01 Propositioning Mr. Raine

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Introducción
Trina Mattews, de treinta y ocho años, pierde a su marido en un trágico accidente laboral. Decide comenzar una nueva vida en la pequeña ciudad de Hailey, Texas. Al principio pensó que era una buena idea alejarse de los recuerdos, pero no contó con la soledad.
Navarro Raine es el hombre más guapo y atractivo que ha visto en toda su vida. Es alto, posee unos increíbles ojos azules y la belleza de un nativo americano. Él llena todas sus fantasías nocturnas y le hace preguntarse como seria estar con él en la cama, ya que Navarro tiene una reputación de ser muy salvaje …
Cuando ella se entera de que está a punto de perder su rancho familiar, decide proponerle la solución perfecta para los dos. Ella está dispuesta a ofrecerle a Navarro el dinero para salvar su rancho.... a cambio de sexo salvaje.
Capítulo uno
Ella sintió el quemazón del whisky desde la boca hasta el vientre. Trina se mordió el labio y colocó el vaso con cuidado sobre la mesa y respiró profundo. Estaba muy nerviosa y se había imaginado que unos tragos le darían el coraje para hacer algo totalmente loco. Ella volvió a respirar profundamente, expulsó rápidamente el aire por
la boca y luego levantó la mirada para mirar, disimuladamente a la razón por la que noestaba en su casa y en la cama, leyendo un buen libro, como hacía cada noche.
En la esquina de la barra estaba sentado el hombre que ocupaba una gran cantidad de sus fantasías nocturnas. Parecía estar de muy mal humor mientras miraba el vaso de whisky que tenia entre las manos. Podía adivinar que, en este momento, Navarro Raine estaba sintiendo el peso del mundo sobre sus hombros. Durante días, varias personas de la ciudad, se habían ocupado de hacer correr el chisme de que el hermano menor de Navarro, un hombre con problemas con la bebida y con el juego, había pedido un préstamo de veinte mil dólares, el cual avaló con su rancho y que no podían pagar .
Missy, la empleada en la oficina de correos, le dijo que era una lástima que los Raines estuvieran a punto de perder su rancho. Mike, el empleado en la gasolinera, le había dicho, con una sonrisa en los labios, que el banco se encargaría de que la ciudad se librara de toda la familia Raine.
Trina lo había escuchado todo y se sintió realmente mal por Navarro, aunque sólo lo conociera de vista y nunca hubiera hablado con él.
Esta misma mañana, el dependiente de la tienda de comestibles le había contado los últimos chismes que corrían por la ciudad. La novia de Navarro, una pelirroja de piernas largas, llamada Tammy Brent, le había dejado tan pronto como había oído que iba a perderlo todo.
EL CLUB DE LA ROSA
8/16/2019 01 Propositioning Mr. Raine
Ella había visto a la mujer más joven varias veces en la ciudad, pero nunca le gustó. El que hubiera abandonado a un hombre cuando tenia problemas, unos que ni siquiera se había buscado él, decía mucho del carácter interesado de Tammy .
Trina tragó otro sorbo de whisky y el líquido le quemó otra vez el vientre. Mientras guardaba los comestibles, su mente se había quedado fija en los problemas de dinero de Navarro, en su ex-novia y de pronto había ideado un loco plan. Es una locura, se dijo. Nunca aceptara, ni en un millón de años y va a pensar que estoy loca.
Su mirada se fijó de nuevo en Navarro. Sólo una mujer que estuviera ciega no vería lo sexy que era. Se sentía tan atraída por él, que cada vez que lo veía su corazón se aceleraba y sus bragas se mojaban. Media un metro ochenta de altura y tenia el pelo negro hasta los hombros. Piel profundamente bronceada, brazos musculosos, hombros anchos y pecho amplio. Aunque él estaba sentado, ella sabía que tenía las caderas delgadas, un increíble culo apretado y piernas largas y musculosas. La camisa de franela roja, los vaqueros descoloridos y las botas negras, le hacían el hombre perfecto.
Tenia una cicatriz de unos cuantos centímetros a lo largo de la mandíbula, una delgada línea blanca, visible sólo si inclina la cabeza hacia atrás y había una buena iluminación. Había oído que se la había echo de joven en el rodeo. Se decía que tenia unas pocas más de cicatrices, pero que estaban ocultas a la vista.
Tenía el tipo de ojos que una mujer podría mirar durante horas, de color azul oscuro y enmarcados por espesas pestañas negras. Su estructura ósea era fuerte, con pómulos dominantes que algunos podrían pensar lo hacían parecer un poco duro, pero en lo que Trina no estaba de acuerdo. Para ella era demasiado sexy.
Una mirada a su reloj le reveló que si no lo hacía ahora, él se iría pronto. Trabajaba muy duro en su rancho de caballos y cuando visitaba el único bar de la ciudad, por lo general se marchaba alrededor de las nueve. Supuso que se levantaba temprano al igual que lo hacia la mayoría de la gente en el área. Estaba aprendiendo mucho sobre la ganadería desde que se había mudado a la pequeña ciudad de Texas unos meses antes.
Ella respiró hondo, se levantó, tragó saliva y se acercó a su mesa. Se alegró de que fuera
martes por la noche y el bar estuviera casi vacío, así no habría demasiados testigos a sualrededor. Él va a perder su casa y yo estoy muy sola. Hazlo, ella se ordenó a sí misma en silencio. ¿Qué tiene que perder? o puedo ayudarle.
Navarro pareció sentir que iba hacia él porque levantó la mirada y se quedó fija en Trina. A ella le entraron ganas de darse la vuelta y huir, pero logró seguir moviéndose hacia él, a pesar de que se le sonrojaron las mejillas. Se detuvo frente a su mesa y se quitó un mechón de pelo rubio rizado de la cara.
-"¿Puedo sentarme?" Su voz era un susurro.- "Tengo una propuesta para ti."
La sorpresa se reflejó en su rostro, pero un segundo después sus ojos oscuros se
estrecharon sospechosamente. Sus labios se torcieron en una mueca, soltó la copa e hizo un gesto con la cabeza a una de las sillas frente a él. Ella se sentó.
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Trina juntó las manos sobre la mesa para que él no las viera temblar. Todo su cuerpo temblaba ligeramente por los nervios y por centésima vez se dijo que estaba loca y que debía ir a ver a un psiquiatra. Se mordió el labio inferior y se obligó a mirarlo a los ojos.
-"¿Qué tienes en mente?"
Ella se estremeció un poco ante el sonido de su voz. Él tenía una voz tan masculina y sexy que le hacia un nudo en el estómago.
-"Yo soy-" Ella tuvo que aclararse la garganta.- "Soy Trina Mattews".
-"Sé quién eres."
Eso la sorprendió.- "¿En serio?"
Él asintió con la cabeza.- "Tú compraste la casa de Vern, cuando se mudaron a Oregon."
Ella tragó el nudo que se le formó en la garganta. Eso era una buena cosa, al menos ahora no tendría que explicarle lo que estaba haciendo en esta cuidad llamada Hailey.
Ella asintió con la cabeza.
-"Lo hice. La vi por Internet y la compré hace unos meses. Mi marido murió el año en un accidente laboral. Soy del sur de California y quería vivir en un lugar que constantemente no me recordara su pérdida ".
Trina estaba orgullosa de haber conseguido hablar sin que se le quebrara la voz. Habían pasado catorce meses desde que Ted había muerto. El traslado desde el sur de California a Hailey le había ayudado mucho y estaba empezando a seguir adelante con su vida, dejando atrás todo lo que pudiera recordarle a su matrimonio.
-"Lo siento. Yo no había oído eso. "Su mirada se suavizó.
-"Gracias."
-"¿Dijiste que tenias una propuesta para mí? ¿Quieres comprar un caballo? Tengo unos cuantos que son perfectos si quieres aprender a montar. No sólo los crio, también los entreno. "
Trina vaciló.- "Yo no quiero un caballo. Y no quiero un cachorro. Yo ... "Ella tragó saliva, estaba dándose cuenta de que le era más difícil hablar con él de lo que había
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pensado que sería.- "Quiero decir, no estoy buscando una mascota o algo a lo que tenga que cuidar, porque no tengo tiempo y ya me es bastante difícil cuidar de mí misma algunas veces."
La compresión lleno expresión del hombre. -"Realmente lo querías, ¿no?"
Ella asintió con la cabeza.- "Nos casamos hace más dieciséis años."
Una mirada atónita pasó sobre su cara. -"Guau. Creo que mi matrimonio fue la relación
más larga que he tenido y sólo duró dos años. ".
Ella tomó una respiración profunda.-"Lo que hablemos aquí, ¿Quedara entre nosotros?"
Él entrecerró un poco los ojos más mientras daba un trago a su bebida. Dejó el vaso sobre la mesa.- "No soy un chismoso si eso es lo que me estás preguntando."
-"No pensé que lo fueras. Esto es vergonzoso y no me gustaría que se repitiera lo que voy a decirte. ¿Puedes darme tu palabra? He oído que sois dignos de confianza. "
Él asintió con la cabeza. -"Por supuesto. No voy a repetir nada, pero estoy un poco confundido. No quieres comprar un caballo así que ¿necesitas un poco de ayuda en tu casa? ¿Eso es todo? "
Ella vaciló.- "Me enteré de lo que hizo tu hermano."
La ira le hizo apretar los labios en una línea firme.- "Sí, bueno, sé que hay muchas personas que estarán felices de que pierda mi rancho. "
Ella no sabía qué decir a eso.- "Yo ... Maldita sea, esto es más difícil de hacer de lo que pensé que sería. Ensayé esto en mi cabeza cientos de veces en mi coche mientras venia a la ciudad, pero ahora que estoy frente a ti..... es muy vergonzoso. "
Él le frunció el ceño.- "Sólo di lo que quieres decir."
Ella miró su ojos azules y su intensa mirada hizo que se le acelerara el corazón. Tenía los ojos sexys y hermosos.- "La empresa en la que trabajaba mi marido tuvo que pagarme una indemnización por su muerte. Yo no quiero entrar en los detalles, pero alguien metió la pata y Ted murió. Ted también tenía una póliza de seguro de vida por lo que el dinero no es un problema para mí. "Hizo una pausa.- "Tengo suficiente dinero
para salvar tu rancho".
Él abrió los ojos como platos y la mano que sostenía su bebida se tensó, hasta que los nudillos se le pusieron blancos. Transcurrieron largos segundos. -"¿Estarías dispuesta a prestarme el dinero? Te lo devolveré. Traté de conseguir otro préstamo, pero no me lo concedieron por lo de mi hermano ".
-"No te voy hacer un préstamo." Ella vaciló.- "Quiero decir, yo podría hacer eso, pero entonces tendrías que devolverme el dinero. Yo ... eh ... tengo un trabajo en mente para que te ganes el dinero. "
Navarro le frunció el ceño de nuevo.- "Mira, no sé qué tipo de trabajo tienes para mí,
pero yo no sólo sé de caballos. Soy hábil con un martillo y un bote de pintura. He hechomuchas reparaciones en mi propia casa a través de los años. Puse el suelo nuevo y arregle el tejado. Yo-"
-"No es eso", le interrumpió ella, la vergüenza hizo que se le sonrojaran las mejillas. -"Esto es realmente más difícil de decir de lo que pensaba."
Él la observó por unos segundos largos y luego dijo.- "Sólo tienes que decirlo".
Ella asintió con la cabeza, dejó caer la mirada a su pecho para no mirarle directamente a
los ojos.- "Estuve casada durante dieciséis años y amaba a mi marido, pero él trabajaba demasiado. "Hizo una pausa.-"He oído que eres un verdadero hombre y que eres ... uh ... muy bueno en el dormitorio."
Trina vio como su pecho subía y bajaba de forma rápida, obviamente, se había sorprendido por lo que le había dicho. No le culpó por la reacción tampoco. El silencio entre ellos era absoluto y muy incómodo. Ella deseó que se abriera un agujero debajo de su asiento y que se la tragara. Era mucho peor decirlo que pensarlo. Podía sentir su mirada sobre ella y supuso que se había quedado tan sorprendido que no tenia palabras. Se lamió los labios secos y decidió terminar la conversación más humillante de su vida.
-"Es difícil decir esto. Amaba a Ted pero era, um, no era muy bueno en la cama. Pensé que tal vez podría darte el dinero que necesitas para salvar tu rancho y que tal vez, a cambio, podrías darme lo que quiero. Puedo imaginarme lo que estarás pensando de mí ahora mismo, pero no soy una mala persona. Nunca tuve una gran vida sexual. Estoy sola y ... mierda ... "Ella se quedó en silencio. -"Esto es una mala idea."
-"¿Es esto una especie de broma?" Su voz sonó dura.
Trina levantó la mirada y vio lo enfadado que estaba, sus ojos azules brillaban de furia. Ella negó con la cabeza. -"Ahora mismo me encantaría decirte que era una broma. Lo
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siento mucho. He oído que tu novia rompió contigo y sé que necesitas el dinero. Yo ... estoy tan.... lo siento. "Ella se levantó.- "Olvídalo".
Navarro se lanzó hacia delante y agarró su brazo. Ella jadeó suavemente y su mirada voló de regreso a la suya. Todavía parecía furioso.
-"Siéntate".
La mano la soltó al segundo que su culo tocó la silla de nuevo. La ira en la mirada de
Navarro se desvaneció rápidamente. Ella miró su cara y luego dejó caer su atenciónsobre la mesa. Ella no podía recordar estar tan avergonzada en toda su vida, pero tampoco antes le había hecho a un hombre una proposición sexual. Ella realmente tenía la necesidad de ver a un psiquiatra e hizo una nota mental de pedir una cita por la mañana. Sólo esperaba que él no le dijera a nadie lo desesperada y triste que estaba. Si el rumor, de que estaba ofreciendo dinero a los hombres a cambio de tener relaciones sexuales con ella, se propagaba por toda la ciudad, ella nunca sería capaz de mirar a nadie a la cara.
-"Mírame".
Ella levantó la mirada, era incapaz de resistirse a su orden o a su voz profunda autoritaria. Sus miradas se encontraron. Sus ojos eran todavía hermosos, incluso cuando la miraban con desconfianza.
-"Dime la verdad. Esto es una maldita broma, ¿no es así? "
-"No."
Él le frunció el ceño.- "¿Me estás ofreciendo dinero por follarte? ¿Es eso lo que estás diciendo? "Su voz era apenas un susurro.
-"Sé que es una locura, siento haberte molestado."
-"¿Es eso lo que estás diciendo?" su voz se profundizo.
Ella no apartó la mirada de él a pesar de que sentía el impulso de hacerlo.- "Oí hablar a unas mujeres en el restaurante mientras estaban almorzando, dijeron que eras muy bueno en la cama. Hicieron comparaciones con otros hombres. Yo nunca he ... "Ella suspiró y apartó la mirada,era incapaz de mirarle a los ojos mientras le confesaba sus
secretos más oscuros.- "Amaba a Ted pero cada vez que le decía que hiciera algo queme gustaba, él se enfadaba conmigo y actuaba como si hubiera herido sus sentimientos,
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así que opte por callar." Su mirada se alzó de nuevo a sus ojos.- "Te voy a prestar el dinero, es lo menos que puedo hacer y no quiero que pierdas tu rancho. Haz el contrato y me lo llevas. Estoy muy arrepentida de haberte pedido esto y por favor no se lo digas a nadie. Si la gente se entera, no podría seguir viviendo en esta ciudad. "Ella se puso de pie y se fue.
La vergüenza que estaba experimentando era casi un dolor físico. Acababa de proponer sexo a un hombre y había sido la cosa más estúpida que había hecho en toda su vida.
Las manos le temblaban mientras sacaba las llaves de su camioneta del bolso, al menos, nadie había escuchado la conversación. Esperaba que Navarro no se lo dijera a nadie porque ella realmente no quería mudarse. Le encantaba la casa que había comprado. Se sen´ta muy tonta por ofrecerle dinero a un hombre a cambio de sexo. Una mano la agarró del brazo y la hizo jadear. Dejó caer sus llaves y se dio la vuelta. Era Navarro quien estaba detrás de ella. Él era treinta centímetros más alto que ella y más grande de lo que se había imaginado.
-"Nuestra conversación no ha terminado". Navarro mantuvo su agarre sobre ella.-"Todavía estoy aturdido, pero no he dicho que no."Era su turno para quedarse sin palabras.-"Adelante. Cuéntame más ".
Ha!la, se ordenó.- "No sé qué más decir. Acabo de tener la loca idea de que podríamosayudarnos mutuamente. Tengo dinero y tú ... "Ella se ruborizó. -"Me siento atraída por ti y he oído que eras muy bueno en la cama. Nunca he tenido …. ... "Ella suspiró, dejó caer su mirada a su pecho.- "Nunca tuve un gran orgasmo con mi marido y quería..... "Hizo una pausa. -"Es una locura, ¿verdad?" Ella le miró otra vez. -"Te prometo que iré a un psiquiatra. Por favor, no le digas a nadie esto, porque me moriría de vergüenza si todo el mundo se entera de lo patética que soy. "
Él la miró en silencio durante largos segundos. -"¿Hablas en serio".
Ella dio un paso atrás cuando le soltó el brazo y él enganchó los pulgares en losbolsillos delanteros de sus jeans. Trina se inclinó para recoger las llaves del suelo, se enderezó y lo miró de nuevo.
-"Lo siento mucho y digo en serio lo del préstamo. Sólo redacta un contrato justo y me llevas los papeles para firmarlos. Te firmaré un cheque y tú decidirás la forma y cantidad de los pagos. "
Ella abrió la puerta, dejó el bolso en el asiento de atrás y cuando iba a subir a su asiento una mano le agarró de nuevo el brazo. Se dio la vuelta para encontrarse con la mirada de
Navarro, su cuerpo casi tocaba el suyo, pero no pudo leer la intensa expresión en su cara.
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-"Eres una mujer atractiva y podrías tener a un montón de hombres en tu cama."
Parecía un buen tipo y se merecía que fuera honesta.
-"Tengo treinta y ocho años, no soy joven y mi cuerpo ya no es como era hace veinte años. Sólo me he acostado con tres hombres en toda mi vida, soy un poco tímida y no salgo. "Hizo una pausa.-" Me siento atraída por ti, porque no soy ciega y tú casi eres perfecto. "
Una pequeña sonrisa curvó sus labios carnosos.-"Casi ¿eh?¿que me hace casi perfecto?"
Ella vaciló.- "Seguro que tienes un espejo en tu casa. Eres muy atractivo y lo sabes. "
-"¿Y qué te hace pensar que tendrías que pagarme por follarte? Tú también eres atractiva, Trina. "
-"Vi a tu ex-novia y yo podría ser su madre. Ella tiene las piernas largas y es hermosa. "
-"También es una perra fría", dijo con dureza, todo rastro de humor desapareció en su voz.
-"Si. Lo es. "
Él arqueó una ceja. -"¿Hablas en serio sobre esta oferta?"
Ella lo miró fijamente y se preguntó si él estaba jugando con ella.¿Se lo estaba
pensando?.
-"¿Cuáles serian los términos si acepto hacer esto?"
-"No lo sé".Trina se quedó asombrada. Lo estaba considerando¿en serio?- "No llegué tan lejos. Pensé que podríamos hablar de ello si reunía el valor suficiente para acercarme a ti, estaba segura de que no aceptarías, así que no pensé en nada más que en la propuesta ".
Navarro deslizo la palma de la mano por su brazo y agarró su mano, sorprendiéndola. Él
la miró fijamente durante largos segundos y luego abrió la boca.
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-"Si pagas el préstamo de mi hermano yo te daré dos meses". Sus palabras la dejaron sin habla.-"Digamos cinco noches a la semana durante esos dos meses. Podríamos pasarlas en mi casa o en la tuya, pero sería más fácil si fuera en la mía o de lo contrario tendría que marcharme antes del amanecer porque tengo que cuidar a los caballos. Te daría las siete noches, pero mi trabajo es muy duro y mi cuerpo necesitará dormir un par de noches completas ".
-"¿En serio? ¿Lo harás? "Ella estaba aún sorprendida.
Una sonrisa asomó a sus labios. -"No puedo creer que vayas a pagarme por tocarte." Se
acercó más.- "Quieres que te folle, ¿verdad?" Su voz se hizo más profunda a medidaque hablaba.
Trina sabía que no podría haber hablado ni siquiera para salvar su vida en ese momento así que asintió con la cabeza.
-"Entonces lo haré y te enseñaré lo que te has estado perdiendo."
Sus rodillas se debilitaron pero se las arregló para asentir con la cabeza, deseando que él supiera que ella estaba aceptando lo que le estaba ofreciendo.
-"Vamos a mi casa."
Una sonrisa asomó a sus labios. -"Ahora".
-"Pero pensé que te gustaría arreglar primero lo del dinero." El pánico la golpeó con fuerza, realmente pensó que no estaría de acuerdo con su loca idea, pero no sólo había dicho que sí, también quería que se fuera a su casa "a#ora$.- "Pero ..." Ella era incapaz
de pensar.
La intensa mirada de Navarro recorrió su cuerpo lentamente antes de volver a sus ojos. -"Esta noche es gratis, Trina. Mañana hablaremos de dinero y de los dos meses del contrato. "Su mano la soltó y dio un paso atrás. -"Ven a mi casa, Trina. Sígueme. "
Se dirigió hacia su destartalada camioneta. Ella vaciló un instante, se subió a su camioneta y se puso el cinturón de seguridad. Le había pedido que fuera a su casa para tener sexo. Cuando él sacó su vehículo de la plaza de aparcamiento, ella arrancó el suyo. Navarro Raine se había ofrecido a llevarla a su cama, para mostrarle todas las
cosas que se había perdido en el dormitorio. Su cuerpo tembló ante la idea de lo que
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podría hacer con ella cuando estuvieran solos. nCuando él salió de la zona de aparcamiento, ella le siguió.
Capítulo Dos
La casa de Raine era la típica casa española de dos plantas. Estaba demasiado oscuro para echarle un buen vistazo al exterior, pero a juzgar por el porche delantero, que estaba muy bien iluminado, era obvio que Navarro se encargaba de las reparaciones de su casa. Trina estacionó detrás de su camioneta y salió de su vehículo.
Navarro la observó en silencio mientras se acercaba a él. Estaba de espaldas a la luz, por lo que no pudo ver sus ojos en la oscuridad. Ella estaba muy nerviosa y estaba segura de que él debió verlo en su cara porque le dijo.
-"No voy a hacerte daño."
-"Lo sé. Nunca he hecho esto antes. "
Él se rió entre dientes. -"¿Qué es exactamente lo que no has hecho antes?"
-"Nunca he ido a la casa de un extraño tan rápido. Sólo tuve sexo con esos hombres después de conocernos por un tiempo. "
-"Te prometo que vas a disfrutar de lo que hagamos."
Trina se estremeció. -"Está bien. Cuento con eso. "
Navarro volvió a reír, extendió la mano para agarrar la suya, se volvió y la llevó hacia los escalones del porche de la casa. Se detuvo en la puerta, la abrió y le precedió la entrada. La luz del cuarto ya estaba encendida cuando entró, lo que le permitió a Trina echarle un buen vistazo a la gran habitación, estaba muy poco amueblada, pero limpia.
La habitación sólo tenía un sofá, una mesa de entrada con una lámpara, un grantelevisor y una mesa de café. Era evidente que allí no vivía ninguna mujer.
-"¿Dormitorio? ¿O prefieres otra habitación de la casa? ¿La cocina tal vez? "
Ella miró su hermoso rostro y su mirada sexy, observándola, le hizo sonrojar.- "No lo sé. No soy muy buena en esto. Es por eso que quería pagarte ".
Él se rió entre dientes y le apretó la mano, cerro la puerta detrás de ellos y usó su mano libre para echar el cerrojo.- "Vamos a mi habitación."
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Ella se dejó llevar por un pasillo y subió las escaleras. Pasó por delante de un par de puertas cerradas y entraron en una que estaba abierta y oscura. Él entró, encendió la luz y dejó que Trina observara su habitación mientras él le soltaba la mano y cerraba la puerta del dormitorio detrás de ellos.
La habitación era bastante básica, sólo una cama grande con dosel, cubierta con un edredón negro y unas cuantas almohadones grandes a lo largo del cabecero de madera. Dos mesitas de noche y un tocador, eran los únicos muebles en la habitación. También había dos puertas que estaban abiertas, una daba a un pequeño vestidor lleno de prendas de vestir y la otra a su cuarto de baño, podía ver la bañera desde donde estaba. Un par de pantalones vaqueros y unos calzoncillos boxer negros en el suelo, eran la única señal
de desorden en su habitación, por lo demás, estaba limpio.
-"¿Tienes algo de beber?" Trina se enfrentó a él.
Navarro asintió. -"Sí, pero no te quiero borracha".
-"Oh." Ella tragó.- "Pensaba en relajarme".
-"Desnúdate y súbete a la cama." Poco a poco, sonrió, mostrando unos dientes blancos.
-"Así que piensas ir derecho al grano, ¿eh?" Su corazón martilleaba en su pecho.
-"Si. Estoy duro desde que salimos del bar. Desnúdate y súbete a mi cama, Trina. Te quiero boca arriba y en el centro. "
La incertidumbre se apoderó de Trina y vaciló.- "¿Podemos apagar las luces?. No bromeaba con lo de que mi cuerpo no es como antes. Me veo mejor con la ropa puesta, confía en mi".
Su sonrisa murió y sus ojos azules se estrecharon.- "Si quieres que esto funcione tienesque hacer lo que digo, Trina. Tienes que seguir mis órdenes. Quítate la ropa. Te quiero boca arriba, en el medio de mi cama y completamente desnuda. ¿Está claro? "
Nerviosa y con las mejillas sonrojadas, Trina empezó a desnudarse. Le había pedido verla desnuda, pero esperaba que él no cambiara de idea una vez que la tuviera así. Ella miró su edredón negro y se dio cuenta de que con su piel tan blanca, probablemente, iba a parecer una muerta tendida sobre la cama, al menos, esperaba no dejarlo ciego. Se quitó los zapatos, luego se desabrochó los vaqueros y los deslizó por sus piernas. Se sacó la camiseta por la cabeza y la dejó caer al suelo. Se quedó en su ropa interior negra
y levantó la mirada, él todavía estaba vestido, mirándola en silencio.
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-"Lo haré. Quítate el sujetador y las bragas. "
Mierda. Se mordió el labio de nuevo, llegó detrás de ella para desabrocharse el sujetador y apartó la mirada de él mientras lo dejaba caer al suelo. Esperaba que no se enfriara cuando viera sus pechos, un poco caídos y su vientre un poco redondeado. Ella se sonrojó de vergüenza, asumiendo que él estaba firme por todas partes. Enganchó los pulgares en sus bragas y las deslizo hacia abajo mientras se preguntaba como reaccionaria ante el hecho de que se afeitaba completamente el sexo. Ella se movió hacia su cama y al subirse a ella se dio cuenta de que la cama era más alta de lo normal. Se puso en el centro del colchón y lentamente rodó sobre su espalda para estirarse como él había ordenado. Ella se arriesgó a mirarle de nuevo.
Navarro miraba su cuerpo mientras se desabrochaba los botones de la camisa, pero no vio disgusto en sus ojos mientras la observaba. En realidad parecía excitado. Ella se puso más nerviosa cuando él se la quitó y ella fijó su atención en su pecho desnudo.
Ella sintió como su vientre se estremecía mientras miraba su pecho perfectamente musculado y decidió que no era casi perfecto, era más que perfecto. Tenía la piel de color canela y un estómago musculoso y firme. Tenía una fina linea de pelo desde su ombligo hasta la cinturilla de los pantalones. Sus dos manos agarraron la parte delantera de ellos y los abrió lentamente.
-"¿Trina?"
-"¿Sí?" le tembló la voz.
-"No estés tan asustada, cariño."
-"Estoy nerviosa". Imaginó que la honestidad era lo mejor y sólo lo admitió.
Él se rió entre dientes. -"Yo soy el que está bajo presión".
Su mirada se encontró con la de él. -"¿Bajo presión?"
-"Crees que soy digno de un montón de dinero." Él sonrió. -"Relájate, cariño."
La sonrisa fue instantánea y algo que ella no pudo evitar.- "Eres increíblemente
atractivo. Ojalá yo lo fuera. "
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Él se dejó los calzoncillos negros y se acercó a la cama. -"No tengo ninguna maldita queja." Su mirada se deslizó sobre su cuerpo. -"Confía en mí. Para mi, te ves muy sexy."
-"Gracias."
Ella lo miró a los ojos. -"¿Qué?".
-"¿Qué quieres?"
-"No lo sé. Te lo dije, yo no ... "Ella suspiró, un poco avergonzada, pero estaba lista para ser completamente abierta con él.- "Sé lo que significa el término vainilla porque lo
leí en un libro. Mi vida sexual ha sido completamente vainilla. He leído sobre muchas cosas, pero no he hecho nada. Sé que estuve casada durante dieciséis años, pero él no quiso experimentar nada nuevo "
Navarro la miraba.- "Es por eso que me quieres. Quieres experimentar todas esas cosas con las que has fantaseado, ¿verdad, cariño? "
Trina se sintió avergonzada pero ya había llegado demasiado lejos como para no ser completamente sincera .- "Sí. Nunca antes me había sentido tan atraída por un hombre. Te dije que escuché a algunas mujeres en la cafetería hablando de ti. Dijeron que tú eres realmente bueno en el sexo y que eres ... "
-"¿Qué soy qué?" Él se acercó más a ella.
-"Um ... muy bueno en la cama y un poco salvaje. Eso es lo que dijo una de ellas. Una dijo que tú le diste un montón de diversión y otra estuvo de acuerdo con ella. "
Sus oscuros ojos azules brillaron con diversión mientras sus labios se curvaron en una sonrisa sexy. -"Así que recibí buenas críticas, ¿eh?"
Ella le devolvió la sonrisa.- "Sí".
Navarro se la quedó mirando.- "Tus días de sexo aburrido han terminado. Yo soy el hombre que te va a llevar a un nuevo nivel sexual. Dime lo que has hecho y luego te enseñaré lo que te has estado perdiendo. "
Trina se lamió los labios, su mirada se deslizo una vez más sobre su musculoso pecho y abdominales, se dijo silenciosamente que él era el hombre más sexy del planeta para
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ella. Su cuerpo ya estaba respondiendo sólo con verlo y ni siquiera se había metido en la cama con ella.
-"¿Trina?"
Ella lo miró a los ojos.- "¿Sí?"
-"Estoy deseando poner mis manos y mi boca sobre ti, pero también es necesario que respondas a mis preguntas. ¿Ves lo que me haces? Si no empiezas a hablar pronto
tendremos esta conversación mucho más tarde. "
Su enfoque bajó por su cuerpo hasta sus calzoncillos boxer negros y su corazón comenzó a latir con fuerza. Trina no pudo dejar de mirar su gran erección. Navarro no sólo la deseaba de cintura para arriba. Ella podía ver claramente lo mucho que la deseaba porque su gran polla estaba muy dura bajo los calzoncillos. Le impresionó y la intimidó .
-"¿Nena ?"
Ella se encontró con los ojos de Navarro. -"¿Sí?"
-"No me digas que te has quedado sin palabras. Responde a mis preguntas, si me deseas."
Trina le deseaba tanto que le dolía. Tuvo que obligarse a pensar para poder recordar lo que él quería saber, pero le era difícil concentrarse cuando Navarro estaba tan cerca de ella.
-"Lo más salvaje que hice con mi marido fue al estilo perrito."
Trina notó la sorpresa que apareció en el rostro de Navarro al tomar una respiración profunda. -"¿Alguna vez has tenido sexo anal?"
Ella negó con la cabeza. -"No, puedo decir que también me lo he perdido".
Una carcajada brotó de él y su expresión se suavizó.- "¿A tu marido le gustaba el sexo oral?"
-"Conseguí que lo hiciéramos un par de veces, pero no lo disfrute ."
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Su humor se evaporo y el shock transformo sus rasgos.- "¿Nunca?"
-"Lo intentamos, pero como a él no le gustó, no lo hicimos de nuevo. Esas dos veces me hizo sentir demasiado incómoda y no las disfruté tanto como él. "
Navarro negó con la cabeza.- "Casi eres virgen, ¿verdad, cariño?"
Ella se encogió de hombros. -"Probablemente".
-"¿Te calentabas?"
-"Pero él te dejaba en la estacada final"
Sus mejillas se ruborizaron por la vergüenza de haber pasado dieciséis años de sexo aburrido en su matrimonio .- "Yo lo amaba y él era un buen hombre."
-"Pero él no sabía satisfacerte en la cama, ¿verdad?" Navarro no esperó una respuesta. -"Quiero que te relajes y que confíes en mí. ¿Puedes seguir mis órdenes? Tienes que hacer lo que yo digo, nena, sin dudarlo. Te gustará lo que te hago y si no lo hace, descubriré lo que te gusta. Tienes que ser honesta conmigo en todo. No fingir ni una maldita cosa, aunque tengo la sensación de que te has vuelto una experta con los años. ¿Lo tienes claro? "
-"Sí".
Hizo una pausa.- "¿Te has hecho pruebas?"
Ella lo miró, confundida.- "¿Pruebas de qué?"
Él la miró fijamente, esperando. Ella asintió, entendió lo que le estaba preguntando cuando dirigió su atención hacia los muslos y luego le devolvió la mirada.
-" Me hago chequeos regulares y no tengo nada. ¿No vamos a usar condones? Quiero decir, ¿Tú sabes con seguridad que no tienes nada? No estoy tomando la píldora ".
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-"Yo estoy limpio y no puedo dejarte embarazada." Su boca se tensó.- "Cuando era más joven tuve un accidente. Soy estéril."
La compasión brotó en su interior. -"Lo siento. ¿Estás bien? "
-"Si me estás preguntando si todo en mi funciona, lo hace, pero no puedo tener hijos".
A Trina le molestó lo que vio en su mirada, enojo y un poco de resentimiento.- "Mi marido tampoco podía tener hijos."
El rostro de Navarro palideció por un segundo. -"¿Perdón?"
-"Ted tuvo leucemia cuando era un adolescente y lo dejó estéril. Se veía tan enojado como tú cuando me has dicho que no podías dejarme embarazada. Lo siento por ti. A Ted no le importaba, ya que no quería tener hijos. "
La boca de Navarro se tensó.- "¿Te lo dijo después de casaros?"
-"No. Él me lo dijo en nuestra primera cita. ". -"¿No querías tener niños?"
Ella vaciló. -"Yo los quería, pero amaba a Ted. Hablé con él un par de veces sobre la adopción, pero su horario de trabajo era bastante agitado y me dijo que eramos felices sin ellos. Él realmente no quería hablar de ello, así que lo deje estar. "
Navarro estaba mirándola fijamente con una extraña expresión en el rostro. -"Abre las piernas de par en par para mí."
-"Caray." Ella se quedó atónita.- "De cero a sesenta ¿eh?"
Él sonrió. -"Hazlo por mí".
Trina se lamió los labios y abrió las piernas. Agradecida a la flexibilidad que había conseguido gracias al yoga, que había empezado a practicar después de la muerte de Ted. Se avergonzó un poco cuando la mirada de Navarro se apartó de sus ojos y recorrió lentamente su cuerpo hasta que quedó fija sobre su sexo expuesto.
Ella lo vio tomar una respiración profunda.- "Hermoso".
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Él la miró a los ojos y una sonrisa curvó sus labios. Ella le arqueo las cejas.
-"¿Qué?"
-"¿Hermoso?"
Él asintió con la cabeza.- "Oh sí, nena. ¿Te gusta mi cuerpo? "
-"Tú estás en forma y te ves muy bien. Tienes un cuerpo duro y a todo el mundo le gusta eso. "
Él se rió entre dientes.-"Si realmente me gustaran los cuerpos duros no creo que estuviera con mujeres. ¿Alguna vez has escuchado el dicho "los polos opuestos se atraen"? Bueno, me siento malditamente atraído por ti y me pone muy caliente tu cuerpo y tus curvas. Tu piel me recuerda a la leche y a mi me encanta la leche ".
Tragó saliva, se relajó un poco en la cama y se sintió aliviada al saber que le gustaba su cuerpo. Se reunió con su mirada y vio la pasión en sus ojos. Ella deslizo la mirada por su cuerpo hasta el bulto en sus calzoncillos y le miró de nuevo a la cara, él estaba
sonriendo, mirándola divertido y ella esperaba que no fuera a costa de ella.
-"Cierra los ojos y siente, ¿de acuerdo? Te ves preparada para huir ".
Ella le obedeció y se obligó a relajarse, estaba lista y dispuesta a confiar en él. Dos grandes manos tocaron suavemente la parte interna de sus muslos. La textura de sus manos era áspera y la sensación la sobresaltó. Ella abrió los ojos y Navarro le sonrió de nuevo.
-"¿Acaso mi toque te asustó?"
-"Tus manos son ásperas".
-"Tengo muchos callos por el trabajo. ¿Te hago daño en la piel? Eres tan malditamente suave. "Sus manos rozaron el interior de sus muslos otra vez.
Ella negó con la cabeza.- "Simplemente me sorprendiste. En realidad, se siente bien. "
Él se rió entre dientes.- "Cierra los ojos y mantén las piernas muy abiertas para mí. Yo te
voy a mostrar lo bien que se siente el sexo oral, nena. Te prometo que vas a disfrutar de lo que te haga. "
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Se obligó a relajarse, a pesar de que su corazón latía con fuerza y se recordó a sí misma que eso era lo que ella quería. Navarro era un extraño por lo que si las cosas salían mal, Bueno, casi nunca le veo en la ciudad, pensó. %e #aré el préstamo, pero no tendré que #a!lar con él, puede enviarme el c#eque todos los meses si esta cosa del se&o no '
Él le abrió los labios de su coño con los pulgares y ella se tensó, aunque no era su intención. El aire acarició su clítoris. No, no es aire, pensó , es caliente. El corazón le dio un vuelco al comprender que él estaba respirando cerca de su sexo y un segundo más tarde su lengua caliente se deslizó por su capullo sensible. Ella se sacudió un poco, pero no trató de cerrar los muslos. Navarro empujó los hombros contra sus muslos, para que no pudiera cerrarlos cuando su boca se cerró completamente sobre su clítoris. Trina se agarró frenéticamente a su edredón y él empezó a chupar y a lamer su sexo.
El placer la atravesó. Nunca antes había experimentado algo así. Era demasiado, demasiado intenso, pero no intentó alejarse de esa boca. Ella era consciente de su respiración entrecortada, jadeante y del fuerte gemido que salió de sus labios. La
pasión apenas le permitía pensar, pero podía reconocer la diferencia entre el hombre que la tocaba ahora y el hombre con el que había pasado dieciséis años.
(ed nunca me #izo esto. Él sólo le había acariciado el clítoris con el dedo antes de tenersexo. La boca caliente de Navarro y su lengua..... iban a matarla.
-"Oh Dios", jadeó.
Se agarró a la colcha aunque lo que realmente quería era empujar sus dedos en el cabello de Navarro. Ella se resistió a la tentación, tenia miedo de que se detuviera si lo tocaba y no quería que lo hiciera. El placer que la atravesó hizo que su cuerpo se tensara, que arqueara la espalda y aunque ella no tenía intención de hacerlo, que empujara su coño contra la boca de Navarro. Ella gimió y luego gritó cuando el clímax
atravesó violentamente su cuerpo.
Navarro aparto la boca de su clítoris y sopló sobre su brote palpitante. Su corazón latía con fuerza. Mantuvo los ojos cerrados mientras su cuerpo se estremecía por las ultimas oleadas del orgasmo. Ella se masturbaba a menudo, pero los orgasmos que conseguía con sus dedos o su vibrador, palidecían en comparación con este.
Navarro empujó suavemente un dedo dentro de ella y eso le hizo gemir. Navarro maldijo en voz baja y ella se obligo a abrir los ojos.
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Él se inclinó sobre ella y su cara quedo encima de la de ella. Apoyó una mano en la cama, a su lado, mientras que su otra mano se quedó entre sus muslos. Deslizo su dedo profundamente en su interior y lo sacó cuando sus ojos se encontraron.
-"Mierda. Estas tan malditamente apretada, nena. ¿Cuándo fue la última vez que tuviste relaciones sexuales? "
-"¿Con una persona o con mi vibrador?"
Una sonrisa curvó sus labios y él se echó a reír.- "Las dos cosas. Cualquiera. ¿Cuándo
fue la última vez que algo además de mi dedo estuvo dentro de ti? "
-"Tengo uno de esos vibradores pequeños y delgados. Lo utilicé la semana pasada. La última vez que tuve relaciones sexuales fue con mi marido, una semana antes de morir y de eso hace catorce meses ".
Los ojos de Navarro se oscurecieron con pasión mientras retiraba el dedo completamente de su coño y la penetró con dos, estirándola lentamente. Trina gimió ante la sensación, levantó los brazos por encima de su cabeza, se agarró a la almohada y arqueó las caderas contra sus dedos.
-"Maldita sea. Estás tan malditamente caliente y apretada, pero no quiero hacerte daño, nena. "
Trina negó con la cabeza. -"No lo harás. Sé que ha pasado mucho tiempo, pero te deseo. Realmente te deseo ".
Los dedos de él se retiraron de su interior, Navarro se incorporó y agarró la cintura de sus calzoncillos boxer.- "Oh, vas a tenerme, Trina. Estoy tan jodidamente duro que
podría romper ladrillos en estos momentos, pero estás tan malditamente apretada quetemo hacerte daño ".
Trina vio como Navarro bajo sus calzoncillos por sus muslos y tuvo que contener un grito de asombro al ver lo monstruosamente grande que era, él era mucho más grande que cualquier hombre con el que hubiera estado y estaba malditamente duro. Ella nunca había pensado que el pene de un hombre pudiera ser atractivo, pero el suyo lo era.
-"¿Trina?"
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-"No quiero usar condón. ¿Te parece bien? No sería lo mismo para mí y quiero sentirte sin usar una goma. "
Ella asintió con la cabeza.- "Está bien. Por favor ... "
-"¿Estás segura? porque una vez que esté dentro de ti me matara si tengo que detenerme. Te deseo demasiado y quiero mi polla donde estuvieron mis dedos."
-"Estoy segura."Le deseaba, pero cuando miró a su gruesa erección, dudó que pudiera
tomarle sin dolor. -"Te deseo".
Se subió a la cama y su cuerpo bajó sobre ella, atrapándola debajo de él. Él apoyo la mayor parte de su peso en sus codos, para no aplastarla mientras ajustaba sus caderas entre sus piernas abiertas.
-"Envuelve tus piernas alrededor de mi cintura", la instó suavemente.- "Y mantén los brazos por encima de tu cabeza. Me encanta como se alzan tus pechos. "
Ella siguió sus instrucciones al pie de la letra, envolvió las piernas alrededor de su cintura y apoyó los talones de sus pies sobre su culo apretado y musculoso. Navarro pro!a!lemente tiene un culo incre)!le, pensó, ya que todavía no lo había visto sin pantalones, pero podía imaginárselo. Navarro le agarró las muñecas con una mano. Ella le miró a los ojos.
-"¿Qué estás haciendo?"
-"Yo soy grande y no quiero que te muevas. Quedate quieta y relajate para mí. "
Estaba empezando a asustarla, pero se relajó y no tiró de sus muñecas. Navarro movió las caderas y le sorprendió que él no necesitara una mano para guiar su sexo al de ella. La gruesa punta de su polla la acarició a lo largo de su raja y jugó con su clítoris unos segundos antes de que él se moviera un poco y se colocara contra la entrada de su coño mojado. Navarro empujó, lento y ella sintió como su ancha polla fue estirándola. Había pasado más de un año sin tener relaciones sexuales y su vibrador era pequeño, delgado y de unos diez centímetros de largo. Navarro era mucho más grande que eso.
-"Oh Dios", gimió ella, cuando se deslizo más profundo.
-"No es Dios, nena", la voz de Navarro era profunda y dura.-"Joder, estás muy apretada. ¿Te hago daño? "
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Tragó saliva cuando él se detuvo en su interior.-"No. Puedo sentir como me estiras, pero se siente bien. ¿Encuentras en el camino? "
Él soltó un bufido.- "No está tan mal, nena. ¿Estás lista para tomarme entero? "
-"Follame", susurró.
Se arrepintió de sus palabras en el instante en que las pronunció. Ella abrió la boca para explicarle que siempre había deseado decir algo así y que nunca se había atrevido con
su marido, pero Navarro sólo gruñó y se tomó sus palabras al pie de la letra.
-"Lo haré, nena."
Él la penetró totalmente de un empujón y luego empezó a moverse dentro de su cuerpo.
Trina echó la cabeza hacia atrás, gritó y gimió ante la sensación de Navarro llenándola mientras bombeaba dentro y fuera de ella y aumentaba la velocidad de sus embistes .
Su respiración agitada y gemidos llenaron la habitación junto con los crujidos de su cama. Él movió las caderas, la follo desde un ángulo nuevo y ella se sorprendió cuando
unos minutos más tarde otro clímax la golpeó. Navarro gimió su nombre cuando secorrió dentro de ella y empujó sus caderas contra ella hasta que se calmó.
-"Oh Dios mío", jadeó.
Navarro levantó su pecho de encima ella un poco para mirarla a los ojos. Se veía sexy como el infierno cuando sus labios se curvaron en una sonrisa de satisfacción.
-"Eso fue increíble, ¿verdad, cariño?"
Tragando el nudo en la garganta, Trina asintió.- "Guau".
Riéndose, Navarro le guiñó un ojo mientras le soltaba las muñecas.-"Sin embargo, deberías dejar de decir “Oh Dios”. Creo que me he ganado el que grites mi nombre en lugar del suyo. "
Ella se rió de sus palabras. -"Tal vez creo que eres un dios."
Se echó a reír con ella a la vez que se retiraba del interior de su cuerpo.- "Me gusta eso."
Él se tumbo de lado en la cama, junto a ella y apoyó la mejilla en su mano. Mantuvo uno de sus muslos sobre los de ella-. "Eso fue realmente increíble, Trina."
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Ella sonrió. -"¿Así que debo entender que no te importará seguir haciendo esto?"
Su sonrisa murió. -"No olvide tu proposición de pagarme para que te joda, pero no creo que sea lo correcto. "
Sus mejillas se sonrojaron mientras lo miraba fijamente.- "Por favor, no cambies de opinión. ¿Fue tan malo? Quiero decir, sé que estás acostumbrado a mujeres más
jóvenes, pero te prometo que no me apegare emocionalmente a ti. Soy rubia, pero soy
más inteligente que eso. Sé que entre nosotros sólo habrá sexo. "
-"Déjame reformular eso. Me siento culpable de aceptar tu dinero a cambio de algo que quiero hacer de todos modos. No estoy preocupado porque te apegues a mí. "
Capítulo Tres
Es una locura, pensó Trina cuando estacionó su camioneta frente a la casa de Raine a las ocho de la noche. El nerviosismo se instaló en la boca de su estómago. La noche anterior había sido increíble. Después de su pequeña charla, Navarro le había ofrecido que pasara la noche en su cama, pero ella se había sentido mal al pensar en su marido,
Ted, así que le había dicho que tenía que volver a su casa. Necesitaba un tiempo a solas para pensar.
Ted estaba muerto y sabia que él querría que ella siguiera adelante con su vida, pero él se sorprendería si supiera que iba a pagar a un hombre para que tuviera sexo con ella. El echo de que pagaría a Navarro con el dinero que le habían dado por la muerte de Ted, le hizo sentirse peor. Ella suspiró y salió de su vehículo. Aunque la culpa le hizo sentir mal, no iba a dejar de ver a Navarro.
La puerta principal se abrió antes de que pudiera llamar y la visión de Navarro, con
nada más que unos pantalones negros y su cabello mojado, le hizo coger aire. Él parecía un Dios-del-sexo, con ese cuerpo musculoso y duro. Dejó que su mirada vagara sobre su ancho pecho antes de mirarle a la cara.
Navarro parecía divertido cuando le sonrió.- "Hola. Eres rápida. Entra "
Trina entró en su casa y cerró la puerta detrás de ella. Poco a poco se volvió y se encontró con la sonrisa de Navarro. Su cuerpo instantáneamente respondió a los recuerdos de la noche anterior. Sus pezones se endurecieron y sus bragas se mojaron y eso que él ni siquiera la había tocado.
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-"¿Tienes el contrato? Tengo un cheque bancario certificado ".
Su sonrisa murió.-"¿Estás segura de que quieres hacer esto, Trina? No tienes que pagarme. "
Ella asintió con la cabeza.- "Perderás tu rancho sin mi dinero, ¿no?"
Su boca se torció en una mueca de dolor.- "Sí".
-"Entonces estoy segura de que quiero darte el cheque." Hizo una pausa.- "Sólo espero que tu hermano no lo haga de nuevo." -"Me cedió su parte del rancho. Ya no puede pedir préstamos sobre la propiedad. Ven a mi oficina. Lo tengo allí para que puedas leerlo tranquilamente e hice dos copias. Una que dejare en mi caja fuerte y otra para ti . "
Trina siguió a Navarro por un pasillo, pasaron la cocina y entraron en su oficina. Navarro se sentó en el borde de la gran mesa y cogió las hojas de papel que estaban a centímetros de su culo. Trina se sentó en una silla, dejó su bolso sobre su regazo, agarró los papeles que él le estaba ofreciendo y los leyó.
Por fin levantó la vista después de leer la ultima página.- "Fuiste muy específico".
Él sonrió.- "Cuando nuestro contrato haya terminado podemos quemarlos. Puse que me haces un préstamo, sin intereses, a cambio de relaciones sexuales y que me entregas el dinero en un cheque para no tener problemas fiscales, jurídicamente es un préstamo entre amigos ".
Aceptó la pluma que le ofrecía, firmó las hojas y luego se las devolvió con la pluma, le observo firmarlos mientras ella sacaba el sobre de su bolso. Navarro dudó antes de
aceptar el cheque.
-"¿Estás segura de esto, Trina? Podríamos hacer un contrato legal. Realmente no me siento bien aceptando el dinero a cambio de relaciones sexuales ".
Ella se echó a reír.-"Nunca pensaste que una mujer más mayor que tú te pagaría por tener sexo, ¿eh?. "
Se echó a reír y se relajo.-"Tú sólo eres dos años mayor que yo. Tengo treinta y seis años. "
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-"Toma el cheque porque, sinceramente, no quiero que lo pierdas. Aun tengo el dinero que recibí por el seguro de vida de mi marido. El mercado de la vivienda aquí es muy bajo por lo que pagué menos de la mitad del dinero que conseguí por la venta de mi vieja casa. Acepta el dinero y mantén tu rancho ".
Su sonrisa murió.- "Gracias" Él tomó el sobre y lo tiró en un cajón.
-"¿No vas a comprobar la cantidad?"
Él negó con la cabeza, se puso de pie.- "Confío en ti. Vamos arriba. Me di una duchadespués de comer para no dejar el olor a vaquero en tu cuerpo. "
Se puso de pie, sonriendo.- "Olor a vaquero, ¿eh? ¿A qué huelen los vaqueros? "
Él le cogió la mano y se rio.- "Hoy a mierda. Limpié los establos y esparcí el
estiércol fresco en el jardín, por lo que podría decir que ha sido un día de mierda. "
Ella se rió con él y lo siguió hasta su habitación. Cuando cerró la puerta con llave, Trina
se acercó a la cómoda para dejar su bolso. Se quitó los zapatos, giró y se encontró conla mirada de Navarro, que se había sentado en la cama.
-"¿Por qué siempre cierras la puerta con el cerrojo?" Ella miró a la puerta y luego a él. -"¿Alguien más vive aquí? Creí que vivías solo. "
-"Por el momento estoy solo en la casa, pero mis hermanos vienen a veces. Prefiero no correr ningún riesgo, ya que me ha pasado antes. ", Sonrió.- "Fue vergonzoso".
Ella se echó a reír.- "Te sorprendieron con los pantalones bajados, ¿eh?"
-"Y algo más." Él le guiñó un ojo.- "Aprendí que las mujeres se cabrean mucho si uno de mis hermanos hace algún comentario sobre lo que ven."
-"Estás bromeando, ¿verdad? Oh, tienes que darme los detalles ".
Él sonrió.-" Hace unos años ate a la mujer con la que estaba saliendo a mi cama. Estaba follandola cuando mi hermano menor, River, volvió a casa sin avisar. Tenia su pezón en mi boca cuando River entró y me dijo que debería haber puesto un paño entre la cuerda
y su piel para que no le dejara marcas. Ella empezó a gritar como una loca. "
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-"No puedo ni siquiera imaginarlo. Pobres."Ella se rió sin embargo.-"Eso fue realmente vergonzoso."
Navarro asintió con la cabeza, sin dejar de sonreír.- "Me dejó y me acusó de tener una familia extraña, dijo que mis hermanos y yo éramos unos pervertidos".
-"Pensaba que tenías sólo un hermano."
-"Nop. Somos cinco. Yo soy el segundo más viejo. "
-"Oh. Entonces, ¿ Dónde están ellos? "
-"Drake es el mayor y es un abogado que vive en Dallas. Le habría pedido el dinero sino acabara de pasar por un desagradable divorcio que lo ha dejado destrozado, no quería que se preocupara también por esto. Dusty es el que pidió el préstamo, él tiene un montón de problemas." Navarro casi gruñó las palabras. -"Y por último, pero no por eso menos importantes, están los gemelos, River y Ryder, pero casi nunca están en casa. Ryder está en una banda de música, él toca la guitarra y suele venir un par de días, dos o tres veces al año. Ríver trabaja cuidando del ganado del circuito de rodeo y vive a unos cincuenta kilómetros de aquí, la pagan una mierda pero a él le encanta su trabajo. "
-"Oh. ¿Tú hermano toca la guitarra en un grupo conocido? "
Él negó con la cabeza.-"No a menos que escuches música nativa. Ellos no son realmente populares excepto para sus seguidores,que en su mayoría son otros nativos americanos."
Trina le miró con curiosidad, abrió la boca, pero luego la cerró. Se moría de ganas de preguntarle muchas cosas, pero no quería ser grosera. Navarro vaciló y casi pareció leer su mente.
-"Drake, Dusty y yo tenemos el mismo padre y madre. Mi padre era Apache y mi madre era holandesa. Se nos considera mestizos. Mi madre murió cuando éramos muy jóvenes y Dusty tenía sólo unos meses de vida. En ese entonces mi padre tenia que viajar muy lejos para vender los caballos y supongo que ella no quería que se preocupara cuando se cortó en la mano, en realidad pensó que no necesitaba un médico, pero cogió una infección en la sangre. Cuando ella pidió ayuda estaba demasiado enferma como para combatirla. El embarazo de Dusty la había dejado muy débil. Perderla casi mató a mi padre. Él la amaba mucho y se quedó totalmente devastado cuando mi madre murió. Tal vez por eso acabó trayendo a una prostituta a nuestra casa. "
Trina se sorprendió pero trató de ocultarlo y le dio su mejor mirada de simpatía. Navarro la observó con una sonrisa, mirándola muy divertido.
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-"¿Así que ya no es uno de los propietarios del rancho?"
Navarro asintió.- "Ahora sólo somos cuatro." Dejó que su mirada recorriera su cuerpo.-"Ya hemos hablado suficiente, nena. Quitate esa ropa. Llevo todo el día maldito pensando en lo que quiero hacer contigo. "
Ella se echó a reír y agarró el bajo de su camiseta.- "Genial. Estabas pensando en tener sexo conmigo mientras quitabas la mierda ", bromeó.- "Qué romántico".
-"Te sorprenderías de las cosas en las que estaba pensando."
-"Podrías contármelo." Ella se desnudo.
Navarro dejó que su mirada caliente se deslizara por su cuerpo mientras agarraba la cintura de sus pantalones y los bajaba por sus piernas. Trina se quedó sin aliento cuando vio que no llevaba nada bajo de ellos. Su mirada se quedó fija en su impresionante erección durante unos segundos antes de mirarle a la cara. Él estaba sonriéndole.
-"Espero que te guste lo que ves tanto como a mí me gusta lo que veo."
-"Tienes el arma preparada para disparar ¿eh?." Ella se echó a reír.- "Entonces, ¿Donde quieres que me ponga?"
-"Estás con un vaquero, cariño".
-"Sip, eres un vaquero." Ella le guiñó un ojo.
Se acercó a una silla, que no estuvo en la habitación la noche anterior y se sentó en ella,empujo sus caderas hacia el borde de la silla y le hizo un gesto con un dedo para que se acercara a él, después señaló el suelo delante de él y abrió los muslos para hacer espacio para ella. Trina se acercó a él, pero vaciló.
-"Creo que soy bastante buena en el sexo oral", dijo en voz baja.
Sus cejas se alzaron mientras sonreía. -"Apuesto a que sí , pero no era eso lo que tenía en mente. Esto es para ti, querida. Date la vuelta ".
No tenía ni idea de lo que estaba haciendo, pero se dio la vuelta y le dio la espalda a Navarro. Sus manos agarraron sus caderas firmemente y la atrajo hacia él.
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-"Paso a paso. Te quiero en mi regazo y mirando a la puerta. "
Estaba intrigada, había estado encima durante el sexo muchas veces, pero nunca a horcajadas sobre un hombre y de espaldas a él. Ella levantó la pierna y la paso por encima de las suyas y él la empujó hacia abajo, por lo que quedó sentada sobre sus muslos y con su polla rígida presionándose contra su espalda.
-"Confía en mí, no te dolerá" Su voz era suave.
Ella se lamió los labios y lo miró por encima del hombro.- "Yo confío en ti."
El la miró a los ojos durante unos largos segundos y asintió.- "Quiero que sepas que nunca te haría daño. ¿Alguna vez te han atado? "Una mano le soltó la cadera para agarrar algo que estaba en el suelo, detrás de la silla.
Ella vaciló.- "Una vez me ató las muñecas."
Él levantó la cuerda y se la mostró. Ella se puso nerviosa al no saber que iba a hacer conella. Él pasó la cuerda sobre su piel y esa sensación extraña le hizo estremecerse.
-"Quiero atarte todo el cuerpo con la cuerda, pero no la garganta. No te haré daño, nena. Nunca te haría eso, ni siquiera estará demasiado ajustada. Imaginate como se sentirá cuando este follándote y tus pezones se froten contra la cuerda. ¿Me dejas hacer esto? "
Sonaba erótico y quería probarlo, su cuerpo se excitó con tan sólo pensar en lo que él estaba describiéndole. Él deslizó la otra mano entre sus piernas bien abiertas y acarició su coño mojado.
-"Esta idea te excita. Me pones tan caliente, nena."apartó la mano de su coño. -"Pon los brazos detrás de ti y junta las manos."
Ella apenas vaciló e hizo lo que le estaba pidiendo. Navarro comenzó a envolver la cuerda alrededor de sus hombros, alrededor de sus pechos y terminó en su cintura, pero sin apretarla demasiado. La textura áspera de la cuerda contra su piel era una sensación increíble. Se dio cuenta del por qué le había atado los brazos detrás de la espalda, para que no tuviera la capacidad de tocarlo. Él podía hacer lo que quisiera con ella , pero ella no podría hacer nada sin sus manos. Dominación.
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Su mano se deslizó por su espalda y se metió entre sus muslos abiertos para acariciar su sexo, con la punta de un dedo hizo círculos lentos alrededor de su clítoris.
-"Estás tan mojada", dijo en voz baja y abrió las piernas más para separar las suyas. Con la otra mano agarró la cuerda en su cintura, para evitar que se cayera de su regazo al suelo.- "Sólo siente y relajate, Trina."
Asintió con la cabeza y cerró los ojos. Se relajó y simplemente disfrutó de las sensaciones de su cuerpo. Con cada respiración que daba, su piel se frotaba contra la cuerda, haciendo que su coño se humedeciera y su clítoris doliera por la necesidad. Sabía que probablemente debería estar avergonzada de lo mojado que estaba, pero estaba demasiado excitada para siquiera considerarlo. Un gemido escapó de sus labios cuando Navarro frotó su clítoris con el pulgar.
-"¿Se siente bien?"
-"Espera a que esté dentro de ti."
-"Ahora sería un buen momento. Te quiero dentro de mí. "Su vientre se estremeció cuando ella se lo imaginó haciendo precisamente eso.
Navarro se echó a reír.- "Todavía no, pero pronto, nena. Sólo siente ".
Trina disfrutaba del placer que le estaba dando con su pulgar, pero su cuerpo estaba tenso por la necesidad de correrse. Él apartó el pulgar de su clítoris palpitante y lo metió dentro de su coño, ella gritó ante la maravillosa sensación de su dedo en su interior. Ella le quería dentro de ella y lo tenia. Él movió el pulgar dentro de ella y tocó el punto de detrás de su clítoris, una y otra vez. Ella jadeó y gimió ante esa nueva sensación.
-"Se debe sentir muy bien" dijo en voz baja. -"Justo aquí." Él movió su pulgar contra ese punto de nuevo.
-"Dios, me duele".
-"Usa mi nombre, Trina. Dios no te está tocando. Soy yo".
La folló con el pulgar y ella empujó sus caderas contra la mano. Él sacó el dedo de su interior y torturó un poco más su clítoris.
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-"A mi también, nena." Vaciló. -"Levanta un poco."
Apoyó los pies en el suelo y levantó el cuerpo de su regazo. Le resultó difícil levantarse con las piernas abiertas, pero consiguió mantener el equilibrio gracias a que él mantenía un firme control sobre la cuerda.
-"Baja lentamente sobre mí regazo", le ordenó.
Navarro ajustó la punta de su polla contra su entrada, ella bajó su cuerpo y soltó un fuerte gemido cuando varios centímetros de su eje penetraron su coño. Dejó que su cuerpo bajara hasta que su dura polla quedó profundamente enterrada en su interior y ella se sentó en su regazo. Trató de moverse, pero el brazo alrededor de su cintura la inmovilizaba.
-"Despacio, bebé. Yo estoy a cargo en este viaje.-" La voz de Navarro se había profundizado. -"Yo marcare el ritmo. Yo tengo el control total y tú sólo tienes que sentir."
-"Me vas a matar".
-"Nunca. Te prometo que haré que grites mi nombre. No dejaré que te caigas. Te tengo, tú tan sólo confía en mí. Quiero que te inclines hacia adelante y que no apoyes los pies en el suelo. Relájate y esto sacudirá tu mundo ... literalmente. "
-"Por favor ... me duele. Necesito ... "
-"Lo sé", le dijo. -"Vamos. Haz lo que digo, nena. "
Se inclinó hacia delante como Navarro le había pedido. Le preocupaba caerse de su regazo y que su cara se estrellara contra el suelo, lo único que le impedía hacerlo era sus manos agarrando la cuerda. Él movió sus caderas antes de que ella pudiera protestar. Su empuje duro y repentino en el interior de su coño le hizo gritar de felicidad. Las cuerdas se frotaban sobre su piel y sus pezones con las embestidas de Navarro. Sensaciones de puro éxtasis la inundaron.
-"Oh Dios", gritó ella.
-"Navarro". De repente se quedó inmóvil, con su polla hundida profundamente en su coño.- "Grita mi nombre, Trina. Dilo. "Empezó a moverse de nuevo, esta vez más lento, con empujes profundos mientras inclinaba su cuerpo un poco más hacia adelante ya que él la tenía completamente bajo su control. -"Punto-G. ¿Recuerdas mi dedo? Ahora siente esto, nena. "
Ella podía sentirlo todo desde este nuevo ángulo. Él se retiro lentamente hacia atrás y la penetro profundo de nuevo, haciéndola jadear.
-"¿Estás lista, nena? Estás tan malditamente apretada que no voy a durar mucho más esta vez. Te voy a follar fuerte y rápido, porque estoy a punto de explotar ".
Ella no tuvo la oportunidad de contestarle, antes de que pudiera abrir la boca para decirle que estaba lista. El brazo envuelto alrededor de su cuerpo se tensó en su cintura y su otra mano se metió entre sus muslos para frotar su clítoris. Su polla moviéndose dentro y fuera de su coño, con empujes rápidos y profundos y la cuerda frotando sus pezones, la enviaron directamente a un brutal orgasmo. Ella grito por la fuerza del placer cegador que atravesó su cuerpo.
Navarro gritó algo que no entendió mientras la llenaba con su liberación. Él tiró de la cuerda para atraerla hacia él y envolvió los brazos alrededor de ella, abrazándola contra su pecho. Los dos respiraban pesadamente. Él la abrazó así durante un largo minuto, mientras ambos se recuperaban y sus respiraciones se desaceleraban a un ritmo más normal.
-"Entonces, ¿qué piensas de los vaqueros ahora? Has sido atada y marcada, cariño".
Trina se rió. -"Marcada, ¿eh?"
-"Oh, sí", le dio un beso en el cuello. -"Tu piel tan delicada está un poco enrojecida por las cuerdas". Aflojó su agarre sobre ella y comenzó a quitarle la cuerda.- " Estoy
deseando lamer esos pezones. Ellos estarán tan condenadamente sensibles que es probable que te corras cuando ponga mi boca sobre ellos. El enrojecimiento de tu piel se desvanecerá rápidamente, pero esos bebés me recordaran durante un par de días. Estás marcada por mí, cariño. "
Ella bajó la mirada a su cuerpo cuando la liberó completamente de la cuerda y vio que su piel estaba un poco enrojecida, pero no le dolía. Por otra parte, los pezones le latían y los sentía un poco hinchados. Navarro cerró los muslos y la levantó mientras se retiraba de su cuerpo, la ayudó a ponerse de pie y él se puso de pie, detrás de ella. Sus miradas se encontraron cuando él la hizo girar en sus brazos para mirarlo. Navarro no dijo ni una
palabra mientras la llevo y la tumbo en su cama, después se tendió a su lado, bajó la
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mano ahuecó sus bolas. Se inclinó hacia adelante, se encontró con su mirada apasionada y luego pasó la mirada por su pecho, por su estómago plano y la fijó en el tesoro que sostenía entre sus manos. Se lamió los labios mientras se inclinaba sobre ella y su pelo cayó hacia adelante, sobre su estómago y caderas mientras abría la boca.
Ella lo lamió como si fuera un helado, giro su lengua alrededor de su corona, mientras los dedos de Navarro se deslizaban entre su pelo largo. Ella tomó todo lo que pudo de su polla en el interior de su boca y él inhaló fuertemente. Ella sonrió alrededor de su eje.
Le había echo esto a su marido a menudo y él siempre le había dicho que era muy buena en esto. La polla de Navarro era más gruesa y más grande , pero aún así, la chupó
profundamente en su boca. Ella se movió hacia arriba hasta que casi se la sacó de su boca y dejó que sus dientes rasparan suavemente la cabeza de su polla. Él aspiró más aire y luego gimió cuando de repente bajó la boca y lo tomó más profundo. Ella empezó a chuparlo más rápido.
-"Joder, nena", se quejó Navarro.- "Eres muy buena en esto. Maldita sea ".
Ella relajó su garganta e inclinó la cabeza mientras contenía la respiración. Ella no lo había hecho en mucho tiempo, pero estaba segura de que podía tomar la polla de Navarro más profundo. Tomó más, hasta que la pudo sentir en la garganta. Ella tragó con fuerza una y otra vez, sabia que él sentiría esos músculos en la cabeza de su polla.
-"Oh, mierda", se quejó Navarro.
Necesitaba aire, de modo que retrocedió y respiró por la nariz. Ella casi se sacó su pene de la boca, deslizo la lengua alrededor de la cabeza de nuevo y volvió a respirar hondo. Empujó hacia adelante rápidamente y lo llevó de vuelta a su garganta. Ella tragó saliva y empezó a mover su cabeza, arriba y abajo, bombeando su polla más rápido. Pudo sentir cuando su cuerpo se tensó ante la anticipación de su orgasmo pero ella lo mantuvo en su boca. Al segundo, su cuerpo empezó a temblar y su liberación llenó su boca. Navarro gimió y ella se trago todo su semen.
Ella lo bombeó lentamente, lamiendo y chupando todo lo que tenía para darle hasta que él le agarró la cabeza para obligarla a retirarse de su polla. Ella se lamió los labios y le miró. Tenia sus ojos azul oscuro casi cerrados y parecía un poco aturdido, pero muy satisfecho.
Se aclaró la garganta y sonrió.- "¿Supongo que te ha gustado?"
-"Me gustó" Él la atrajo hacia su cuerpo.-"¿Quieres casarte conmigo?" Él le guiñó un ojo.
EL CLUB DE LA ROSA
Ella se rió de su broma y se tumbó a su lado. Le puso la mano en el estómago y él pasó el brazo bajo su cabeza para que lo utilizara como almohada. Él estaba tumbado sobre su espalda y ella de lado, frente a él. Navarro le sonrió.
-"¿Dónde diablos has aprendido a hacer eso?"
Ella sabía que sus mejillas estaban enrojecidas por la vergüenza.- "Vi algunos videos porno".
Él arqueó las cejas. No pudo ocultar la sorpresa en su rostro, pero él sonrió.- "¿Enseñan
a hacer esas cosas con la garganta en los videos?" Ella asintió con la cabeza.-"¿Qué máshas aprendido?"
-"Eso fue todo. Era la única habilidad que pensé que a mi marido le gustaría que aprendiera. "
-"¿Cómo te convenció de eso?"
Ella le frotó el estómago para distraerse, realmente no se sentía cómoda hablando de ello. -"Él no lo hizo. Aprendí por mi cuenta para darle una sorpresa. "
-"Apuesto a que fue una grata sorpresa ."
Ella levantó la vista y se encontró con la mirada de Navarro.- "Él no se quejó."
La sonrisa de Navarro se desvaneció y se puso serio.-"Tuvo mucha suerte de tenerte, Trina. Tendría que haber hecho todas las cosas que querías hacer en la cama ya que tú
si que estuviste dispuesta a aprender para complacerlo. "
Se mordió el labio. -"Trabajaba muy duro. He-"
Navarro rodó hacia ella y su boca reclamó la de ella en un beso. El shock la atravesó y ella se apartó de su boca. Sus miradas se encontraron y Navarro le frunció el ceño. Él ahuecó su cara.
-"¿Qué pasa? ¿No puedo darte besos? "
-"Yo ..." Ella miró a su ahora fláccida polla apoyada contra su muslo. -"Tú...".
Él arqueó una ceja.- "Yo ¿Qué?"
EL CLUB DE LA ROSA
Ella lo miró fijamente,confundida.- "¿No te molesta hacerlo? Los hombres no besan a las mujeres después del sexo. "
-"Déjame adivinar. ¿Nunca te besó después de follarte? "la voz Navarro sonó un poco enojada. -"Yo no soy él." Él reclamó su boca de nuevo.
Trina se relajó y no intentó alejarse cuando Navarro exigió que abriera la boca con sus labios y lengua. No era un beso hambriento o apasionado, era suave y dulce, el tipo de beso que se daban dos amantes enamorados. Ella apartó rápidamente ese pensamiento.
Navarro la observó cuando finalmente se apartó de sus labios.- " Me encanta la mezcla de nuestros sabores juntos. Acabas de saborearte en mí. Sólo somos nosotros dos y lo que hacemos cuando nos tocamos. Nunca te apartes de mis besos, cariño. "
Ella asintió con la cabeza.-"No lo haré".
Él sonrió. -"Sé que aún es temprano para ti, pero estoy agotado. ¿Me dejas abrazarte mientras dormimos? Yo no ronco normalmente, pero si lo hago, solo tienes que darme un codazo y decir que me de la vuelta. "Sus ojos brillaron.- "¿Qué malos hábitos descubriré que tienes mientras dormimos juntos? ¿Roncas? ¿Babeas? "
-"Si estoy muy cansada puede que empiece a roncar, pero por lo general me despierto cuando lo hago. Creo que tu cama está a salvo de mi baba. "
-"No estarás a salvo de mí.&q

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