+ All Categories
Home > Documents > Educador Checo - Revista de la Universidad de México · que se éstaba realizando el milagro del...

Educador Checo - Revista de la Universidad de México · que se éstaba realizando el milagro del...

Date post: 27-Oct-2018
Category:
Upload: trinhcong
View: 212 times
Download: 0 times
Share this document with a friend
2
que se éstaba realizando el milagro del arte que posee todo gran director: el de galvanizar a mú- sicos aletargados, imbuyéndoles vitalidad, pujan- za, entusiasmo. Difícilmente reconocería uno en los instrumentistas que, como/en un arranque de éxtasis; proclamaban cada unO' a través de su ins- trumento, la gloria de Beethoven, a los apáticos y rutinarios profesores de atril de antes del se- gundo intermedio. La diferencia entre la manera .de tocar de ellos en las primeras dos obras del programa y la obra final fue la misma que existe entre el concepto estoico de la vida como deber, y el epicúreo de la vida como· placer. Aquello fue Beethoven en gran escala. El pri- mer tiempo lo dirigió el maestro Vásquez a base de una gran tensión emocional, subrayada por una admirable y siempre pujante precisión rít- mica. Fue tocado por la Orquesta con "brío" y con brillo. El "Andante" fue cantado por los mú- sicos a las órdenes de Vásquezcon serena digni- dad y con vigoroso aplomo. El pasaje lleno de mi-s teriosos presagios antes del "Crescendo" y el estallidf> triunfal de toda la orquesta, tuvieron toda la tenebrosa significación que debe caracte- rizarlo, y en el "Allegro" final, llevó el director a su grey de músicos con toda felicidad (descon- tando un: pequeño "incidente") hacia los acordes finales, que fueron tocados con una convicción que dejó electrizados a los oyentes. No recordamos una ovación más justamente rendida a una artista intérprete que la que el pú- . blico que llenaba no sólo los asientos, sino tam- bién todos los pasillos del Anfiteatro de la Pre- paratoria, le dió a José F. Vásquez, al terminar éste su memorable dirección de la Quinta Sin- fonía, que precisamente por haber sido un tan efi- caz vehículo para la revelación, a través de la Orquesta, de toda la majestuosidad de la titánica música de Beethoven, ha revelado al director como una personalidad musical de primer orden en el . arte de la batuta. Comenius Patriota Educador Checo E N la historia de Checoeslovaquia uno de los hombres que se destaca mayormente en el terre- no cultura] que da fama a ·la vieja Bohemia, es Juan Amos Komensky, o Comenius (1592-1670), educador y útimo Obispo de la iglesia de la hermandad de Bohemia y Moravia, iglesia a tra- vés de la cual, justo es decir, que "Bohemia ins- cribió su nombre en el libro de oro de la civiliza- ción". La vida de komensky estuvo llena de pe- nalidad y aventuras, pues el destino le llevó al destierro y le trajo constantemente de un lugar a otro. Fue después de la batalla de la Montaña Blanca (1620), cuando el gobernante de la casa de Hamburgo, ordenó castigos implacables para los checos rebeldes, cuando el hogar de Comenius fue arrasa:d.o· por las tropas españQlás; Y,él'mismo tuvo que permanecer oculto durante· seis años en la casa de uno de sus amigos. Vino después la orden de expulsión, conforme a lll..cuallos protes- tantes que se negaroil a aceJ}tar la fé·cafólbl. fue- ron desterrados· y .confiscadas sus propiedades. Así Komensky tuvo que salir de su país en 1628, y nunca más volvió a él. La mayor parte de su vi- da transcurre en Polonia, Suecia, Germania, Ing- laterra, Holanda y algunos otros lugares. Murió en Amsterdam, el 15 de noviembre de 1670, y fue sepultado en Naarden, el 22 del mismo mes. Komensky es el caso más elocuente del emi- grante checo que en las horas más terribes para Sil páís, consagra todos sus iIlfuerzos a la lucha por la liberación de su patria y, al propio tiempo, encamina estos esfuerzos en favor de la humani- dad entera. Sus actividades fueron· múltiples; há- llanse reunidas en 150 obras-tratados de filoso- fía, de teología, etc.-, pero su más destacada sig- nificación se encuentra en sus esfuerzos en pro de la educación del mundo,en pro del progreso de las ciencias en general. En e! terreno del trabajo cien- tífico,Comenius es mirado justamente, no ,sólo como el fundador de los modernos métodos sobre educación, sino, lo que es más, como'un "pio- neer" del humanismo. "No es ·justo ni conveniente--escribe en su Di- dáctica--que solamente los hijos de los ricos y de los nobles sean enviados a la escuela; todos debieran concurrir sin distinción ninguna: 10 mis- mo e! aristócrata que el plebeyo, los ricos y los pobres, las muchachas y muchachos de todas las ciudades, pueblos y aldeas, y esto, principalmente porque todo el que nace hombre tiene como fina- lidad suprema el ser hombre, esto es, criatura in- teligente, que ha de mostrar su semejanza COI) el Creador". "Ni existe razón suficiente para que el sexo débil sea excluído de todo arte y sabiduría. Por- que también la mujer ha sido hecha a la imagen .de Dios; también ella es partícipe de la Gracia y de! Reino que ha de venir; también ella ha re- cibido el don de una mente clara y es suscepti- ble de alcanzar la sabiduría, en ocasiones, mejor aún que e! sexo fuerte. La mujer tiene expedito el camino de los negocios y también, frecuente- mente, el del gobierno de las naciones; puede aportar su concurso dando excelentes consejos· a los reyes y a los príncipes y, también, en las cien- cias niédicas y en otros, para la humanidad, im- portantes asuntos... ¿ Por qué, entonces, hemos de enseñarles el alfabeto y alejarlas después Cle los libros? ¿ Es que dudamos de su discreción? Si es así, pensemos tn que, mientras sus cabezas se hallen· mejor ocupadas con las ideas, menos espacio ofrecerán a la liviandad que, generalmen- te, es causada por el vacío de la mente". El más preciado tesoro de todo checoslovaco es e! "Ruego. de una Madre Moribunda a la Unión de los Ber- manos", que es-la despedida que dirigió Come- nius a su pueblo antes de partir para el destierro. Al leer esta página se tiene' la· impresión de que es un profeta quien habla desde 10 alto de una cumbre, donde se está fuera ya del espacio y del tiempo".
Transcript

que se éstaba realizando el milagro del arte queposee todo gran director: el de galvanizar a mú­sicos aletargados, imbuyéndoles vitalidad, pujan­za, entusiasmo. Difícilmente reconocería uno enlos instrumentistas que, como/en un arranque deéxtasis; proclamaban cada unO' a través de su ins­trumento, la gloria de Beethoven, a los apáticosy rutinarios profesores de atril de antes del se­gundo intermedio. La diferencia entre la manera

.de tocar de ellos en las primeras dos obras delprograma y la obra final fue la misma que existeentre el concepto estoico de la vida como deber,y el epicúreo de la vida como· placer.

Aquello fue Beethoven en gran escala. El pri­mer tiempo lo dirigió el maestro Vásquez a basede una gran tensión emocional, subrayada poruna admirable y siempre pujante precisión rít­mica. Fue tocado por la Orquesta con "brío" ycon brillo. El "Andante" fue cantado por los mú­sicos a las órdenes de Vásquezcon serena digni­dad y con vigoroso aplomo. El pasaje lleno de mi-steriosos presagios antes del "Crescendo" y elestallidf> triunfal de toda la orquesta, tuvierontoda la tenebrosa significación que debe caracte­rizarlo, y en el "Allegro" final, llevó el directora su grey de músicos con toda felicidad (descon­tando un: pequeño "incidente") hacia los acordesfinales, que fueron tocados con una convicciónque dejó electrizados a los oyentes.

No recordamos una ovación más justamenterendida a una artista intérprete que la que el pú- .blico que llenaba no sólo los asientos, sino tam­bién todos los pasillos del Anfiteatro de la Pre­paratoria, le dió a José F. Vásquez, al terminaréste su memorable dirección de la Quinta Sin­fonía, que precisamente por haber sido un tan efi­caz vehículo para la revelación, a través de laOrquesta, de toda la majestuosidad de la titánicamúsica de Beethoven, ha revelado al director comouna personalidad musical de primer orden en el .arte de la batuta.

Comenius Patriota ~

Educador ChecoEN la historia de Checoeslovaquia uno de loshombres que se destaca mayormente en el terre­no cultura] que da fama a ·la vieja Bohemia, esJuan Amos Komensky, o Comenius (1592-1670),~élebre educador y útimo Obispo de la iglesia dela hermandad de Bohemia y Moravia, iglesia a tra­vés de la cual, justo es decir, que "Bohemia ins­cribió su nombre en el libro de oro de la civiliza­ción". La vida de komensky estuvo llena de pe­nalidad y aventuras, pues el destino le llevó aldestierro y le trajo constantemente de un lugara otro. Fue después de la batalla de la MontañaBlanca (1620), cuando el gobernante de la casade Hamburgo, ordenó castigos implacables paralos checos rebeldes, cuando el hogar de Comenius

fue arrasa:d.o· por las tropas españQlás; Y,él'mismotuvo que permanecer oculto durante· seis años enla casa de uno de sus amigos. Vino después laorden de expulsión, conforme a lll..cuallos protes­tantes que se negaroil a aceJ}tar la fé·cafólbl. fue­ron desterrados· y .confiscadas sus propiedades.Así Komensky tuvo que salir de su país en 1628,y nunca más volvió a él. La mayor parte de su vi­da transcurre en Polonia, Suecia, Germania, Ing­laterra, Holanda y algunos otros lugares. Murióen Amsterdam, el 15 de noviembre de 1670, yfue sepultado en Naarden, el 22 del mismo mes.

Komensky es el caso más elocuente del emi­grante checo que en las horas más terribes paraSil páís, consagra todos sus iIlfuerzos a la luchapor la liberación de su patria y, al propio tiempo,encamina estos esfuerzos en favor de la humani­dad entera. Sus actividades fueron· múltiples; há­llanse reunidas en 150 obras-tratados de filoso­fía, de teología, etc.-, pero su más destacada sig­nificación se encuentra en sus esfuerzos en pro dela educación del mundo,en pro del progreso de lasciencias en general. En e! terreno del trabajo cien­tífico,Comenius es mirado justamente, no ,sólocomo el fundador de los modernos métodos sobreeducación, sino, lo que es más, como'un "pio­neer" del humanismo.

"No es ·justo ni conveniente--escribe en su Di­dáctica--que solamente los hijos de los ricos yde los nobles sean enviados a la escuela; todosdebieran concurrir sin distinción ninguna: 10 mis­mo e! aristócrata que el plebeyo, los ricos y lospobres, las muchachas y muchachos de todas lasciudades, pueblos y aldeas, y esto, principalmenteporque todo el que nace hombre tiene como fina­lidad suprema el ser hombre, esto es, criatura in­teligente, que ha de mostrar su semejanza COI) elCreador".

"Ni existe razón suficiente para que el sexodébil sea excluído de todo arte y sabiduría. Por­que también la mujer ha sido hecha a la imagen

.de Dios; también ella es partícipe de la Graciay de! Reino que ha de venir; también ella ha re­cibido el don de una mente clara y es suscepti­ble de alcanzar la sabiduría, en ocasiones, mejoraún que e! sexo fuerte. La mujer tiene expeditoel camino de los negocios y también, frecuente­mente, el del gobierno de las naciones; puedeaportar su concurso dando excelentes consejos· alos reyes y a los príncipes y, también, en las cien­cias niédicas y en otros, para la humanidad, im­portantes asuntos... ¿ Por qué, entonces, hemosde enseñarles el alfabeto y alejarlas después Clelos libros? ¿ Es que dudamos de su discreción?Si es así, pensemos tn que, mientras sus cabezasse hallen· mejor ocupadas con las ideas, menosespacio ofrecerán a la liviandad que, generalmen­te, es causada por el vacío de la mente". El máspreciado tesoro de todo checoslovaco es e! "Ruego.de una Madre Moribunda a la Unión de los Ber­manos", que es-la despedida que dirigió Come­nius a su pueblo antes de partir para el destierro.Al leer esta página se tiene' la· impresión de quees un profeta quien habla desde 10 alto de unacumbre, donde se está fuera ya del espacio y deltiempo".

La 'Sombra de Nerval

en-los bosques deValois

7

a mirar. Era en un patio, frente a los antiguos es­tablos. Seis muchachitas daban vueltas en derre­dor de una de sus compañeras, tomadas de lasmanos. y cantaban lindamente:

. Escon?ido tras un cercado, yo me habia dete­I1Id~, baJO los ab~tos, c~yas anc1:as ramas, cuandoel vIento las 1110Vla, ha~lan. un rUIdo como de presaque se ?_esborda. Na?le, Sll10 yo, que reparara enestas mnas. La mUjer del guarda preparaba lace~~a: la veía yo ir y venir en su cocina, A ratosrell?;:haba un caballo o tiraba de su almartigón,haclendolo sonar. La ronda se detuvo un momen­to, pero para entonar muy pronto una nueva can­ción, con un tono más vivo. Se trataba ahora deuna doncella a quien tres capitanes, de paso porel país, hahían raptado y conducido a Senlis.

"Cuando la hermosa donc-ella, nos dice Ner­val, se da cuenta de que su comportamiento hasido un tanto ligero-después ele haber presididola cena-, decide fingirse muerta, y los tres caba­lleros son lo bastante ingenuos para creer en elengaño. Y entonces se preguntan a dónde ten­drán que llevarla.

Ma fille, il faut clwnger d'amourO~t vous resteres dans la tour.

CARCOFRANCISPor

"Yo· creo, ante Dios, que una vez pasada latormenta ·del odio, que el pecado ha atraído sobre'

_nuestras cabezas, el bienestar volverá a tí, j ohpueblo checo! Tuya es esta herencia, a ti con­fiada antes que a otros países, amado pueblo. Tor­narás a la posesión de tus derechos, como pro­pios, en cuanto Dios haya merced de ti y el Se­ñpr, nuestro Salvador, te devuelva al camino de

. la verdad"."No pierdas tu ánimo, oh nación' mia consa­

grada al Señor; no perecerás. Que tus hombrescrezcan en número. Bendice, oh Señor, sus haza­ñas y sean a ti gratas sus obras. Abate las fren­tes de sus enemigos y, quienes te odien, no es le­vanten ya más. Tuya, Señor, será la salvación yla bendición que ha de caer sobre mi pueblo".

E S preciso ir siempre hasta el fin de las influen­cias. Mientras más temprano se resienten, máspronto también logra uno librarse de ellas. Algu­nas se reabsorben por si mismas. Y las otras vie­nen más tartie a formar parte del temperamentode cada quien, al cual temperamento proporcio~

nan un equilibrio, según muy diversas reacciones.Yo no puedo casi creer en un talento absoluta­

mente independiente. Baudellaire está ya en Ner­val, a' lo menos por cierto acento de desesperaciónsecreta y fascinadora:

le suis le tétiébreux-la veuf-l'incollsolé.¿ Habéis visitado aguna vez Chaalis, Ermenoll­

vilIe y su cementerio de Montefontaine ? Todo allíes claro, sonriente. Aquellos bosques, en que elabedul es el árbol que d0l11ina, nos hacen pensar,yo no sabría decir por qué, en mujeres rubias ygraciosas, de rizadas cabelleras. Y el aire tan vivoy tan salubre, no obstante los estanques, pareceque sólo podría inspirar esas delicadas baladasque todas las niñas de Valois y sus hermanas ma­yores' y sus madres, han venido transmitiéndosede. época en época y que cantan tódavía por lasnoches de verano aquí y allá, formando rondas.Yo había visitado el castillo de Chaalis, su viejaiglesía, sus ruinas, su jardín wdeado de muros enque los tallos de las rosas tiemblan al viento delotoño y me ·decía que si existe en el mundo al­guna región en que el humor sombrío de un poe­t¡-"no parezca tener correspondencia con el lug-ar,esa región es'ésta, sin duda. Y, sin embargo, de­ben rondar aquí algunas de las sombras evoca­das por las antiguas canciones. La tardé iba ca­yendo. Un círculo obscuro acentuaba sobre el ci.e­lo pálido y verdoso el desgarrado perfil de la an­tigua abadía. Al dirigirme a la salida, alcancé aescuchar de pronto unas voces frág-iles y, acer­cándome al lugar de donde se eleya,bCln, púsel11e

Au jardin de son Pére,

dice el más joven ...Parecíame soñar; reconocía el estribillo de la

Angélica y 10 escuchaba sin que ning-una de lasniñas se diese cuenta de mi presencia. Por último.todas a un tiempo se pusieron a cantar, como siaquella aventura les _hubiese realmente ocurrida.

Ouvrez, ouvrez, mon pére,Ouvrez sans plus tarder:Trois jours j'ai fait la 1'/'LOrtePour mon honneur garder!

Han transcurrido ya cinco años desde entoncesy, sin embargo, cuando revivo en mi memoriaesta escena, el cabeceo de los pinos y la paz ex­traordinaria que reinaba en aquel patio abrigarlocontra el viento, me transportan a tina época tanlejana, que no sé ya si Nerval se encontraba allídetrás del cercado, junto a mí ... Tengo, sí, lacertidumbre de que yo 11<l estaba solo. Tal fas­cinación experimentaba Nerval ante la muerteque nos explicamos en seguida por qué le emo­cionaba tanto esa canción. La muerte: palabraque a cada momento está en los puntos de su plu­ma. En efel:to, en esa.s exquisitas novelas cortastitula<:Jas Hijas del Fuego, puede también leerse:

":"-"¿ Cómo está mi padre-inquirió ella conbrevedad.

-Ha muerto, respondió Toffel.-¿ y mi madre?-Ha J11uerto también, le fue contestado.-¿ Y mis hermanos, mis hermanas?-Se han dispersado por el mundo".Su poema las Cidalisas, aquel que comienza con

este verso: "¿ Dónde están nuestras enamora­das?", ¿ no sentís que hace vibrar en nosotrosun sentimiento de extrañeza, en el q1.1e, por una


Recommended