimiento. Este “vamos a la Facu” -como decían cuando lo hacíamos
presencialmente- que ahora se reconfigura y resignifica con la virtualidad, donde la
Facultad de alguna manera ingresa al hogar. La pandemia y el aislamiento preventivo si
bien trajeron muchas dificultades al colectivo de personas mayores, también impulsaron
a buscar otros modos de vincularse desde la virtualidad; y a nosotras como
facilitadoras del espacio nos representó el desafío de adaptar la dinámica a esta nueva
modalidad. En nuestro caso el incremento y la diversificación de participantes respecto
a su procedencia y modos de vida, y el hecho de que cada una/o pudiera conectarse y
compartir desde el propio hogar, enriqueció muchísimo la dinámica y generó en lo grupal
cierta sensación de viajar estando desde la casa. Asimismo destacaron el aporte de
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recursos que el taller les brindó para transitar este momento con prácticas de bienestar
desde su casa.
“Me contactó con nuevas compañeras de distintos lugares, lo cual me resultó muy positivo sobre todo
por esto de la cuarentena”
Mónica Novara (La Plata, 67 años)
“Realizar el curso, me permitió hacer un "tiempo propio", fuera de la rutina a la que nos llevó
la pandemia. Permitió sacar a la luz temores e incapacidades (¡y capacidades!). Es superador”.
Alicia Jubert (La Plata, 77 años)
“La experiencia sensorial en este aislamiento significa mucho, ayuda a pensar en otras cosas,
entrar en uno mismo y pensar en cosas a veces olvidadas, y con más ilusión en el futuro
cuando pase todo esto y ojalá lo podamos repetir”
Ana María Pintos (Quilmes, 80 años)
“La modalidad online me permitió el acercamiento a otros participantes desconocidos y además,
construir junto a ellos, vínculos a a distancia, ya que el abordaje de lo sensitivo incluye necesariamente,
al potenciarlo, lo emotivo, junto al surgimiento de los recuerdos: lágrimas, sonrisas, relatos, anécdotas,
vivencias comunes-de épocas pasadas- que viajando en las alas del recuerdo nos acercan
al compartirlas... Y es muy grato ver cómo un desconocido se vuelve conocido, de pronto,
a través de una actividad tan singular que potencia el acercamiento y la empatía con el otro”.
Perla Rodríguez (Comodoro Rivadavia, 67 años)
Lo que compartimos en este relato intenta dar cuenta del progresivo crecimiento
y maduración de esta propuesta que se ha nutrido permanentemente del feedback de
sus participantes y de la multiplicidad de contenidos, aspectos y dimensiones
integradas. Hemos ido descubriendo y aprendiendo de y con las personas mayores, y
de nuestros aciertos y desaciertos que también los hubo y que han sido oportunidad de
redefinición y mejora. Como dijo Cortázar “las palabras nunca alcanzan cuando lo que
hay que decir desborda el alma”, seguramente lo más inconmensurable sea la
gratificación que sentimos porque nos hayan permitido acompañar sus procesos
creativos en conexión con la naturaleza. Y por haber podido realizar, acrecentar y
continuar proyectando esta actividad en el ámbito de nuestra querida Facultad de
Ciencias Naturales y Museo, contexto donde hemos reinventado nuestro ejercicio
profesional, repensado nuestro lazo con las vejeces, las potencialidades de esta etapa
de la vida y la importancia de abrir nuestros sentidos al vínculo cotidiano con la
naturaleza que somos.
Agradecimientos:
Agradecemos especialmente las/os participantes del taller por su calidez y compromiso, y por el gran aporte
que su transitar ha representado al crecimiento de esta actividad. A Ana Lamarche y Luis Lagrifa (Secretaría
de Extensión FCNyM) por la orientación y el apoyo institucional en estos años de trabajo en la Facultad. A
Julieta González (desde la antropología y la danza), y a Bibiana Alonso y María Soledad López (desde la
psicología y el arteterapia) por sus profundas contribuciones a repensar el concepto y las prácticas de este
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taller-laboratorio. A Analía Zurita por su constante aporte de temas de interés. A Mariano Platner por su
valiosa orientación en la comunicación y difusión.
Bibliografía
Calzado Almodóvar, Z.; Ruiz Fernández, M.I; Espada Belmonte, R. & M.Gordillo Gordillo. 2013. Arte y mayores: propuesta para un envejecimiento activo. International Journal of Developmental and Educational Psychology 1(2): 247-258.
Cardona Zuluaga, M. & S. Franco Cuartas. 2014. Incidencia de la ecoterapia en los estilos de afrontamiento ante situaciones de estrés laboral. Facultad de Ciencias Sociales, Antioquia, Colombia. 108 pp. Cena, M. 2000. Sensopercepción. IPEF Córdoba. 11pp. Duncan, N. 2007. Trabajar con las emociones en Arteterapia. Papeles de arteterapia y educación artística para la inclusión social: 39(2). pp. 39-49
Villar, C. 2016. Líneas de expresión, una experiencia de Arte terapia con adultos mayores en contexto comunitario. Monografía para optar al título de especialista en Terapias de Arte. Facultad de Artes (Universidad de Chile) 89 pp. Anexo: fotos de experiencias y producciones realizadas en el taller (en preparación)
https://drive.google.com/drive/folders/1Q8QV1EWUqIxHUHUgp1cZAU_s1WUAhNu8?usp=sharing