Larry Shiner Intro

5/17/2018 Larry Shiner Intro - slidepdf.com

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de Topeka, d doctor Douglas Shearor, y su esposa Bo, cuya conversa-

cion en torno ,) su homo de cristal profundizo mi aprcciacion de la dig-

nidad artistica de las artcsanias y oficios. Finalrnente, agradezco a mis

hcnnanas Kay Klausiueier y Carol \Vibon y sus maridos por ofrecerme

, il ienlO '/ refugio durante los dos anos sabflticos y los nurnerosos vcranos

que dcdiquc J la escritura. Agrudezco cspecialmentc a 1 1 1 i hija Suzanna,

por ~1I ayuda con IJS ilustraciones y par su capacidad para resolver pro-

blcmas informaricos, )l a mi hijo Larry por los mernorables almuerzos

que c.ompanimos a 10 largo del camino. Pero mi mas profunda gratitud

es dcbida a mi esposa, Catherine Wal ters, quien supo sobrel lcvar la riva-

lidad plantcada por estes papeles durante mas de diez anos, con inusual

generosidad y paciencia, y, como sicmpre, me dio buenos consejos:

INTROD UCCI6l\

Actualmente nadie plantea objcciones a que casi cualquier cosa sea

considerada -arte-: Una de las razones que explica el auge de esta ca-

lif icacion es que cl propio mundo del arte se ha impuesto cumplir con

la vieja aspiracion de que -arte- y vida se reconcilien En este sentido

se han dado toda clase de gestos, que "01,\0 de 10 inocente ,1 10 dispara-

tado, desde !levar colchas a los museos de bellas artes 0pulpfiction a

los curs os de literatura, hasta reproducir ruidos de la calle en las salas

de conciertos 0 someterse a cirugia plastica via satelnc. La aparicion de

tantos arrefactos excentricos. cscrituras, ruidos y performances en las

bellas artes inspira cl discurso que, como una letania, habla de la muer-

te del arie, 121 litcratura y la musica clasica. -Ymientras tanto, no jal-

tan quienes, envuelros en 12 1bandera del posmodernisrno, admiten que

el moderno sistema de las bellas artes esta muerto, pero nos invitan

a bailar junto a 5 1 . 1 turnba como si sc tratasc de celcbrar de nuevo una

Iiberacion.

No me interesa tanto establec.er si es preferible bailar 0 llorar sino

mas bien averiguar como se ha Ilegado a esta situacion. Si queremos

entender el auge de 10 artisrico como categoria y su proposito eviden .. •

te de reconciliar arte y vida, hay que investigar como se han originado

las ideas modernas y las Instituciones de las bcllas artes, El moderno

sistema del arte no es una esencia 0un destine sino algo que nosorros

mismos hernos hecho El arte, entendido de manera general, es una in-

vencion europea que apenas tiene doscientos anos de edad Con ante-

rioridad a ella teniarnos un sistema del arte mas utilitario, que duro

unos dos mil " n o s y, cuando esta invencion desaparezra. con toda se-

guriclad le seguira un tercer sistema de las artes. Es muy probable que

10 que algunos criticos ternen 0 aplauden como muertc del arte. de la



i itcniurCi ( ) ele 1:1musica scria no sea sino el final de una dererminada

inxt i lLici6n ,"o(' i; il cuyo origen se remonta al siglo XVll!.

En t'fe<:to, igu,11 que much as otras cosas surgidas con la Ilustracion,

b idel (~llropC,1 de las bellas arres se periso como universal. Desde (>11-

t()nc~'~, los ejcrcitos, los misiorieros, los crnprcsarios Y los inrelectualcs

ClIrO[x'us y norteamericanos se han csrnerado en conseguir que as] 10

Flier;! Los estudiosos y los c riticos adscribie ron la creac ion del arre a los

.rntiguos chinos y egipcios, pew poco despues de que se impusicse fir-

me-mente b dominacion colonial europea, artisras y criticos dcscubrie-

ron que- los pueblos conquistados de Africa, America y el Pacifico hacia

tiernpo que poseian algo llarnado <111C primirivo-. Esta asimilacion de

Lis acuvidades Y los a rre facros de rodos los pueblos y las cpocas pasa-

eLls a nuestras nociones ha estado vigcrue durante tanto tiempo que se

eLl par senrada la universalidud de la idea eumpea de arte.

I'or desgracia, la historia de los pueblos, las exposiciones en los mu-

seas, los programas de musica sinf6nica Ylas antologias li terarias tien-

den :1 cstimular nuestra natural inc linacion a cons idcrar cualquier cosa

que venga del pasado en tuncion de como sea en el presente y dcian

de Indo las diferencias del caso, Por cjcmplo, las pinturas renacenti stas

Chi siernpre son presenradas cnmarcadas, se las suele colgar de las pa-

l 'ede~ de un rnusco 0 sc l as si rua aisladamenre en salas de confcrcncias

<) en b~ p,igillJS de los lihros de artc. Asi, poco hay que nos recuerde

que csas piniuras fueron concehidas origmalmerue para un proposito y

un lugar especifico~, por ejcmplo, C01110 pane de LIn altar, 0 de un ar-

con, 0como elcmcruo decorarivo en las pa r edes de un dorrnitorio 0en

d cielorraso de un salon de conterencias (Fig. n. Asimisrno, las obras

de ShakcspeJre no fueron escritas como textos definit ivos e internpora-

les ni para ser lcidos como obras maestras de 1 0 1 lit eratura sino que eran

guiones qU(! podian ser modif icados durante su interpretacion en un es-

cenario popular. Contemplar las pinturas del Renacimiento de manera

.rixladu, 10 mismo que leer a Shakespeare en una anrologia de literatu-

1-,), 0 cscuclrar Ia Pasion de D O l C h en una sala de conciertos, refuerza 1 0 1

Ialsa impresion de que en el pasado sc compartia nuestra concepcion

del arre como un ambito compuesto por obras autonornas dedicadas a

IJ conternplacion estetica. S610 merced a un esfuerzo deliberado logra-

r<;"lllO~ romper cl trance 4ue induce nuesrra cultura y ver que 1 a catego-

ri d de las bellas arks es una consrruccion historica rccicnte que podria

dC\'<)lurecer en algun memento.

F IC 1 TR A 1 Casona fh:)~entina con u n panel dCJI~ck s e mu estra la conq u ista d to, iTre bizonda. realizaciori d to \1:1 reo de Buono (_,L:11l1bert I y Appollonio el i G I~)" ,

vanni de Tomaso (siglo xv), Cortesia del Metropolitan 1\-1\1,' iVUIll of Art, John Ste-

ward Kennedy Fund, 1913 (14,,'),)), Reservados todos los derechos.

L" (;Il!..',' rnvrsrox

La idea de que los idcales Y las practicas modernas 50n eternos y

universales 0 de que, cuando menos, se rcrnoruan a la antigua Grecia 0

OIlRenaeimiento es una i1usi6n provocada en gran medida por la ambi-

guedad propia de L a palabra -arre- . La noci6n de arte deriva del latin ar:

y del griego tecbne, terminos que sc reficrcn a cualquicr habilidad hu-r

mana, ya sea monrar a caballo, escrlbir versos, rernendar zapatos, pin~

tar vasijas 0 gobernar Scgun los antiguos rnodos de pensar, 10opiresro

al arte humano no cs Ia artcsama sino la naturaleza Cuando hahlamos

de la mcdicina como un artc, 0 del arte culinario, usamos el concepto

en un sentido que se aproxuna al antiguo. No obstante en eI s ig lo XV]]]

se establecio una distinci6n decisiva en cl conccpio tradicional de arre .

22 2. 1



Tras significar durante dos mil anos toda actividad humana realizada

con habilid.id y gradel. el concepto se descompuso en la nueva catego-

na de 1:1sbellas artes (poesia, pintura, arquitectura y musica), en oposi-

cion ,1 la artesania y las artes populates (fabricar zaparos, bordar, con-

tal' cuentos, canrar canciones popuiares), A partir de esta epoca se

comcnzo a hablar de -bellas artes-, materia de inspiracion y de genio y,

por ello mismo, objeto de un disfrure espedfico, media do por un pla-

cer refinado, mienrras que las artesanias y las artes populares pasaron a

ser practicas que muestran la habilidad del artifice en la aplicacion de

Cin1JS reglas y sus obras, adcmas, son concebidas meramente para ser

usudas 0 para entretener al publico Cuando durante el siglo XT X se

.1handono t'l \ISO del adjetivo "bello" para referi rse a las artes y sc em-

pelt) ,1 hahlar solamente de arre por contraste con artcsania, con el en-

trctenimiento 0 con la sociedad, cste cambio historico en el signi ficado

cayo en cl olvido. Hoy en dia, si preguntamos "i.Es realrnente arter-, ya

no quercmos decl r "i.Esun producm humano 0 naturali- sino "i.Pertene-

(C J l a prcstigiosa categoria del arte (bcllo)«.

En cl usn corricntc no s610 se ha borrado la fractura de la antigua

idea de artc/artcsarua con relacion a artc uersus artesania sino que se ha

estublecido una division paralela que scparaba al artista del ar tesano y

Lis preocupaciones esteticas de los placeres ordinaries y del scniido de

10 (ail. Con anterioridad al siglo x\111 los terrninos -artista- y -artesano- se

usahan indistintarnente y la palabra ar tista se aplicaba no s610 a los pin-

teres y a los cornposttorcs sino iarnbien a los zapateros y a los herreros,

;1 los alquimistas y a los estudiantes de las artes liberales :"- Joexist ian ar-

lis\:.IS ni arresanos, en el rnoderno senti do cle estos rerminos, sino arresa-

nos.'artistas que consiru ian sus poemas () sus pinturas, sus relojes y sus

boras, de acuerdo con una tecbne 0an, cs decir, un arte/artesania. Peroa finales del siglo XVIII -artista- y <I rtesa no, sc convirtieron en terminos

opuestos. -Artista- vino J querer deci r creador de obras de ai le micnt ras

que -aricsano- signiflco mero haccdor de algo iiti l 0 entretenido.

Una tercera e igualmente decisiva division tuvo lugar en el siglo

xv III: el placer en las artes se dividio en un placer especial, refinado,

propio de las hcllas arks, Y los placeres ordinaries que suscitan 10 util

o 10 entretenido. PI placer refinado 0 contemplative recibio un nuevo

nornhrc: "estctico". La visk'JOmas amplia y antiguJ del ane como cons-

truccion era compat ible con el goce en un contcxlO funcional; ]a nue-

\',1 idea de ,HIe como creacion reclamaba una actitud contemplativa y

por 10 misrno, que el contcmplador sc scparasc del contexte, M. H.

Abrams dcnornin6 a este cambio -revolucion copernicana- en el con-

cepro de arte: "En un solo siglo ... el modelo de la construcc.ion fue sus-

t ituido pOl' el modelo de la conternplacion, que trataba los productos de

las bcllas artes como ... objetos de atcncion cxtat ica- 0989, 140). A co-

mienzos del siglo XIX rambien se dividio la antigua idea de funcion en

las artes de tal modo que se atribuyo J las bellas arres uri papel espiri-

tual rrascendentc en tanto que rcvcladoras de una vcrdad m:l~clcvada

o en cuanto que autenricas medlcinas para el alma. I Iasta eruonces, la

idea de la contemplacion desinteresada se aplicaba a Dios: de ahi en

adelanto, cl ane para rnuchos miernbros de las elites cul tas se convert i-

ria en un nuevo escenario para la vida espiritual.

Como esta revolucion conceptual, 10 mismo que SliS instituciones,f

todavia domina nuestras practicas culturales, se necesita cierto esfuerzo

para apreciar la profundidad de la ruptura ocurrida. No se trataba sola-

mente de la sustitucion de una definicion de arte por otra, como si la

palabra -arte- designara un sustrato neutro inarnovible, sino de la susti-

tucion de todo un sistema de conceptos, practicas e instituciones, pOl'

011"0. En el antiguo sistema del arte, la idea de arte referida a cualquier

tipo de objeto 0 de cjccucion para uso () diversion iba de la mano de

instituciones que unificaban 10 que nosotros separarnos como artes, ar-

tesanias v ciencias. En lugar del moderno museo de arre, por ejernplo,

en los siglos XV I Y X\'lJ existia cl gabinete -de curiosidades-, doncle se

exponfan conchas marinas, relojes, esculturas y piedras preciosas a

modo de muestrario del conocimiento. La mayor parte de la musica ser-

via para acompariar la li turgia rel igiosa, las cerernonias poli ticas 0 las

fiestas socialcs y no para scr intcrprctada en salas de concicrtos. La rna-

yor ia de los artesanos/artisras trabajaba por encargo de parrones cuyos

contratos a menudo especificaban contenido, forma y materiales y pre-

veian un lugar especifico y un proposiio para la pieza acabada El pro-

pio Leonardo ciaV inci firm6 un contrato para pintar la Virgen de las Ro-

cas donde se Ie especificaban los contenidos, el color de las vestlduras

de la Virgen, la fecha de entrega y se establecia una garantfa en CJSO de

reparaciones De modo similar, los escritores profesionales pasaban

gran parte de su tiempo copiando, tomando noms y escribiendo cartas

para sm cmpleadorcs 0 pergenando poem as para un cumple;oi 'ios, en-

cornios 0 induso piezas sat iricas. Por anadidura, el t rabajo arri stico era

a menu do una tarea cooperativa en la que intervenian 111uchas perso-

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I~j~, ian:o si ~(~: rauha de p in ta r frescos Clbbel) poner en CSCClla pro-

llllcciollCS tc.urales (Shakespelre) u tornar librernente prestadas melo-

d i:l,~ Ci :11monIas de otros co m pos itores (Bach). Todo csto cont ra sta co n

l:lS noruias domina nres de nuestro moderno sistema del arte, dondc el

iclcd 110 t',~ b colabor.icion inventiva sino l a crcacion individual. las

()hr~l.~pOG1S vcces son concehidas para un lugar 0 proposiros especifi-

('os -.ino que existen por ellus misrnas, y la separacion de las obras de.u re co n respecro :L un c on te xte Iu nc io n al conduce 3. 1ideal de una a tcn-

cion silenciosa Yreverenclal como la que se observa en la sala de CO]1-

cicrtos en los museos de artc, en los reatros y en las sab~ de lectura.

Pero eI nuevo sistema de las bellas artes no s610 estaba esrrccha-

mente vinculado a conductas 0institucioncs sino que t.unbien Iormaba

p~llTe cle reluciones de poder y de gcnero de mayor alcance. Un factor

dave en I:i descomposicion del viejo sistema del ,HIe fue ]a sustltucion

del mect'n:lzgo por cl mcrcado del arte y el publico de clase media,

C,ll~ll1d() hit:elrich Schiller y los dernas au to res del siglo XVTl laleman di-

tun d i--ro n b~ n ue vas id e as .ice rcu cle la autonornia de la ulna d e ar tc y

1;1ncc('sicbd de un« respucsta csreuca espectfica aplicada a elias, 10que

h:lci:lll ( '1';1],(: ' ;Icciom n contra sus propias f rusr rac iones con relacion ;1 1

!llcrCJciCi d el ;1I1e y al nuevo pub lico. Desde luego, una de las c r e e n c iu s

ccnrrales del rnoderno sistema del arte ha sido siernpre que el dinero 0

LI cbse son irrclevantcs para la creacion y la apreciacion del ark. Aho-

ra bien, e le v ;J r algunos generos a l e s ta ru s espiritual d el ar tc bello y a

quiene- los producen J b condicion de heroicos crcadores, releganclo

J otrox gt'IlCro. ' a! esra tus de mera uti lidad y a sus productores a la con-

dici(HI de fabricanres, t 's milS que una transforrnacion conceptual. Y

; lc iem:is . cuando los gcneros y 1 , 1 , ~ acrividades cscogidas para se r eleva-

~bs y los elegidos para SCI' dcgradados refuerzan las lineas de raza, cla-

st' v genero, 10que en un memento p.irecia solarncnte un cambio con-

cepltul cmpieza a parecerse ,I una rcclaboracion de las relaciones de

podcr Si los bordados de las rnujcres han sido rescataclos de las rnaz-

mOI']'~IS del -arte domcsrlco- PJr<1 ingresar en las salas prlncipales de

nuesrros lllUSCOS de arte, ello St' ha dcbido, en parte, a las presiones

eitTciCLLS por d movimiemo feminisLa, que finalmente se impusieron

sohre :mt igU:lS ciiscriminaciones de genero que cstahan vigentes en el

,<;is tem,lde las helh~ :mes. En r~lnto yen cuanto el moderno sistema del

J1'le sigJ siellcio b I,Onll:1 establecida, !a insistcncia de las feministas en

logr:ll ' que bs lnujeres palticipen de las instituciones del ,ute sigue es-

tando en el orden del dia. 1\0 obstante, las mujcrcs no deben quedurse

satisfcchas con que se L1S aceprc en d ant: sino que deben I:--'conoccr

que los propios su p uestos del arte bello ban sido inlluidos pm las clis-

crirninaciorics de genero desde el cornicnzo y han de ser revisados en

sus fundamentos De modo similar, e l movimiento multiculturalism tie-

ne razon en querer que los genero,5 Y las obras de las minorias exclui-

das sean aceptados en los CUlTicII/a literarios, artisticos y musicales,aunquc d exito de este esfuerzo podria acabar reforzando las p r e r e n -

sioncs imperiales d e l sistema euroamericano de las bella» artes a menos

que critiquernos su s distincioncs subyacentes. En lugar de simplemen-

te asimi lar las artes de las culturas t radicionales africanas 0 indoarneri-

canas a las norrnas europeas con la condescendienre crcencia de que

de este modo les brindamos una buena acogida, debemos aceptar la eli-

fcrente cornprension de las artes que estas culturax propanen ;. cl Iugar

que se It's asigna en la socicdad.

El sistema moderno de las bcllas artes ha dorninado la culrura a r n e -

ricana y europea desde principles del siglo XIX pew algunos artisras y

cri ticos se han resi stido a accptar sus pr incipios que oponen el ark a la

artcxania. el arrista al artcsano, 10 esterico a 10 utll itario , Mas adclanie

explorare nuevas ejcmplos de esta resistencia, puesto que una de las

tarcas de la hisroria consiste en restitui r la voz a las posibil idades y los

idcales derrotados, marginados II olvidados, Por ejernplo, Hogarth,

Rousseau Y 'VY'olbtoneeraft rechaza ron la disrincion entre artistas y ar -

tesanos y la diterenciacion de 10 esrctico y 10instrumental , pcsc ague

tales distinciones estaban vigentes en su epoca. Igualmente se mani-

festaron Emerson, Ruskin y Morris , quicnes aWGHOn las dicotomias

arte/artesania y artc/vida Posteriormente, durante cl siglo xx. una ca Fl-

rtdad de artistas, desde los dadaistas y Duchamp hasra las prirxi p~dt's

figuras de! arre pop y del ark conceptual, tamhicn han ridiculizado.

puesto en duda 0 ironizado tales principios, Pese a esta larga _lfadici611

de resi stcncia, las obras de la mayor par te de los resistenres y ap6slala~

del arte bello han sido nipidarnente absorbidas por la Iglesia del Arre y

estan actualruente incorporadas a los Gjnones artisticos y literarios que

pretendian desacreditar Sin embargo, aunque el rnundo Lie las hellas

arIes se 8propiaba de los anos de resistencia taillbien expandia SllS pro-

pios lfmites, en primer lugal' asimilanclo nuevos t i p o s de a r te , cornd b

fotografia , e l c ine 0d j azz: despues, apropi:'indose de las ohras de ~ute

"pr imit ivo" y folcl6rico; y, f ina lmente , a traves de lu que p : lTece ser ]a

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cornpleta disolucion de sus propias tronteras. abrazandolo todo, desde

la aurornuti lacion hasra los midas de John Cage.

A pesar de locbs estas asirnilaciones, el s is tema rnodcrno del arte ha

conservado sus n oras In :1s generales incluso en los gestos y escritos de

quienes 10 cucstionan.

Cuando eritieos como Rosalind Krauss hablan "del rnito de ia van-

guardia- 0 arti stas como Sherrie Levine exponen copias fotograficas de

las obras de \Valt.er ~:vans a modo de parodia de la -originalidad-, rin-

den rributo a las normas del moderno sistema del arte al mismo tiempo

que 10 ponen en cuestion. Una de las razones en las que hare hincapie

(\~que cl ai' ll ' IlO es tan s610 una -idca- sino que es un sistema de idea-

lcs, pracricas e institucioncs y que gran parte de la actual retorica acer-

ca de la muerte del arte, de la literatura 0 de la musica seria -ya sea

alarmista 0 laudatoria-e- subesrima el poder residual del sistema del arte

esta blccido.

IIasta ahora no me he referido a 10 que probablerueruc sea la di-

rncnsion m;is imporrante del artc: ('I sentimiento. Hablar del arte como

de -un sistema de conrcpros, practicas e instituclones- hace poca [usti-

Ci;l ;1 la~ poderosas emociones que las personas experimentan a traves

de IJ literatura, la rnusica, la danza, el tea tro, la pintura, la escultura y

I~lrquitectura. EI artc no es solarnente un conjunto de conceptos e ins-

ti tuciories sino rambien algo en qUt; las personas creen, una Fuente de

sarlsfaccion, un objeto afectivo A aq ucllos que arnan el arte les pare-

ccr:i que rni idea de qlle el artc bello es una construccion reclente, sec-

torial. marcacla por intereses de clase y de genero, forma parte de una

conspiracion hostil que apunta a desacreditar uno de nuestros valorcs

mas elevados. En los agrios debates sobre tcorla litcraria de las ultimas

decadas, los rradicionalisras a mcnudo han acusado a sus oponcntcs de

-hostilldad hacia la li teratura-. Hace pocos anos un reconocido te6rico

l i t e ra r io se golpcaba el pecho en publico al declarar que ya no ensefia-

ha a sus estudiantes teoria iiteraria sino amor por la l ireratura (Lent ric-

chia, 1996), La ira de los tradicionalistas y de los arrepent idos contra las

historias S' la~ teorias cscepticas es comprensiblc. Si uno arna la l itera-

tura. .por que razon exponer l;t cuestionable patcrnidad de esta? Cuan-

do le describi la rcsis de <:ste libro, un artista amigo me dijo: "il\o 10 ha-

gasl BasLJntes problemas tenemos los artistas". He de con[csar que yo

tamhicn soy un alTante de las artcs, pcru no se necesita pertenecer al

par tido de los "hostiles" a ]a l itcm(ura, el ane 0 la musica para explorar

las rakes historicas de nuesrras creencias como preludio a rcpensar los

ideales y las instiruciones vigenres

Mi historia de la fatal division de las aries se plantea cl siguiente in-

tcrrogante: ~c6mo seria el relate de las ideas e insritucioncs de las be-

ILls artes si ya no 10 escrihieramos como d inevitable triunfo del Arte

sobre la artesarua, del Artists sobre el artesano, de 1 0 Estctko sobre la

funcion y el placer ordinarios? (Por que no escribir nuestra hisroria cles-

de una perspectiva mas afin a un sistema del arte que conclllase la ima-

ginaclon y la dest rcza, el placer y el uso, l a libertad y el scrvicio? Des-

de ese punio de vista la corisrruccion del moderno sistema del arte, mas

que una frartura de la qL ie hemos estado intenrando curarnos, se pare-

ceria a una gran libcracion.

La primera parte, "Antes de la distincion entre bellas artes y artesa-

nia- , explora algunos casos sorprcndenres de hace mas de dos mil anos,

cuando cl -arte- significaba rodavia el haccr humano vinculado a un

prop6sito y cuando la distincion entre artista y arresano todavia no era

una norma. En esra seccion argumeruo contra la creencia arnpliarnentc

extendida de que el Renacirniento establccio los modernos ideates del

arrc, el artista v 10 cstetico. y muestro que, a pesar de que se dieron im-

portanres pasos en esa direcci6n, cl viejo sistema que uni flcab.i el artc

y la arresar ifa, el arresano y el artista seguia sienclo la norma tanto en la

Italla de Miguel Angel como en la Inglaterra de Shakespeare, En la se-

gunda parte, , <£ 1 ar te d i vi d id o -, describe la gran fractura en el antiguo

sistema del arte que: D..lVO lugar durante el siglo xvnt y que desernboco

en la scparacion del arte y la artesania, el artista y el artesano, 10 esteti-

co de 1 0 instrumental y estableci6 insti tuciones tales como el musco de

arte, la sala de conciertos y los derechos de auror. ESIOS capitulos ct~n-

rrales tarnbien exploran los aspectos sociales, economicos y de g2nero

relacionados con tal ruprura. En la tercera parte , -Contracorrienres-, cxa-

mino ires casos de resistencia a la estetica desinteresada (Hogarth,

Rousseau y W'ollstonccraft) y luego revise las audaces tenrativas de la

Revolucion Francesa de rcviralizar el viejo sistema del arte que final-

mente acabaria acelerando la l l egada del nuevo sistema del arte. En la

cuarta parte, "La apoteosis del ar te - , sc cornpleta cl relate de la cons-

truccion del sistema de las bellas artes rnostrando como el siglo XI X pe-

ralt6 eI ane al nivd ck los valores mils elevac!os, hizo de ]a voc3ci6n dd

arti sta un atributo espiri tual de excepci6n y extendi6 las institllciones

dc las bellas artes pOl" tocla Europa y America, inculcando de paso la

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conducra esretica correspondienre lla habido una canudad de nuevas

.irtes que han -ido anadidas a la catcgona de bellas artes en los ulrimos

cienro cincuenta ,l1l0S, aunque ha hahido otras tantas nuevas formas ell '

resisu-ncia a dicha cal l:gori ;l. En la quin ta pane, -Mas JIb de las bellas

artes y IJ .r r te san in - e xan un o un os pocos ejemplos de (;'seasexpansiones

Y cuesiionamicntos e n los sig los XIX y xx p<UJ rnostrar como el moder-

no sistema de las artes ha sido capaz de asimilar tanto las nuevas artestfOlogrJfia) y l as nuevas Iormas de resistencia (artes ,v oficios, el cons-

trucrivismo ruso) sin alterar sus polaridades basicas El capi tulo final de

Lt quinta pane estudla algunos ejemplos del siglo xx en relacion con la

v ig e n c i a de la clivision entre bcllas artcs y artcsania y su uso con vistas

:1 asimi 1 < 1 1 ' las nuevas areas artisricas anadiendo nuevas distinciones (arte

primitive) , asi como los vigorosos signos de resistencia Carte comunita-

r io) , Los procesos de asimilacion y resistcncia han afectado seriamente

Lis polaridadcs del sistema de las bcllas arrcs. Cabe preguntarsc si nos

cncontrarfamos ante la inminencia de un tercer sistema del artc.

Para haccr mas clara la exposicion, la mayor parte de los capitulos

cst.i organizada en torno a tres coriceptos ccntralcs y sus instuucioncs

corrcspondicntcs: la categona de artc, cl i d e a l del artista y la cxpcricn-

cia clc 10 eSI('tico, Aunque sc pucde crucndcr cl corucnido de los ca-

pitulos t inales del libro comenzanclo por la segunda parte, los capitulos

de la pri rnera parte arrojan luz sohre el mundo que se perdi6 tras la

gran division y pueden servi rnos P,U:01comprender pO l' q ue algunos in-

divicluos han intentado superar la separacion entre ane y artesania 0

arre y vida. Quienes se interesen por las diflcultades creadas por los

multiples senridos de palabras como -arte-, -artesania- -artista- , -artesa-

no..y -estetico .., 0 se pregunten por que uso -sisterna- del arte en lugar

dt;'la expresion mas conocida -rnundo del artc- 0 como cs posiblc una

revolucion (Onlugar de una rncra cvolucion en el concepto de arte, pue-

de que prefieran leer la siguiente seeci6n antes de seguir adelante.

las tesis de Kristel ler, haec tiempo que pienso que los esrudiantes y los

lectores podrian bcneficiarse de una breve cxposkion capa7 de inregrar

la historia de la idea de las bcllas arrcs y de 10 esrerico con los cambios

socia les e institucionales, extendida hasta inclu ir el concepto del :111is-

ta, y llevar el coniunro hasta la epoca presenre para ruosuar su relevan-

cia en los debates acruales.' Pucsio que inicie este proyecto haec 1ll(IS

de una dccada, cntreranro muchos otros tarnhien han rescaraclo las \(;'-s is de Kl' is tel ler par 10 que toea :1 conectar el concepLo de arre con las

praciicas, las instiruciones y los cambios sociales (Bccq, 199·b; \Xioocl-

mansee, 1994: Mortensen, 1997). En la medida en que l:SU es sobre

todo una hlstoria de la cultura y no solo una hisroria mrelectual, he in-

tcnrado captar esre componcnte social e instl tucional mas arnplio corn-

binando la idea de que ciertos conceptos c idcales -regulan- la pr~klicat

artfstica, con la nocion de que las pracricas y las instituciones artisticas

crean un -subsisterna- social (Kernan, 1989: Goehr, 1992), Los concep-

los regulativos, los ide-ales del arre y los sistemas sociales del arte son

reciprocos. los conceptos v los ideales no pueden existir sin un siste-

ma de practicas e instituciones (orquestas sinfonicas, museos y colec-

ciones de arre, canones y derechos de autor) asi como tampoco pueclen

funcionar las instituciones sin una feci de coriceptos e ide.iles Ior rnati-

vos (artista y obra, creacion y obra maestra).: ' En un primer momento

pense en titular est .e l ibro -Historia social de las ideas" pem esto pocli:l

haber sugerido quC' cl lema de la obra era la determinacion social de la~

i d e a s y no tanto la dependencia mutua de los idea les y los cambios so-

PALAllHA'i E 1I'-6nn:CJONj:~

1. Aurrque Kri st el le r era conscienre de LLneces idad de conside ra r ranro e l hH.'ln,- ins-

r itucional como el srx. ioeronomico, su exprcsion -sisterna moderno deLis artcs- , e , e n e-re: a I "isl.el1l" de ch sificacion, micntras que yo \.1·'0 ]a exprcs ion PJ n SC'l"L, r q \ It ' l os "0 [1-

ccptos y las pr.ir.t tC~S~ las i nsriru C[011e5 o las estrurtu ras stx: ia les so n inscpara hks.

2, Lso -r cgulativo- par a referirme al conccpto qUe' : iuhy'h:t ' " I ]lell,'amiC"l~C y a L

pL"j([ic~ ~n del e- rminacios terrenos de j J v i eLL . P~II":.l ~]11 ;1 tl i-cusion rnj,":' t0en ica ( It : I () ~ (Dr . -

ceptos reSlllmivos Ydt' I" dii"er~nd;J entre clio;; y 10.' ~'nncejll"s (.'n"sli(\ltivc>s, ve'lsc' (;oel1,-

{l ')')2, )(12-(,) . . John SearLc esmhlecc 'lI1~distill(Von simiLn, "I percii )ir I"s COIl(,PIUS rc° ,Qu

b ti'i,!0,~ C0l1 l0 L l g u L~ld~ lLn~L1ni\! i< .kl (1 prccxjs~ente j: !O:" i i . . " ( ) n , : , ; :i~ulivos con1l~1Jo s q ue gt'r:~-

' - ' J l l U<1:1 aUividad (199'5) . En el C[S" del ;lrk, (enCnlOS uJlJ 'Kiivid"d prec"xi.'(enk ClIe, su-

I'rir'J em" l'-d[l.'JOl"lll:1cion radical cn <'I .sigl() ),V[:, Tan,hi'~n mi cii,,:inci(,,_ c"1ITl' 'idu.,,, "

,idcalt';;, t~lll,b genera: quc la de (~od[l- ('T-Wn l\nn:la'I~:L:n1f'. p ' ' ' ' , ) ,-di:'ri~ml' 'I : ,u;c h-

1)10 ele IJ i deJ e ll ' arte 11,ierll ,-'" que ( 'u" :1 (10 me renero "I ;,rl iSl<1lIS0 CI :cTmi n) , t t > id~;: I d t I

;_lLtis(;~, e s d ec i f ~ ]a llnagcn rJOrnl:;J ti V~L:lC~ ITi~ d e c 6m o dehl1rla S t " ' T U - : - 1 :Lrl i . . . . . 1, Sin ('nlhar,~o

no pl'etencio converlir ningl.. lno de C$t0.' tcnnlllO ....~n 1..1noncepto ~0cnicn.

Este libro se inspira en Ius emayos de Paul Oskar Krisleller , escri tos

h:lce tlnos cincllenta anos, donde se muestra que la categoria de las be-

lias :ut .es no exhlh antes del siglo XVII (l950-199()), Aunque algunas

(iml r ihuciones recientes a !a hislOria del artc hacen pocas rcferencias a

30 31



ciales. He escogido cl rermino mas general de -Historia cultural- puesto

que sugiere un cncueruro de 10 social y 10 intelectual, punto de inter-

seccion que yo consldcro estableciclo en el siglo X'/IlL El importanre pa-

pel de Lis instituciones en tanto que mediacion entre las ideas y las

tucrzas sociales y economicas generales se examina en cletalle en la in-

troduccion a 1 a segunda pane, -Fl arte dividido-:

He escogido "sistema del artc- en lugar de la conocida noei6n de-rnundo del arte- porque "sistema del artc- tiene un enfoque mas am-

plio, dado que incluye los diferentes mundos del artc y los submundos

de la litcratura, la musica, la danza, cl tearro, el cine y las artes visua-

les. F] -mundo del arte- esra cornpucsto par redes de artistas, criticos,

publico )' otros que cornparten un campo cornun de intereses junto con

un compromise con cicr tos valores. practicas e instituciones. £1 "siste-

ma del artc- abarca los ideales y conccpros subyacentes cornpartidos

por los disrlntos mundos del arte y por la cultura en general, e inclu-

y'e a quiencs pa rticipan ,~610marginalmcnte en alguno de los mundos

del arte. Por cjemplo, el ideal del -artista- en el moderno sistema de las

bcl las artes iicne muchas notas en comun (l ibertad, lmaglnacion, origi -

nalidad), que subyacen a los ideales especfficos del autor y del com-

positor en litcratura y musica respectivarnente. Como cs obvio, la in-

terprciacion de tales norrnas ha carnbiado mucho desde un punto de

vista historlco, pero algunos supuesros y practicas son 10 suficiente-

mente generales como para permitir un contraste entre el antigun sis-

tema del arte y el moderno sistema de las bellas artes.' Uso el termino

•moderno- en el moderno "sistema del arte- simplemente para marcar el

contraste entre el -antiguo- sistema del arte y el "nuevo" sistema de las

(bellas) artcs y no tengo intenci6n de senrar position sobre cuando co-

merizo -la era modcrna- 0 si nos cncontrarnos hoy en dia en una era

-posmoderna-. El -siglo xvm- designs el centro de un periodo que va

desde aproximadamentc 1680 a 1830, epoca en que los distintos ele-

mentos que componen dmoderno sistema del ane se combinaron y se

corisolida ron.

Par supuesto, las prue bas lingu. sticas, intelectua les e insri tucion ales

de que a 10 largo del siglo xviu tuvo lugar un giro decisive no se rela-

cionan con un conjunto de hechos delirnitados pOl' una fecha magica a

partir de la cual se puso en funcionamiento cl modcrrio si~LCITUdel

arte: La transformacion en cada uno de los eonceptos que componen

las bellas artes v la emergencia de las nuevas instituciones del arte va-

ria segun la epoca, la geografia v el genero. El presrigio y el papel del

poeta, por ejemplo, tuvo un desarrollo muy diferente que el del pintor,

Y la separacion entre la l itera tura de imaginacion y la literarura en ge-neral no coincide con la separaci6n de las artes visualcs en arte y arte-

sania. Asimisrno est! claro que la pintura, la cscultura y la arquitectura

y sus pract icantes alcanzaron el nivel de -artes liborales- en Iralia mucho

antes que en el resto de Europa, yen Florencia antes quc en el resto de

Hal la, y que el rcnnino cstctico sc hizo habitual en el discurso aleman

sobre arte decadas antes de que sc convirtiera en una norma en Fran-

cia e Inglaterra

E I uso ordinario del rermino -arte- pucde designar ya sea las artcs

visuales unicamenre 0 las bellas artcs como grupo; yo induyo todos los

generos de las bellas artes, aunque me concentrate en la pintura, la li-

teratura, la musica, la arqu i tectu fa, cl teatro ); la fotogra fla. ,J'ero c61110 •

marcar la diferencia entre la idea mas antigua y a rnp l ia del -artc .., y cl

sentido mas estrecho y moderno de -artc- (bello): ' Dada la arnbiguedad

que posee la palabra -arte- en minuscula, los dos scntidos a menudo

quedan marcados por las letras mayusculas: arte en general par oposi-

cion a Arte. Pero poner mayusculas plantca sus propios problemas.

Consideremos el paragrafo initial de una de las historias de las aries vi-

suales mas populates, la Historia del arte, de E, I-I. Gombrich:· •

En realidad no existe nada sernejante ;iI Arte. 5610 h8Y arrisras, Antano

eran hombres que cogieron un punado de polvos de colore-. v garah;J((~d-

ron las formas c i t ; un hisonre sohrc 1.1.'; p:uedes de una cavernn.. No In)'

problema en que llamernos a estas actividades ark' sicrnprc )' cuando ten-

gamos presente que esa palabra puede querer clecir C()S<l~ diterentcs en

epocas y lugares dlferentcs y scamos conscienres de que el Arte COil rna"

yuscula no existe . E I Ark con rnayuscula sc ha convertido en una especie

de espanrajo 0 de fetiche. 09H4, 4)

:~. lIn'i ciescripci('in de este lip" e,' 10rnejor que poderuos Ixind,1]" pora una e,,-plica·

cion hi"I<.;'-;""de ligo t~1l extensible y mClle<1I,le como la idC'a de arte, Vtasc el art1c'Jlo de

U~I,'"G,\\.11.."'Art'" ,1S ~ Clus[er Concept ' U00(1)

Sin embargo, ni Gombrich ni nosotros podemos sustraernos al he-

cho de que la A de las Bellas Artes siernpre se manriene vigcnte en el

marco de la a minllseula de arte que aparece en el arte de nuestro si-

glo xx: par 10 d emas, tampoco pod cmos sustraernos a la l lloderna idea

3 2



de be; bcllas aries diciendo que -el Arte no existe . .. s610 existen los ar-

tistas- puesto que el moderno concepto del artista como creador inde-

pcndient« lormaba a su vcz parte de los fundamentos de las hellas ar-

les por conrraste con la artesania en el siglo XI/Ill.

E I inconveniente que tiene b esrrategia de Gornbrich eS que las his-

toriax que se desarrollan a partir de ella ocultan las marcadas difcren-

cias que separan el viejo sistema del arre del moderno sistema de las

(bellas) artes En la rncdida en que me propongo cscribir la historia de

tales difercncias y hacer hincapie justamente en esa ruptura que la ma-

yor parte de las hisrorias de la lireratura, la rnusica y el arte ornitcn, he

adopt.ido Ires recursos tcrminologicos: por norma pondre en contraste

el -untiguo- sistema del arte en relacion con el -moderno- sistema del

arie 0, para decirlo en pocas palabras, -arte- y -bellas artes-, y a veces

incluso -artc- y -Arte-, Como es obvio ninguno de estes hinomios es

coinpletamcnre satisfactorio puesto quc hoy en dia la palabra -artc-,

allnque cornunica significados que se asocian con las -bellas artes-, lO-

dav ia conserva sedimentos de signif icados mas antiguos,

Lo mismo ocurrc con el icrmino -artcsania-. A veces sc dice que la

id e .i mas arn pl ia y ani igua de artc cstaba proxima a nuestro actual con-

certo de artesarua. Sin embargo no debernos olvidar que el amiguo sis-

terna del artc/artesania tambien incluia rnuchos idcales que lueron sc-

pa r ados durante el siglo XVIl I y adscri tos exclusivamente a las bel las

artcs y al artista Por ejemplo, despues de la ruptura en cl siglo }""III, to-

dos los aspectos nobles de la anrigua imagen del artesano/artista, C01110

son b gracia, la invencion y L1irnaginacion, quedaron adscritos unica-

mente al artista ruientras que el artesano qucdo solamcnte como aquel

que posec cierra dcstreza 0habilidad para trabajar de acuerdo con rc-

gla~ y se 10 retrato como un individuo al que solo lc interesaba el di-

nero, De estc modo, aunque es verdad que la idea rradicional de artc

cst\ mas proxima a la artesariia que a nuestra idea de las bellas artcs,

clio se debe en parte a que la idea mas antigua de arte contenia carac-

reris ticas cornpartidas pOl"las bellas artes y la artesania. Mas aun, -a r re -

sarua- -como <lrtc·- tiene amhos significados. En su sentido mas es-

pecifico -aricsania- no solo se rcf iere a la habi lidad y la tecnica (e1 arte

de la novclal sino tamblen a categorias dc objetos y practicJ .s de dife-

rente condici6n, como por ejernplo las artcsanfas de estudio (ccramica).

las artesanias Jc construcd6n (carpinteria), las altesanias del hogar

(costma) l' los trabajos manuales eel moldeado en calton piedra). En su

sentido mas amplio, el que yo voy a utilizar, <H1(,S<1nia"ambien sirve

como un terrnino que designa 10 opuesto a las bellas artes y abarca ca-

tegorias tan amplias como artes aplicadas, arte menor, arte folclorico,

arre popular, ane cornercial y arte de entretenimiento. Una vez conso-

lidado el moderno sistema de las bellas artcs en una posi~i6n dorni -

nante durante el siglo XI X y llegado el -arte- a delta autonomia en cl

marco de la sociedad, la polaridad entre artc l' artesania qucdo absor-bida dcntro de las polaridades mas generales de arte/socicdad 0

arte/vida. Esras ulrimas polaridades ponen el acento en la autonomia

del arte e, igual que el bino11110arte uersus artesania que incorporan,

sugieren que las bellas artes son independientes de todo proposlro y

placer relacionado con 1<1vida cotidiana

los terrninos -hombre de oficios-, -artesano- Y -artista- tienen tam-

bien una historia cornpleja. Para respetar las reglas de la neu rra l idad

en materia de gcnero, a menudo uso ·'pere;ona de oficios- en lugar de

-hombre de oficios- , pero no 10hago de una manera rigida. "\X'ill iam11/[0-

rris hablaba elocuentcmente del -trabajador manual- como si esta con-

dici6n le diese una dignidad y un honor que estan ausentes de la ex-

presion -artesano-, En vez de equiparar la evidenternente rehuscada

expresion ··persona de oficios- con la de -artista- yo suelo emplear -ar-

tesano- pesc a sus rcfcrcncias modcrnas al trabajo corrierue, especial-

mente en la forma en que se lisa en lnglaterra Por supuesro, bajo e! an-

tiguo sistema del arte no habia ni artesanos ni artistas tal y como hoy

en dia enteridernos esos terrninos, sino artcsanos/artistas que reunian

cualidades que en el siglo XVll I quedaron separadas de forma radical v

definitiva. .

Si antepongo la ruptura que descompuso el arre en bellas arres y ar-

tesania y el artesano/artista en artista versus artesano crco que pucdo

ofrccer una vision mas clara de 10 que se gano y se perdio con la ,·re-

volucion copemicana- del siglo XVllI. No obstante, revoluciones cultu-

rales como esa pocas veces surgen de la nada, y una de las ocupacio-

nes favoritas de los historiadores es buscar signos, portentos l' origenes.

Sin embargo, poner el acento en las anticlpaciones de los ideales y las

practicas modernas suscita en el lector no especlallzado la irnpresion de

que las modern as ideas de Ia literatura, d arle 0 b ml"isica seria, son el

result3clo de un desarrollo que estaba predesrinado, i\li investigaci6n se

propone evitar tales impl icaciones reconfollantes negandose a tratar el

moderno sistema del <1ltecomo resultauo de ulla evoluci6n inevitable,

..........•••-~.-.~~----. . . . . . . . . .------------------------



ivluv [lor el contra rio, consider« que l'slc l'S cl rcsultado de L1nainven-

cion dieciochesca:

Cunndo hahlo de invcncion no quiero decir que el moderno sis-

tema del .ute apareciera de golpe, pergenado por un puriado de filoso-

fos una tarde en el salon de Madame du Dcffand. Si insisto en que hubo

una ruprura entre el sistema prernoderno del arte v el moderno sistema

de las bcllas artes no pOI" ella pretendo negar la cxistencia de continui -

dades, en especial porqlle los elementos que componen tanto el arte

hello como la artcsanla cstaban uni ficados en el marco del viejo siste-

ina. En efecto, se pueden en con trar aspectos singulares de los Ideales

modernos del arte bello, el artista y 10 estetico, disperses entre muchos

JL l t oJ"<C 'S de la Grecia anrigua, pintores del Renacirnicnto y filosofos del

siglo XVlT pem csas ideas solo coagulan hasta componer un discurso

rcgubtivo y un sistema insr itucional a finales del siglo XV!!!. Tal como 10

hu senalado Hoger Chartier, el desarrollo gradual no lrnpide quc se pro-

dULClI1 disconrinuidades radicules: of! paso de uri sistema .. , al otro pue-

dl' SCI· comprendido como una ruptura profunda Y al rnismo tiernpo. ..

como un proccso en el que se dan vacilaciones, pasos arras y obstacu-

los- (1988, .v- i: Yeast' tarnhien Burke, 1997),'

EI moderno sistema del artc luc el resultado de la conjunci6n de

muchos factores: algunos de ellos son de alcance general y desarrollo

gra Ch.1JI: OITOS son m{IS rcstririgidos e Inmediatos: algunos son p r i n c i -

pulmentc intclcctuales y culturales. otros son sociales, polit icos y eco-

nomicos. Laconjuncion fue gradual. dcspareja y cuestionada, pero una

COSJ es cierta: antes del siglo XVIlI ninguna de las modemas ideas del

artc hello. del artista y de 10 estetico, como tarnpoco el conjunto de

pr:lcticas l' institucionex que asociamos con ellas, estaban integradas

dcntro de un sistema de norrnas mientras que, dcspucs del siglo XVlIl,

sc dan la~ principales poiaridades conccptuales y las insti tuciones del

renovado sistema del artc, y dcsde emonces se las tiene por admitidas

como princ.ipios rcgulativos. S610 despues que el moderno sistema del

:i. 1\")['cicmplo, en U11I"ecOllle "d;d,1e eS[ud i n donde se dcscntranaban las rakes aris-

[0[l'li;:),; y rncdievales del na!UI",di,llI() renarentista, David Summers dcmostraba can brl-

l l' I L 'ICZ : " cont inuk lad de b ide" de sensus communis desdc Le ona r d o hasta Kant , Pero

l ii rh, ' ronrinu idad es per fectarne rue compat ib le con 1 ,\ idea de una rup tura dccisiva cn cl

concept,., ck J rr c en e I "igln \""'111. La profunda contln uidad, incluso da da esta 11.1plum, se

m,1I11iC'nc en rd,lCi<in ,em 1:1 aru igil" ide:·] de ark y el gradual desa r rol l o de una mayo r

cons; di..'I":'cion (it' I" e-xI"'" l-,enei" ,p[l,;hl" (Su nuners, 19S7. 8·9. 17, 139J,

arte se hubo establecido como ambito aut6nomo podemos preguntar-

nos: "~Esrealrnentc arter- 0 "i.Que relacion ticne el "arte" con la vsocie-

dad?-. Como es obvio, las ideas y las practicas de las bcllas artes han

seguido evolucionando pero el sistema del arte establecido a 10 largo

del siglo XVIll ha seguido siendo cl marco dentro del cual la rnayoria de

estos cambios han tenido lugar.

En un libro que se propene poner en tela de juicio las prerensiones

univcrsalistas del sistema europeo de las bellas artes podria haber sido

util establecer una comparacion entre las practicas artisticas y las con-

cepciones artisticas de China, Japon, India y Africa, En el pasado unas

pocas investigaciones populates, con titulos tales como -arte japones- 0

-arte chino", se han preocupaclo en analizar las profundas di ferencias

que existen entre los supuestos basicos de ralesculturas acerea de las

artes y las principales eoncepciones que sobre esos mismos ternas es-

tan vigentes en Europa y en el continente americano. Sin embargo, la

lengua japonesa carece de un sustaruivo para -artc-, expresion que no

aparece basta el siglo XIX y, tal como ha sido senalado par Craig Clu-

nas, la Frase -arre chino" es una -invencion bastanre reciente.. nadie en

China antes del siglo XIX agrupaba la pintura, la escultura, la ceramica

y la caligrafia como objetos consti tuyentes del misrno campo de inves-. !

tigacion- 0997, 9). Sin duda China y japon tenian una nocion de -arte-

en el sentido mas amplio y antiguo del termino, igual que la mayoria de

las culruras, y puesto que nuestro terrnino -estetico- tambien puede ser

usado genericamente can rclacion a cualquier tipo de aptitud 0 de teo-

ria acerca de l a belleza, ser ia legit imo hablar de una -estetica- japonesa

o india (Saito, 1998). Pew debenamos evitar la tentacion de rraducir tra-

diciones tan ricas y complejas como esas a las concepciones europeas

del arte bello Y de 10 estetico, No obstante , resolver los problemas que

plantean las sernejanzas entre 10 especfficarnente europeo y los varia-

dos conceptos y practicas asiaticas requeriria escribir otro libro. Mas

adelante ' analizo brevernente algunas de las distorsiones y paradojas

que conl leva tratar ell' asirnilar las denominadas artes prirnitivas 0 tri-

bales de las culturas tradicionales africanas 0 incloamericanas J l as re-

glas impuestas pm el polarizado sistema europeo Pew antes de que

podarnos comprender adecuadarnente los ideales y las insti tueiones ar-

tisticas de otras culturas, necesitamos una mejor comprensi6n de 10

que tienen de particular los conceptos, las practicas y las instituciones

occidentales,

37



Al enlocar mi cnsayo en el analisis de las discontinuidades entre e!

viejo sistema del arte y el sistema de las bcllas artes de epocas recien-

tes creo haber dado un relate mas fiel a las evidencias y mas esclarece-

dor para el presente que las narraciones tradicionales, que se constru-

yen segun una idea de la continuidad y de 10 inevitable de los procesos

historicos.' Ahara se irata de que quienes creen en la universalidad 0 en

los origencs antiguos de los idcales y de las instiruciones del arte bello

hagan 10 propio. Y en efecto, algunos 10 estan intentando (Marino,

1996), En un l ihro di rigielo al lector corricnte cstaria fuera de lugar plan-

tear un debate con los cstudiosos que defienden una vision esencialis-

ta 0 conrinuista, pero puede que sea ut il cornparar mi punto de vista con

el de Arthur Danto en su reciente Despues delfin del arte (997), don-

de se hacen comundentes alegaciones a favor del relata de la inevita-

ble emergencia del sistema del arte. Dante escribe mas como fil6sofo

que como historiador, pero su texto combina con audacia el convenci-

mierno, tipicamente esencialista, de que -el arte es eternarncnte el mis-

rno- con la convicci6n hisroricista de que la esencia del arte se ha reve-

lado a ~imisma a 10 l argo de la historia (95). Lo que sorprende en el

relate de Danto es que no considera 10 estetico como parte de la esen-

cia del arte sino ~61o como una vision merarnente contingente (y equi-

vocada) que surge en el siglo XVllJ. No obstante, Dante, en tanto que

esencialista, esta igualmeme convencido de que la polaridad que sepa-

ra el arte de la artesania es eterna y universal aunque admire que la cul-

tura occidental no se hizo cargo de esta diferencia esencial entre el arte

bello y la artcsania sino despues del Renactmieruo (114).

Oanto incluso llega a aclmitir que hubo una -revolucion- en el con-

cepto del arte pero igualmente esta convenciclo de que 'para que haya

revoluciones historicas es precise que se de tambien algun concepto

extrahist6rico del artc- (UP). En suma, la escena historica descrita por

Danto e~ la siguiente: arte y artesania han estado siempre separadas

aunque originariamente no se distinguia entre elias sino que estaban

unificadas bajo el concepto de imitation, Cuando los individuos se hi-

cieron conscientes de la diferencia esencial que las separaba, durante

el siglo XVIlI, no s610 trataron el arte bello como una forma mas eleva-

da de imitacion sino que tambien primaria (y crronearnente) 10 sepa-

raron de la artesania en tcrminos de 10c stetico. Sin embargo, el arte si-

guio siendo visto como imitacion hasta c1 advenirniento del movimiento

moderno, tras el cual los artistas se ernbarcaron en busca de la cscncia

del arte hasta que en 1965 el arte pop y el arte conceptual dernostraron

que no habia una manera -correcta- para el arte. Finalmente el arte ha-bia revelado su verdadera naturalcza: algo que haec una afirrnacion y

al mismo tiernpo se encarna en ella de manera autoconscienre Tras la

revelation de que la esencia del arte es el -stgnificado encarnado- tam-

bien se revelo la forma verdadera de la polaridad que enfrentaba el arte

a Ia artcsania: ei significado encamado cont ra la mera util idad, el genio

contra la mera habilidad,

Coincide ton Danro en cuanto a que hahia un concepto de arte an-

terior al siglo XVIlI, un concepto que permitia hablar en terminos de re-

volucion, pem era un arte en d viejo senrido, en que el uso y el genic,

e I significado y la habilidad formaban una unidad Mi historia 'intenta

poner en relacion una cant idad de factores contingentes (intelectualcs,

sociales e institucionales), micntras que Danto mira por encima tales

contingencias para seguir la predestinada ernergencia de la esencia del

arre a traves de la historia interna de las artes visuales. Para Danto per-

renece a la esencia del arte el estar destinado a ser aquello en 10 que se

ha convertido y, ahara que la escncia se ha revelado, su fase histori-

ca ha terminado, El arte ya no tiene "una di reccion narrariva- (200, 430\

Este es el significado de la controvertida Frase de Danto -cl fin del arte-

la cual, aunque suena provocativa, sirnplemente signif ica e 1 fin del arte

en cuanto que pmcura encontrar su propia cscncia. Para mi, si puecle

o no darse un tercer sistema del arte mas alla del antiguo, al cual ya no

podernos retornar. y del moderno, que muchos luchan por superar, es

una cuestion al mismo tiempo plausible y urgcntc.'

S, Ta l y como ha a rgumentado I lavdcn White, cualqu ie r nar rat ion h is tor ica uende 3

un c.ierto tono o lrori,,;mo, En los terminus de White, yo estoy oponicndo un relate i1'6-

nico J narraciones sinecd6q\Jicas que pe1'ciben las ideas modemas de Jrte y de artis ta

como a igo elly:! emergencia era inevitable_

G, r : , \[Os somcros cornentarios a b obra de Danto di t l c i l rnen:e plledcn haccr jm;lici<l

~I la sofisticacion hisrori ca y filosofica de ,1\1 argumento, te l cual repre senta una inrnensa

contribucion a la cornprension de rodas I;L' fonuas conternpora neus de artc, Esro es es-

pecialmcnte notable en !J incisi va critica de Dante :II a rte de los ultimos cinruerua anos

(1992. 1994. 20001.

38

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