Putney, Mary Jo - The Guardians 01 - The cal Marriage (Traducc)

8/8/2019 Putney, Mary Jo - The Guardians 01 - The cal Marriage (Traducc)

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The Alchemical Marriage Mary Jo Putney

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Torre de Londres, julio de 1588

Aunque las cmaras eran espaciosas y estaban amuebladas comocorresponda a un prisionero de rango, las fras paredes de piedra estabansaturadas con el dolor y la muerte. Sir Adam Macrae camin por su prisin,sacudiendo los grilletes, preguntndose si se le concedera la formalidad de un

juicio antes de ser ejecutado. O sera mantenido para siempre all, pudrindoseen silencio mientras su espritu y su cuerpo se marchitaban?

La gruesa puerta chirri al ser abierta. Se gir con cautela, sabiendo queno era hora de que se entregarn los alimentos. Su expresin se endureci por laentrada de dos hombres en capas oscuras con capucha. As que la Reina Virgen

y sus consejeros haban escogido callarlo asesinndolo en lugar de arriesgarse a

decapitar a un escocs prominente.Bueno, por Dios, no sera derribado sin una pelea. Se apoder del tramo

de cadena que conectaba sus esposas. Aunque el detestable hierro reduca supoder, los pesados eslabones seran un arma aceptable.

El ms alto de los hombres se quit su capucha, revelando una largabarba blanca y una mirada penetrante. Era John Dee, el propio brujo de lareina.

Macrae recobr el aliento. Dee tena verdadero poder, as comoinfluencia con la reina, pero no sera enviado all a realizar un simple asesinato.

Pens que viva en el continente, Maese Dee. Me dijeron que quizsterminara sus das en Bohemia, donde su trabajo es muy valorado.

Dee le dio una pequea sonrisa seca.

Oficialmente, an estoy en Bohemia, pero mi reina necesita de m,para una gran crisis que se avecina.

Inglaterra est en peligro? Esplndido. Macrae aplaudi, lasargollas tintinearon. Ruego por fuerza a sus enemigos.

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No sea tan rpido para invocar la destruccin. Hay destinos peoresque Isabel, no importa lo poco que ella le guste.

Ella asesin a la reina de los escoceses, dijo terminantementeMacrae. Se merece todo lo que dije, y ms.

Nadie lament la muerte de Mara Estuardo ms que Isabel. Ellapermaneci a su lado desde hace aos dcadas a pesar de todas lasevidencias de que su reina estaba involucrada en complots traidores. Lanecesidad de ejecutar a su propia prima y su compaera soberana llev a Isabela volverse medio loca de dolor.

Sin embargo, asesinar a su prima es lo que hizo.

No podra haber esperado hasta regresar a Escocia antes de maldecirel nombre de Isabel y predecir que la ira de Dios la golpeara? Ella no tuvo mseleccin que encarcelarlo. El viejo hechicero sacudi la cabeza severamente.Usted apoy a Mara a riesgo de su propia vida, aunque ella era catlica y ustedprotestante. A pesar de que su lealtad es encomiable, uno debe preguntarsesobre su juicio.

Siendo un obstinado escocs, el juicio nunca haba sido el punto fuertede Macrae.

Qu es un hombre sin lealtad? Ella era mi reina, e Isabel no tenaderecho a ejecutarla. Ha venido aqu a mofarse de m por mi lengua insensata?

No, Sir Adam. La mirada de Dee era decidida. He venido a

preguntarle si le gustara ganar su libertad.

Libertad? Una visin de Glen Rath inund a Macrae. El lugar ms bellode Dios sobre la tierra verde, con un fuertsimo aire puro que un hombre podarespirar...

Puso freno a su deseo, sabiendo que eso lo debilitara.

Por supuesto que quiero ser libre, pero es posible que alcanzar lalibertad sea un precio demasiado alto.

Me dijeron que usted es el mejor mago del tiempo en Gran Bretaa,Sir Adam. Los ojos perspicaces brillaron. Quiero que me conjure unatempestad.

As que Dee estaba al tanto de sus poderes. Eso explicara por qu loscarceleros de Macrae haban sabido que mantenerlo encadenado con el hierrofrenaba su magia. l se haba preguntado acerca de eso, dado que rara vez losprisioneros de su rango eran esposados. El hecho de que los soldados de la reinahubieran irrumpido en su alojamiento por la noche y le golpearon con hierroantes de que pudiera defenderse le haba hecho preguntarse si haba sidotraicionado por otro Guardin, pero aparentemente no. El formidable Dee tena

sus propias maneras de saber.

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Tal vez podra, pero por qu debera?

Para salvar a Gran Bretaa de un gran mal. Dee se movirgidamente hacia una de las sillas, seguido de cerca por su asistente. Leimporta si me siento, Sir Adam? Mis viejos huesos sufren del viaje por toda

Europa.Recordando sus funciones como anfitrin, Macrae tom vino de un bien

surtido gabinete y llen tres copas. Dee aceptado fcilmente, pero su compaerodud antes de tomar una copa y retirarse al rincn ms oscuro de la habitacin.Se movi con la flexibilidad de la juventud. Un aprendiz de brujo, o unsirviente oficial? Fuese lo que fuese, tena la confianza de Dee. Macrae esperabaque el muchacho tambin poseyera discrecin.

Macrae ocup la silla frente a Dee, estirando sus largas piernas ante l,un retrato de tranquilidad, a pesar de sus cadenas.

Usted dice que desea una tempestad.

Espaa e Inglaterra se han estado peleando desde la muerte de MaraTudor. Ahora Espaa ha reunido una Armada, la flota ms grande jams vista,ms de ciento treinta barcos y treinta mil hombres. Mucho ms de lo queInglaterra puede reunir. Dee mir su vino. Quiero llamar a una tormentaque destruir los barcos espaoles y salvar a Inglaterra de la invasin.

Macrae jade.

Tiene alguna idea de lo que est pidiendo? El ms grande mago del

tiempo que haya vivido no podra conjurar tal tormenta. En particular, no enesta temporada. La magia debe construirse sobre lo que existe en la naturaleza,

y los suaves aires de verano ofrecen poco del poder que se necesitara paraconvertir una pequea tormenta en una grandiosa.

S que no ser fcil, pero si cualquier hombre puede, es usted.

Macrae dej que los eslabones metlicos se deslizaran entre sus dedos,el peso de la cadena aplastando su mente.

Despus de ms de un ao de hierro fro, no s si todava tengo el

poder. Incluso si lo tengo, me freir en el infierno antes de utilizarlo en beneficiode Isabel.

No se trata de Isabel, sino de Gran Bretaa. Eso significa Escocia, ascomo Inglaterra. De verdad quiere que la mano dura de Espaa caiga sobreesta isla?

Macrae se encogi de hombros.

Es posible que saqueen Londres, pero dudo que toquen a mi puebloen las en las regiones salvajes de Escocia. Djeles venir. No me importa si la

inglesa Isabel o el espaol Felipe gobiernan aqu.

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Ni siquiera si negndose a mi oferta le cuesta la vida?

Su boca se curv.

He vivido con la expectativa diaria de mi muerte durante quince

largos meses, Master Dee. Por qu este da es diferente?Con un sordo juramento, el encapuchado compaero de Dee se gir del

ensombrecido rincn.

Si cree que una invasin espaola no importa, usted es tan ignorantecomo insensato, Macrae. Deje de lado sus prejuicios ypiense.

La rica voz como el whisky era de sexo femenino. Echndose hacia atrssu capucha, la mujer revel unos negros ojos brillantes en una cara estrecha yBizantina de inteligencia temible. A fines de sus aos veinte, no era bonita. Encambio, era hermosa en la forma de una reluciente y mortal espada.

Sir Adam, conozca a mi asociada, Isabel de Cortes, Dee dijosecamente. Si necesita ayuda o persuasin, ella puede proporcionarlo.

Macrae estudi a la mujer. Incluso con el hierro paralizando su visininterior poda ver que arda con el poder de un mago, ahora que ella ya noocultaba sus capacidades.

Isabel de Cortes, dijopensativamente. Un nombre espaol, y unacara espaola. Odia tanto a su propio pas, Seora?

Espaa dio a luz a mis antepasados, pero no es mi pas. Inglaterracuenta con mi lealtad. Los ojos oscuros de Isabel se estrecharon. Ustedpiensa que una invasin espaola no afectar a Escocia, pero se equivoca.Cuando Mara Tudor rein, Felipe de Espaa fue su marido, y la carne quemadade los mrtires protestantes contamin el aire de Smithfield. Eso no fue nadacomparado con lo que suceder si la Inquisicin llega a Gran Bretaa.

Eso nunca suceder.

Cree que no? Su reina de los escoceses leg a Felipe sus reclamos altrono Ingls, y sus soldados vienen para hacerse con ese legado por el fuego y el

acero. Incluso su pramo del norte no estar lo bastante lejos para protegerle.Usted no conoce Escocia ni a los escoceses.

Ella hizo un sonido que le record a un gato monts.

Como mago, usted debe tener alguna habilidad de clarividencia. Dleuna larga y verdadera mirada, y luego dgame que no importa si vienen losespaoles. Buscando en un bolsillo de su tnica, sac un disco de obsidianapulida quizs de cuatro pulgadas de dimetro.

Se neg a tomar el cristal de videncia.

Usted olvida las cadenas de hierro que me sujetan.

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El toque del hierro limita todos sus poderes, incluso el ms pequeo?Isabel pareci sorprendida. Lo que era peor, compadecindolo. La mayorparte de los magos no son tan sensibles.

Yo lo soy. Su voz era plana. Durante quince interminables meses,

sus sentidos interiores haban estado ciegos, sordos y mudos, dejando undoloroso vaco que nunca poda ser llenado de nuevo.

Maese Dee, usted tiene la llave de los grilletes, dijo Isabel.Dmelas, as podr liberar a Macrae.

Dee sac la llave.

Sir Adam debe jurar no hacer uso de su poder para hacer dao.

Si usted sabe algo de los Guardianes, debe saber que noscomprometimos a proteger y no a destruir. Para estar libre de las cadenas...Macrae observ la llave ansiosamente. El mago era viejo, y sera fcil quitarle lallave... no. Todava no haba cado hasta el punto de atacar a un anciano.

Macrae haba aceptado tcitamente la condicin de Dee, Isabel tom lallave y se acerc para abrir los grilletes. Su corazn lata con impaciencia,extendi sus muecas, tratando de que sus manos no temblaran. Ella inclin lacabeza sobre las cadenas, mientras luchaba con el burdo cerrojo, que no sehaba abierto en ms de un ao. Las puntas de sus dedos rozaron sus muecas,chamuscando su carne tierna escoriada con su energa de mago.

Una mano libre. Tuvo que ejercer todo su control para mantenerse

estable, mientras ella giraba la llave en la otra cerradura. Su pelo oscuro brillabacomo el ala de un cuervo.

La cerradura se abri y los grilletes cayeron en su regazo. l levant lacadena asesina que haba encarcelado a su mente an ms a fondo que sucuerpo y luego la arroj con rabia chocando contra la chimenea fra. Mientras lse frotaba las muecas, fue dolorosamente consciente de que su menteentumecida no senta nada diferente. Haban llevado quince meses de parlisissu poder a la inutilidad?

Camin hacia su nica ventana y mir fijamente el cielo. A travs de su

largo cautiverio, haba envidiado a las gaviotas que se elevaban sobre elTmesis. Si fuera un cambia formas, se habra transformado y volado a casa aEscocia. Pero l no tena ese poder, por lo que haba permanecido en la tierra,privado de su ser ms profundo.

Invocando la disciplina de su formacin, visualiz la luz que manabapor su cuerpo, consumiendo los venenos de temor y frustracin. Profundamentedentro de su ser se agit una pequea flexin de poder, como una lucirnagaque chispea en la noche. Dividido entre el deseo de tomar y el deseo de saborear,nutri aquella chispa, delicadamente reviviendo lo que haba estado congeladodesde hacia tanto tiempo.

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Al igual que la ruptura del hielo en la primavera en las clidas Highland,el poder se alz por l. Mareado con las prisas de la magia, lanz la rabia de sucautiverio en una nube que tap el sol. Y creci rpidamente hasta que unaoscura tormenta azot la Torre de Londres, con una furia que sacudi lostejados. El vendaval de lluvia se escurri entre las barras, fra y refrescante. Se

ri en voz alta ante la embriagadora alegra de formar el viento una vez ms.Un buen uso de la ira, coment Isabel. Ahora debe aprender a

odiar a la flota espaola.

Macrae haba medio olvidado a sus visitantes, que haban estadoesperando en silencio. Soltando la nube, se volvi de nuevo a la habitacin. Lalluvia comenz a disminuir. En cinco minutos, la tormenta se habra ido.

Mire ahora. Isabel, una vez ms, le ofreci su cristal de videncia.Ella se haba quitado su capa, revelando un cuerpo fuerte y sensual. No haba

estado en la misma habitacin con una mujer desde su encarcelamiento, y seencontr vergonzosamente consciente de su feminidad. Su aroma suscitpensamientos de luz de estrellas del desierto y las especias del pramo.

Acept el cristal con renuencia. Un vidente dotado poda ver encualquier superficie reflectante agua, vino, vidrio, una piedra preciosa, peroesta ahumada obsidiana lata con la energa de su propietario como si se tratarade una criatura viviente.

Durante su cautiverio l haba estado oscuramente alegre de que elhierro hubiera bloqueado su visin, ya que indudablemente su clarividenciamostrara su destino. Pero a pesar de que tema que revelara ms de lo quequera ver, haba llegado el momento de mirar ms all de su celda. Cerr losojos, despejando su mente mientras formulaba una pregunta. Que podratraer una invasin espaola? Entonces l mir a travs del cristal con ojosdesenfocados tantas imgenes como pudieran aparecer.

Dunrath se quemaba. Sus dedos se contrajeron alrededor del disco.Querido Dios, su madre saltaba de la ventana de la torre, escogiendo unamuerte rpida al horror lento de quemarse viva! Por qu los espaolesatacaran su hogar?

La respuesta se form en su mente tan fcilmente como se habaformado la imagen de la obsidiana: porque su hermano menor era otro Macraeterco que se negara a abjurar de su fe o doblar la rodilla a los extranjeros.Dunrath sera arrasado como una leccin para otros clanes.

Macrae haba aceptado la inminencia de su propia muerte, pero habacredo que su hogar estaba a salvo. Su hermano se convertira en Laird, lamuchacha Macrae con la que iba a casarse encontrara otro marido, y su familiacontinuara en la salud y la prosperidad. Sin embargo, esto...

Podra Isabel Cortes haber sembrado falsas imgenes en el cristal? lrechaz la idea al instante. Autntica como la hoja a la que se asemejaba, ella no

urdira una mentira para presentar su caso, incluso si tal cosa fuera posible.

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Con las sienes palpitantes, mir el cristal de videncia de nuevo, con laesperanza de ver mitigarse algunos de los horrores de su primera visin.

Dulce Jess, no! La imagen que se form del majestuoso Castillo deEdimburgo que se cerna sobre la ciudad... una ciudad que pareca como si la ira

de Dios la hubiera golpeado. No, no Dios, sino el odio de los hombres queforzaran a otros en su propio molde y los destruiran cuando no pudieranpersuadirlos. El humo comenz a brotar del propio castillo. El orgullo y lahistoria de Escocia era una antorcha, mientras los soldados espaoles corransalvajemente, violando y saqueando.

l no necesita a Dee o a Isabel de Cortes para decirle que una visin noera la Verdad, sino una Posibilidad. Lgubremente, se forz a s mismo a vercomo otros horrores fluan ante sus ojos. Un grupo de mrtires cantando a Dios,mientras las llamas los consuman. La Reina Virgen en la guillotina, yendo a sumuerte con su frreo coraje. Soldados armados acabando con los protestantes

que rendan culto en secreto, el destello de las hojas contrastando con las gotasde sangre carmes.

Cunto tiempo Macrae contempl el cristal, no lo saba, pero cuandoalz la vista su cuerpo estaba fro y la habitacin estaba oscureciendo. Isabel selevant para encender velas contra la noche venidera.

No es un buen futuro, dijo tranquilamente.

No. A pesar de no gustarle la idea de trabajar con esos Sassenach, nopoda mantenerse al margen mientras los lobos se disponan a destrozar GranBretaa. Har todo lo posible por frustrar a la Armada, pero les advierto queconjurar una tormenta puede estar ms all de mis capacidades. Sus labios seafinaron cuando devolvi el cristal de videncia. Ser amargo daar a tantoshombres cuando he prestado juramento de proteger.

No tengo ms deseo de tomar vidas que usted, Sir Adam. Deepareci muy viejo y cansado. La intencin es dispersar a los buques, destruirsu eficacia de lucha, no matar. Una tormenta en los 1Narrow Seas conducira alos barcos a la costa Flamenca, y si Dios quiere, la mayora de los marineros ysoldados sobrevivirn.

Era la sutileza del abogado... aun si la intencin no era matar, unatempestad lo suficientemente poderosa dispersara tantos barcos que sin dudahara que los ms dbiles se hundieran. Los hombres moriran... Macrae nopoda hacerse ilusiones dadas las circunstancias. Pero si l vio la verdad, laaccin de su parte podra salvar muchas ms vidas que las en peligro.

El poder era un arriesgado y peligroso don. Los Guardianes eranentrenados en la tica y la moral desde la infancia, pero ningn Maese podraanticipar todas posibilidades. Cuando una situacin era crtica, el Guardininvolucrado deba decidir lo que sera mejor... y que Dios le enviara sabidurapara elegir lo correcto.

1 Canal Ingls (francs: La Manche, " la manga") es un brazo del Ocano Atlntico que separa laisla de Gran Bretaa de Francia del norte y une el Mar del Norte al Atlntico. (N. de la T.)

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Har lo que pueda, pero voy a necesitar ayuda.

Lo que desee, Sir Adam, dijo Dee. Cules son sus exigencias?

En primer lugar, libreme de esta abominable crcel. Quiero una carta

firmada por Isabel indicando que todos los cargos en mi contra se han retirado ysoy un hombre libre. Explquele que he jurado hacer todo lo posible, pero queno puedo garantizar que vaya a ser capaz de evocar una tormenta losuficientemente poderosa para destruir a la Armada.

Dee asinti.

Entendido. Estoy autorizado a conceder eso. Qu ms?

Macrae se frot su cabeza palpitante, intentando imaginar lo quenecesitara para una tarea de esa magnitud.

Debo tener un lugar dentro de la vista del canal, de preferencia en unlugar de poder.

Isabel dijo:

Mi familia tiene una pequea casa en Kent que se ajusta a eserequisito. Qu ms?

Tener el poder no basta para crear una tempestad solo, as quenecesitar su ayuda en el trabajo, Maese Dee. Si puedo usar su magia, hay unaposibilidad de que pueda tener xito.

El viejo intercambi una mirada con la mujer.

Isabel ser su ayudante.

La mirada de Macrae se volvi hacia ella con consternacin. l debatrabajar con este gato monts que lo atraa peligrosamente con sus ojos deobsidiana? Manteniendo su nivel de voz, dijo:

Yo prefiero trabajar con usted. Nuestras energas se mezclarn mejor.

El anciano sacudi la cabeza.

Soy un notable erudito, un astrlogo, y un estudiante de la sabiduraantigua, pero mi poder mgico es slo moderado. Isabel es la mejor vidente y lams poderosa maga que he conocido... excepto por usted, tal vez. Ella puedecontribuir mucho ms que yo.

Macrae quiso protestar pero no poda. Sus sentidos interiores le dijeronque Dee hablaba con la verdad: Para un gran trabajo mgico, Isabel de Cortessera un mucho mejor compaero. Ms poderoso y ms peligroso.

l cerr los ojos con cansancio y una vez ms vio a Dunrath arder.

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Kent, agosto de 1588

Era media tarde cuando el grupo polvoriento de viajeros lleg aLeighton Manor. El mar no era visible, pero el aroma era llevado por el viento.

Tan pronto como la media docena de caballos se detuvieron en losestablos de Leighton, el escocs baj de su montura, lanz sus riendas a uno delos siervos que los acompaaban, y se dirigi a zancadas hacia la costa. Suslargas piernas rpidamente lo llevaron lejos, Isabel desmont y cruz haciaMaese Dee.

Cree que tratar de escapar?

El anciano desmont de su caballo con un gemido de fatiga.

No, l ha dado su palabra, y los Guardianes nunca rompen su palabra.Creen que compromete sus poderes.

Me gustara saber ms de los Guardianes.

Dee hizo un gesto en la direccin que Macrae haba desaparecido.

Ah el hombre que puede decirte.

Podra, pero no, dijo secamente. Macrae ha hecho todo lo posiblepara evitar hablarme o mirarme desde que comenz este viaje.

No se siente cmodo sabiendo que debe trabajar estrechamentecontigo. Compartir el poder es un proceso muy ntimo, y t eres una extraa.

Y quiero seguir sindolo.

Ve tras l.

Tal vez, despus de que est debidamente instalado. Ella llam alama de llaves, la sra. Heath, que haba salido de la casa para saludar a los

huspedes.

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Dee sonri un poco.

No te preocupes por tus deberes de anfitriona... los sirvientes seocuparn de mi comodidad. Es ms importante tejer un vnculo con nuestromago del tiempo.

Isabel se permiti ser persuadida porque quera seguir a Macrae. Elhombre la intrigaba. Se mova como una pantera, apenas domesticada. Yaunque quiz no le gustara ella, era un mago por s mismo por lo tanto, no letema como la mayora de los hombres. Poda aprender mucho de l.

Levantando su falda para librarla de la maraa de flores silvestres,abandon el grupo de edificios y sigui el sendero que Macrae haba tomado. Lacasa seorial estaba establecida en un doblez de las colinas para refugiarla de los

vientos, pero el mar estaba slo a un corto paseo.

Localiz a su presa en el antiguo crculo de piedra situado en unacantilado que se elevaba un centenar de pies por encima de las olas. La leyendalocal deca que el crculo haba sido construido por los Druidas. Para aquelloscon la visin de ver, tres lneas de ley apenas brillantes se cruzaban en el lugar,creando un estallido de energa en la tierra. Como Isabel haba prometido, eraun lugar de gran poder.

Con la luz del sol brillando en su pelo rojo oscuro, el escocs caminabapor el crculo, tocando cada una de las piedras de forma irregular a su vez.

No le tom mucho tiempo encontrarme, Seora de Cortes.

Supe que el crculo lo atraera. Quema con el poder. Ella habapasado horas interminables en ese lugar, meditando, estudiando,experimentando para encontrar la forma y los lmites de su talento. Aunque erainquietante ver su santuario invadido por ese tipo de inquieta energamasculina, el crculo era el lugar lgico para celebrar el ritual. Ella lo podalimpiar de su presencia cuando su trabajo se hubiera hecho.

Usted dijo que su familia posee este seoro? Aunque su tono erabrusco, por lo menos le hablaba.

S, pero soy la nica que viene aqu. Leighton era su hogar mucho

ms que la magnfica casa de Londres donde sus padres y hermanos residan.Aqu poda ser espinosa, obstinada. Qu significa ser un Guardin? Es unasociedad secreta?

l vacil, y luego se encogi de hombros, como si decidiera que sucapacidad le daba derecho a saber.

No somos tan organizados.... simplemente un grupo de familias en lasque el poder es fuerte. Nos conocemos los unos con los otros y a menudo noscasamos entre s, pero normalmente vamos por caminos separados. Nuestrascasas estn en los mrgenes de Gran Bretaa, donde la antigua magia es ms

fuerte. Escocia, Gales, Cornualles, la Isla de Man, Irlanda, nos encontrar en

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todos los lugares. Hemos jurado no slo proteger, sino mantener nuestrospoderes ocultos para mayor seguridad.

Todos son magos del tiempo?

El poder viene en muchas formas, y el dominio del tiempo es raro.Sonri irnicamente. Las capacidades especficas no se manifiestan hastaque un nio se acerca a la madurez. Mi primera seal de trabajo meteorolgicohizo volar el techo de un establo. Mi padre no estuvo contento.

Ella no lo haba visto sonrer antes y le sorprendi de cuan atractivo erasu surcado y barbudo rostro cuando no frunca el ceo.

Cunto tiempo han existido los Guardianes?

Nadie lo sabe realmente... sin duda desde antes que los romanosllegaran a Gran Bretaa. En la antigedad los grandes magos que participan enuna lucha por el poder casi nos destruyeron a todos. Los supervivientes sereunieron en un consejo y acordaron que debemos utilizar nuestras habilidadespara la paz y la proteccin. l mir mar adentro, su expresin angustiada.Hacemos lo posible, pero la lucha es interminable.

Por lo tanto, el nombre de Guardin era literal. Que extrao y hermosoque esas personas de poder se comprometieran a servir y proteger. Cmo sera

venir de una familia as?

Ustedes deben ser santos si pueden ponerse de acuerdo sobre lo quees mejor.

Yo no digo que siempre estuviramos de acuerdo, pero tratamos dehacer lo correcto. Nosotros... no siempre tenemos xito. Se inclin pararecoger una flor silvestre. Quisiera que mi madre estuviera aqu para poderdebatir esta empresa con ella. Ella tiene la mente ms clara de cualquier magoque conozco.

Las mujeres son aceptadas como iguales en sus consejos? dijo,asombrada.

Por supuesto, algunos de los magos ms poderosos en Gran Bretaa

son mujeres.

Qu maravilla!

Su familia no es as?

Algunos de mis antepasados de Cortes tenan pequeos dones, peronunca ha habido uno como yo. Sus padres haban perdido la esperanza conella. Ellos haban querido una hija agradable y sumisa que se casara dentro desu crculo. En su lugar, haba nacido una nia demasiada extraa, demasiadaindependiente, para la vida normal. Cuando empec a mostrar signos de

inusual poder, mi padre contrat a Maese Dee para ser mi profesor, as

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aprendera a controlar mis habilidades. Ha sido mi salvacin. Nunca jams heescuchado de sus Guardianes.

Maese Dee ha sufrido a causa de su reputacin pblica como un magoy astrlogo. El abuso acumulado en l ilustra la razn por la que preferimos

permanecer en segundo plano. l levant su cabeza y mir fijamente maradentro, como si olfateara el viento. Las flotas estn combatiendo cerca de lacosta holandesa. Los hombres estn muriendo ahora mismo fuera de la vista y elsonido.

El recordatorio de su misin destruy su placer del perfecto da deverano.

Usted puede ver sin un cristal de videncia?

Oigo sus gritos en el viento.

Ella sac su cristal de videncia, que estaba siempre con ella. En lasnebulosas profundidades, vio el feroz retroceso del can mientras dos barcosse disparaban en silencio el uno al otro, expulsando humo y flameando llamas.Era una escena del infierno.

La escuadra Inglesa est bien comandada y en ptimas condiciones denavegabilidad, pero inmensamente superado en nmero. El peligro es grande.Debemos actuar rpidamente.

No cabe duda de que tiene razn, pero es difcil llevar a cabo untrabajo que va a costar muchas vidas si tengo xito.

Sus labios se afinaron.

No parece totalmente comprometido con nuestra causa, Macrae. Suodio por los ingleses lo ha cegado a la probabilidad de que los espaolesasesinarn a su propia madre?

Gir su cabeza de repente, sus ojos chispeando peligrosamente.

Cmo sabe lo que vi en su cristal?

Como su don es el tiempo, el mo es ver claro. Despus de que ustedexamin su futuro, fui capaz de ver las imgenes que haba invocado. Ellasacudi la cabeza. La pasin abastece de combustible el poder. Usted necesitams clera, Macrae. Este no es un juego, sino una lucha por la vida y la muerte.Qu le har realmente desear destruir a nuestros enemigos?

Si yo tengo poco ira, usted tiene demasiado, Seora. Su aversin a losespaoles es como una marca abrasadora. Seguramente Maese Dee le enseque el odio es peligroso para las personas con poder. Corre el riesgo de destruirno slo a sus enemigos sino a uno mismo. En este caso usted odia a los que sonde su propia sangre.

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Esos no son los espaoles de mi sangre! Su ira estall, no slo porlos espaoles sino con Macrae por leerla tan fcilmente. Ha pasado casi uncentenar de aos desde que mi pueblo sali de Espaa. Fuimos torturados,asesinados, robados, y exiliados para siempre de la tierra que habamos servidolealmente. Ellos nos llamaron marranos, cerdos. No me importa nada lo que me

ocurra a m, con tal de que evitemos que esas bestias espaolas invadanInglaterra.

l estudi su rostro, sus ojos color avellana dorados por el sol de latarde.

As que usted es Juda. He odo que algunas familias judas serefugiaron en Inglaterra despus de que fueran expulsadas de Espaa yPortugal. Abjur su familia a la religin catlica que se vieron obligados aaceptar y volvieron a la fe de sus padres?

Somos buenos protestantes ahora, pero nuestros recuerdos sonlargos. Y si algunas prcticas judas seguan an en la intimidad de sushogares, pues, no era asunto de nadie ms. Ellos hicieron lo que era necesariopara sobrevivir, y para mantener el Pacto en sus corazones. Usted me acusa deodiar, pero odia a Isabel. Por qu? Es una gobernante justa e imparcial. Susabidura en el equilibrio entre catlicos y protestantes ha impedido a losingleses derramar la sangre de uno y otro. Por qu la desprecia?

Ella ejecut a mi reina. Por eso, no puedo perdonarla.

Mara Estuardo, una escocesa criada en la corte francesa, que tramcomplots desde su prisin y trat de asesinar a Isabel, Isabel se quebr.Incluso un escocs tan leal como usted no puede negar la traicin de Mara.

Su mandbula se apret. Hombre terco. Sabiendo que nunca estaran deacuerdo sobre la poltica, ella dijo,

Maese Dee dice que usted ha dado su palabra para evocar unatempestad, as que empecemos. No hay tiempo que perder. Ella comenz a

volverse hacia la casa.

l agarr su mueca. Ambos se congelaron cuando la energa aumententre ellos. Ella sinti como si todo su aliento hubiese volado de su cuerpo. As

que esto era la pasin... era incmoda, inapropiada, innegable. l sinti lomismo... ella poda verlo en sus ojos.

l solt su mueca, su aliento spero.

Los preparativos son complejos, y Dee debe preparar una carta astralpara el mejor momento de proceder. Si no aprovechamos cada brizna disponiblede poder, no habr posibilidades de xito.

Ella se retir un paso, no quieren encontrar su mirada.

Muy bien, haga lo que deba, pero lo ms rpido posible, antes de quesea demasiado tarde.

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Como usted desee, Seora Bruja, dijo con gran irona. Tal vezpueda conjurar un vendaval rpido para poner fin a los enfrentamientos por elmomento, luego los Ingleses sern capaces de reagruparse.

Si puede hacer eso, por qu no? pregunt con exasperacin.

Porque temo el costo para mi alma. Pero tiene razn. No puedocontenerme por ms tiempo, no importa lo mucho que me desagrade esta tarea.Se gir y descans sus manos sobre la piedra ms grande, la ms cercana almar. Cuando l concentr sus energas en la tarea, qued absolutamenteinmvil, salvo por el movimiento de sus labios cantando silenciosamente.

Manteniendo su distancia del vrtice de poder que se arremolinabaalrededor de l, Isabel us su cristal para supervisar la batalla. Los cielos seoscurecieron, una lluvia despiadada barri por las flotas en guerra, y loscontendientes se separaron. Los espaoles retrocedieron, y uno de sus buques

de guerra daados se fue a pique y se hundi.Mientras Isabel susurraba en voz baja una oracin de agradecimiento,

Macrae expuls un largo, estremecedor aliento y lanz su hechizo. Su rostroestaba demacrado, vaco de su habitual vitalidad.

Sabiendo como era de exigente trabajar con el tiempo, silenciosamentepregunt a la obsidiana lo que pasara con Macrae. El remolino de imgenes dela batalla se disolvi en la niebla.

Y su destino? Ella vaci su mente y trat de dibujar su propia imagenen el cristal.

Todava nada.

Sinti fro, aunque la imposibilidad de ver poda significar muchascosas. Lo ms probable es que ella no pudiera ver porque estaba demasiadoimplicada en lo que estaba a punto de suceder para tener la claridad necesaria.Pero tambin era posible que las demandas de detener a la Armada fueran tangrandes que ninguno de ellos sobrevivira.

Ocultando su aprensin, Isabel dijo:

Bien hecho. Logr poner fin a la batalla antes de que la flota inglesafuese gravemente daada. Empiezo a creer que puede producir la gran tormentaque necesitamos.

Sus ojos se abrieron, y l gir para apoyarse contra la piedra, cruzandolos brazos sobre su pecho.

Tuve suerte. Un vendaval de verano estaba comenzado cerca de losbarcos, as que todo lo que tuve que hacer fue reforzarlo. El hechizo necesariopara esto fue a una gran tempestad como un gato de granero es a un tigre.Torci su boca. Seguramente usted sabe que la magia siempre tiene un

precio, y el que yo pague ser alto. Est tambin dispuesta a pagar el costo deeste conjuro?

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Ella pens de la obsidiana nublada.

Estoy dispuesta.

Incluso si el precio exiga todo lo que ella tena.

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Llamando al viento...

El aire zumb con el poder cuando Macrae y la Seora de Cortes,tomaron sus lugares en el antiguo crculo de piedra. El hombre y la mujer, jamsopuestos sino complementarios. Dee no estaba presente, ya que sera incapaz deayudar y tema que su presencia fuera una distraccin. El anciano habapreparado una carta para el mejor momento, pero su rostro haba estadosombro, cuando estudi las posiciones planetarias. No haba sido necesario quedijera que la carta no garantizaba el xito.

Pero fue el mejor tiempo disponible sin tener que esperar durante das,por lo que Macrae deba hacer lo que pudiera. A pesar de su reticencia inicialpara llevar a cabo esa tarea, las imgenes de Dunrath y Edimburgo lo

obsesionaban. Ahora estaba determinado al igual que la mujer que lo enfrentabaen el crculo.

Inclin la cabeza hacia su compaera.

Seora, empecemos.

Cuando quiera, Macrae. Su conducta era reservada, sin embargonada poda disminuir lo fulminante de sus ojos negros o el encanto de suexuberante figura femenina.

Comenz lanzando un crculo de proteccin, utilizando el conocidoritual para centrar su mente. Cuando su concentracin aument, su visininterior reconoci las esencias alrededor de l. Isabel de Cortes era la ms viva.Profunda e intensa, era un rayo de poder.

l extendi la mano y toc su energa. En silencio, reconoci supresencia y le concedi acceso. En otra ocasin se habra sentido tentado aexplorar las riquezas de su mente y espritu, al menos hasta que hubiera cerradosus escudos y lo expulsara, pero ahora tena una labor ms importante.

Ampliando su percepcin, sinti la energa de Dee en la casa seorial. El

patrn del anciano era una estructura de enorme complejidad, con un espritu

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ardiente en el centro. Los criados eran chispas de luz, cada uno nico si unodecidiera estudiarlo de cerca. l no lo dese, no esta noche.

Sintoniz con la tierra y la antigua fuerza que resida all. Isabel tenarazn, ese era un lugar de gran magia. Cuando estuvo plenamente orientado,

lanz su conciencia hacia el cielo, elevndose hacia el sol como un halcngigante. El crculo, las dos figuras humanas, la costa, y el sinuoso mar... todosempequeecieron en una velocidad vertiginosa. Con el poder de Isabel paraabastecer de combustible su vuelo, l se elev ms y ms alto hasta que suconciencia se extendi al este a travs del Canal, al norte a Escocia, al sur aFrancia, al oeste hasta Irlanda.

El da anterior, Isabel haba visto a los ingleses abrir fuego a los buquesde la Armada. Poco dao se haba hecho, pero slo porque los barcos espaoleshaban cortado sus anclas para escapar rpidamente. Aunque ello los hubierasalvado de la incineracin, sin anclas buenas los buques eran vulnerables

cuando estaban cerca de la costa.S, esa era la respuesta. La Armada estaba ahora encajonada entre los

hostiles ingleses y los bancos de arena de la provincia holandesa de Zeeland. Sipudiera forzar a los buques hacia los bancos, muchos se despedazaran, pero lasaguas cercanas y continentales reduciran al mnimo el costo de vidas. Noencontrara un mejor lugar para cumplir su misin.

l proyect la red de su mente para recoger los vientos y descubri porqu la carta de Dee haba sido ambigua acerca del tiempo. A lo largo de las IslasBritnicas y Narrow Seas el aire era suave, lo que le daba muy poco con que

trabajar.Pero siempre haba clima, incluso cuando el clima era templado. l

redujo su visin para identificar modelos de viento bastante fuertes para formarsu objetivo. Sobre Holanda encontr rfagas de viento. Las reuni y aadi unaserie de vientos suaves de Escocia y el norte de Inglaterra. Luego captur unaenrgica brisa marina de la costa de Cornualles. Al borde de su conciencia sintiuna tormenta ms sobre Baviera, pero estaba demasiado lejos para convocarla.

Cada uno de los elementos tena su propia esencia, cualidades que lohicieron pensar en arco iris y notas musicales, aunque en su mente no hubiera,ni sonido, ni color. Meticulosamente, teji los vientos unindolos en un soloacorde poderoso. Luego, los form en un viento del noroeste que golpeinexorablemente contra los buques de la Armada.

Cuando condujo las naves hacia el Este, sinti a los marinerosfrenticamente tratando de luchar contra el viento, mientras que los sacerdotesse arrodillaron para invocar la ayuda de Dios para evitar los bancos de arena. Elagua por debajo de los cascos cambiaba de color, y las olas se agitaron haciendoel ocano menos y menos profundo.

Dbilmente reconoci el dolor palpitando en sus sienes y el temblor ensus extremidades. Los primeros buques estaban a minutos del golpe, peropodra mantener su control sobre los vientos cada vez ms rebeldes que habareunido? Se extendi a Isabel de nuevo. De forma exasperante, poda canalizar

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slo una pequea parte de su poder. Pero sin duda era lo suficientemente fuertecomo para terminar el trabajo que haba comenzado.

La rfaga de Cornualles, el elemento ms fuerte y ms rebelde de sucoalicin, se rasg perdiendo su forma, debilitando el conjunto. Salvajemente,

trabaj para hacerlo volver a su patrn. Casi tuvo xito.Despus, los vientos escoceses, notoriamente arriesgados, se separaron.

Su cuidadosamente construido viento del noroeste se desintegr como el cristalastillado. Desesperadamente, alcanz otra vez a Isabel, pero no pudo encontrarla clave para desbloquear las ms profundas reservas de su poder.Tentadoramente se mantuvo ms all de su alcance.

Jadeando, intent de nuevo ejercer su dominio sobre los vientos que seresistan en contra de su alcance. A medida que se extenda para mantenerlos enlnea, diluy su poder al punto de romperse. Slo unos instantes ms, slo unos

pocos...Sonando como un trueno en silencio, el hechizo se rompi con una

violencia que puls a travs de su crneo. l lanz un grito de agona y cay derodillas.

Lo ltimo que vio antes de caer en la oscuridad fue a los barcosespaoles girando bruscamente hacia al puerto cuando buscaban la seguridadde las aguas ms profundas.

El colapso de Macrae acuchill la mente de Isabel tan brutalmente comouna espada laceraba la carne. Despus de un instante de parlisis, se extendimentalmente para estabilizar su espritu convulsionado incluso mientras corraen el crculo hacia su cuerpo tumbado.

Cay de rodillas a su lado. Su rostro estaba blanco como un cadver, yno respiraba. Movida por puro instinto, inhal profundamente y se inclin paracompartir su aliento con l. Colocando la boca en la suya, forz aire en suspulmones. l era un maestro del viento y el aire, seguramente todo lo quenecesitaba era ms aliento.

Una, dos, tres veces... ya se estaba mareando por el esfuerzo cuando ltosi y se retorci bajo sus manos. Finalmente, l tom grandes bocanadas de

aire por su cuenta, gracias a Dios.

Dee se uni a ella, jadeando.

Sent que el hechizo sali mal. Cmo est?

Respira ahora. Ms all de eso... Ella se encogi de hombros conimpotencia.

Dee frunci el ceo cuando puso su mano sobre la frente de Macrae.

l arde de fiebre. Ruego a Dios que no se haya destruido a s mismocon sus esfuerzos.

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Ponindose de pie con esfuerzo, el anciano seal a un par de sirvientesque lo haban seguido desde la casa. Cuidadosamente, ellos levantaron a Macraeen la maltrecha puerta de pino que haban trado, luchando con el peso muertodel escocs. En seguida se encaminaron hacia la casa.

Isabel comenz a seguirlos, pero Dee le hizo un gesto para que sequedara. Cuando estuvieron fuera del alcance del odo, pregunttranquilamente,

Qu pas, hija? Por qu no lo salvaste de semejante desastre?

Lo intent! Lo intent desesperadamente, y se haba chamuscadopor la reaccin cuando su poder y su concentracin fallaron. l tambin lointent, pero no hemos podido conectar completamente. Nuestras energas sondemasiado diferentes. Demasiado dispares.

Esa disparidad puede ser una fuente de fortaleza, no de conflicto.

Ella se frot sus sienes, demasiada drenada para entender.

Qu quiere decir?

Piensa en tus estudios astrolgicos... los signos opuestos son a la vezenemigos naturales y complementos naturales. Hombres y mujeres sonopuestos y, a veces, los conflictos entre ellos es la atraccin no admitida en smisma. Sin embargo, si los opuestos encuentran el equilibrio el uno en el otro,ellos pueden crear un todo mayor que la suma de sus poderes individuales.

Ella record a las lecciones de Dee, cuando haba vertido ros deinformacin en su mente ansiosa.

Ese es el matrimonio alqumico del que una vez habl?

El matrimonio alqumico es un principio filosfico, y puede ser vistoen muchos niveles. Uno de ellos es masculino y femenino. l la observespeculativamente, luego sacudi su cabeza. El punto es discutible. Macraepodra estar fuera de sus sentidos por das. O... peor. Sabes lo que ha sucedidocon la Armada?

Haba estado demasiada alterada para averiguarlo. Cansada, sac sucristal de videncia y evoc la escena.

Los barcos espaoles estn escapando de los bancos de arena deZeeland y se dirigen al norte. Los ingleses los persiguen, pero todava sonsuperados en nmero. Una vez que los espaoles se reagrupen, sern capaces dereanudar sus planes de invasin.

La cara de Dee se tens, aadiendo diez aos a su edad.

Debo ir a Londres e informar a la reina.

Quizs Macrae se recupere y vuelva a intentarlo, sugiri sin muchaesperanza.

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l tendr suerte de escapar con su vida y su cordura, dijo Dee sinrodeos. Incluso si sobrevive, el trabajo de hoy puede haber destruido su magiapara siempre.

Habiendo sentido el catastrfico colapso del poder de Macrae, ella supo

que Dee deca nada ms que la verdad.Me quedar aqu y cuidar de l. Mi ama de llaves tiene experiencia en

cuidar enfermos. Dios mediante, salvaremos al menos su vida.

Puede que no te d las gracias por ello si sobrevive privado de su msprofundo ser. Dee levant su mirada hacia el inquieto mar, donde los barcosespaoles navegaban al norte alrededor de Gran Bretaa. Una vez tuve ungran poder. No tanto como t, pero lo suficiente para hacerme un verdaderomago. En mi arrogancia y ansias de conocimiento, empuj mis habilidadesdemasiado lejos y casi muero por ello. Desde entonces, he tenido que

contentarme con pequeos encantos y sabidura.El deseo desnudo en su cara hizo a Isabel apartar la mirada con

inquietud. Cmo sera perder todo su poder? Aunque sus capacidades hacanque la vida de una mujer normal fuera imposible para ella, el ejercicio de lamagia era tambin el ms puro placer y satisfaccin que jams haba conocido.Ser privado de ella sera como perder sus extremidades. Macrae haba estadoencadenado al hierro durante ms de un ao. Ahora, despus de slo unos pocosdas restituido a su pleno ser, haba arriesgado su vida y su poder para evitar alos espaoles.

A pesar de que apenas lo haba notado en el momento, tuvo un rpidodestello de recuerdo de la forma en que sus labios se haban sentido bajo lossuyos cuando le haba infundido aire. Avergonzada, dijo,

Si se salva el cuerpo, tal vez el espritu tambin sane. Haremos lo quepodamos. El mundo necesitaba a Adam Macrae.

Y necesitaba saber que en algn sitio l vivira bajo el mismo sol queella.

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l se haba perdido durante tanto tiempo entre las cenizas de su menteque al principio no reconoci la conciencia de volver. Todo lo que registr fue lafresca oscuridad, una suave brisa nocturna con aroma a flores silvestres, unamano suave sobre su frente.

La mano de una mujer? Oblig a sus ojos a abrirse. Estaba en sudormitorio en Leighton Manor, el dosel encima apenas era visible en la tenueluz. Isabel de Cortes se alzaba sobre un taburete a su lado, sus ojos estrechoscon preocupacin.

As que... no mor, dijo con una voz spera.

No por falta de intentarlo. A pesar de sus mordaces palabras, ella ledio una sonrisa que suaviz la austera belleza de su rostro estrecho.

l cerr los ojos otra vez.

Cunto tiempo ha pasado desde que conjur los vientos?

Ocho das. Maese Dee ha regresado a Londres para consultar con lareina.

Ver su expresin le devolvi los ltimos desastrosos recuerdos queprecedieron a su cada. Exhal bruscamente.

Fall.

Tal vez no. Su mirada se desplaz a lo lejos. Sus esfuerzos handado ms tiempo para mejorar las defensas costeras. Sin duda eso ayudar sicuando los Espaoles nos invadan.

Absurdo. La costa de Gran Bretaa era demasiado larga para seradecuada a las defensas en todas partes, y ambos lo saban. Cuando su visin sedespej, se dio cuenta que ella pareca diferente esa noche. Derrotada. Erguida,pero preparndose para lo peor.

Dme su cristal de videncia.

Ella pareca dudosa. Adivinando que estaba pensando que estabademasiado dbil, repiti,

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Dmelo! Quiero saber.

Ella a regaadientes sac el disco de obsidiana y lo puso en su palmaderecha. l estaba tan dbil que apenas poda levantar el cristal losuficientemente alto como para ver la superficie, y no pudo sentir el resplandor

de su energa como lo haba hecho antes. Cuando la superficie permaneci enblanco, reconoci que el centro de su espritu estaba entumecido, desprovisto depoder.

Sudando, cerr los ojos y trat de dar forma a la ligera brisa que agitabade manera irregular las cortinas. Puls, y luego se perdi. Haba hecho eso, oslo fue el movimiento normal de inestabilidad de la brisa nocturna?

Lo intent de nuevo. Esta vez estuvo casi seguro que haba reforzadobrevemente el viento. Su poder slo estaba tenso, no muerto. Se neg a creer locontrario.

Abriendo los ojos, prob el cristal de videnciaotra vez. Qu podrantraer los Espaoles? Esta vez vio un parpadeo de la imagen del Castillo deEdimburgo... ardiendo. Que Dios ayudar a Escocia, pues los espaoles

vendran con antorcha y acero.

Lgubremente, trat de invocar una visin de Dunrath, pero el cristalno le mostrara ms. Temblando, dej caer su cabeza contra la almohada.

No voy a decir que no haga un esfuerzo excesivo, ya que sera undesperdicio de aliento, La Seora de Cortes dijo secamente. Pero podraconsiderar el hecho que ha estado enfermo con fiebre durante varios das. Esnormal que est dbil como un gatito recin nacido.

No tengo tiempo para la debilidad. Debemos actuar antes de que seademasiado tarde. Luch por ms aliento.

Cree que todava es posible cambiar el curso de los acontecimientos?

S. No es fcil, pero... posible Apartando las tapas, pas sus piernaspor el lado de la cama. Estaba vestido con un tosco camisn de noche, tomadoprestado de un criado tal vez. Se inclin hacia delante... para ponerse de pie y sele doblaron las rodillas.

Ella se adelant rpidamente y lo agarr alrededor de la cintura. Por uninstante se presionaron simultneamente mientras ella luchaba por evitar quesu cuerpo cayera al suelo. Sus senos eran suaves y femeninos contra su pecho. Eldeseo se abri paso a travs de l como un rayo de tormenta, y con l vino unasombra de renovada energa.

Antes de que pudiera recuperar el sentido, ella logr moverloapoyndolo en la orilla de la cama.

Es un maldito tonto, Macrae, dijo un poco jadeante. Contntese de

hablar con usted mismo esta noche.

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Ella expertamente le levant las piernas en la cama, y lo empuj denuevo contra las almohadas. Su breve energa se desvaneci de nuevo, pero nosu recuerdo de ella. ngeles del cielo, era tentadora. Un abrazo con ella hara

bailar a un santo de piedra.

Debemos aprender a trabajar juntos en todos niveles, Isabel. Debesser capaz de utilizar mis dones como mago del tiempo, y yo debo ser capaz deaprovechar plenamente tu fuerza. Era la primera vez que haba utilizado sunombre de pila cuando hablaba con ella.

Reconociendo la intimidad, dijo,

Eso significa que debo llamarte Adam?

Sonri un poco.

Me gusta la forma en que grues Macrae.

Soy talentosa gruendo. Cmo vamos a lograr esa cercana?

Si ella hubiese sido criada por un Guardin, sabra tales cosas.Buscando a tientas las palabras correctas, dijo,

Para compartir completamente la energa, debe haber confianzaabsoluta y un consentimiento de revelarse a s mismo con total honestidad,tanto los defectos como las virtudes. Antes, el tiempo fue breve y ninguno denosotros quiso dejar caer todas nuestras defensas, por lo que no ahondamos tanprofundamente. Si lo hubisemos hecho torci la boca quizs podra haber

mantenido el viento durante el tiempo suficiente para obligar a la flota espaolaa los bancos de arena en Zeeland. Estuve tan cerca...

El silencio fue largo y penoso antes de que ella dijera:

Nunca he hecho lo que ests describiendo. Es posible? Tenemos pocoen comn.

Ambos somos disciplinados y sabemos cmo ejercer el poder. lcaptur su mirada. Y ambos pagaremos cualquier precio, por detener a losespaoles. Eso debera ser suficiente.

Ella se mordi el labio.

La perspectiva de bajar completamente mis escudos... es preocupante,pero parece que no tenemos ms remedio que intentarlo.

Esto ser difcil para ti, ya que has tenido poco contacto con otrosmagos, admiti. Incluso entre los Guardianes, la completa franqueza es rara.Ms a menudo es vista entre marido y mujer, pero a veces entre magos que hantrabajado en estrecha colaboracin.

Maese Dee habla del matrimonio alqumico, el apareamiento de losopuestos para crear fuerza y armona, dijo. Es de eso de lo que hablas?

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Ella investig la cesta. Pan, queso y cerveza, todo preparado en su finca.Sacando su cuchillo, cort en rodajas el pan y el queso, luego sirvi cerveza enlas jarras de peltre.

Su expresin se tranquiliz cuando l acept la comida,

Eres una mujer prctica. Eso no es malo.

Alguien tiene que ser prctico y, por lo general ser una mujer, dijocidamente.

La diversin de Macrae reverber dentro de su mente, un efectosorprendentemente agradable. Mientras coman, experiment con cautela esainslita cercana. Ella no poda leer sus pensamientos, y estaba agradecida porello, pero poda sentir sus emociones cada vez con mayor precisin. A medidaque hablaban, su mente ensombreci sus palabras con ms riqueza.

Tambin poda disfrutar de su hambre voraz. Su placersorprendentemente sensual al disfrutar de la sencilla comida era tan intensoque la distrajo de su propia comida. Cuando l trag lo ltimo de su cerveza,dijo,

Sol, una brisa fresca, y alimentos sencillos del campo. Cuando estabaen la torre, nunca pens que saboreara tan simples placeres de nuevo. Lstimaque mi libertad fuera otorgada por una razn tan horrible.

Ella se contuvo de decir que l tambin podra disfrutar mientraspudiera, slo que l le dijo,

Ests pensando que podra disfrutar ese placer mientras pueda, yaque mi siguiente intento de trabajar con el tiempo podra enviarme a unamuerte temprana.

Ella enrojeci y mir a la distancia.

Puedes leer mis pensamientos?

Slo tus emociones, pero son lo suficientemente claras. l puso sujarra vaca en la cesta. Ahora es el momento para el trabajo. Ves esa nube

oscura en el centro a lo lejos?Ella sombre sus ojos contra el cielo brillante.

S.

Vamos a hacer que llueva. Puso su mano grande sobre la de ella.El pensamiento te intriga y alarma. Bastante. Lo disfrutars, creo.

Y ella lo hizo. Aunque sus poderes mentales no se haban recuperadototalmente de su colapso, su comprensin instintiva del viento y las nubes eragloriosa. Si l fuera un halcn, era ahora su compaera, bajando el picado por elaire, sintiendo la fresca humedad de la nube, y luego desintegrndose en unchaparrn rpido de gotas de agua.

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Ella se ri en voz alta cuando l llam de vuelta a la conciencia normal,deleitndose con las nuevas sensaciones.

Maravilloso! Lo sent mucho ms claramente que cuando trabajamosjuntos antes. Sintiendo su tristeza, dijo ms sobriamente, pero es un logro

muy pequeo en comparacin con lo que ser necesario.Aunque su rostro estaba controlado, ella sinti que estaba tratando de

protegerla de sus dudas.

Es mucho ms de lo que yo podra haber hecho solo, dijo. Estamosmezclando bien nuestras energas, hasta el momento.

Su placer por lo que haban logrado se perdi en el conocimiento decuanto ms lejos tenan que ir... y que slo tenan un da para prepararse.

* * * * *

Pasaron el resto del largo da explorando cada vez ms profundosniveles de intimidad y de compartir. El poder de la mente y el espritu de Isabelsorprendieron a Macrae. Su compromiso tambin era profundo, pero mientrasms profundo ahondaba, ella ms se haba resistido.

El ltimo ejercicio del da lo llev por un instante a un rea de susemociones que an no haban explorado. La pasin cruda explot como elpropio fuego del diablo, provocando sus propias pasiones... y luego ella lo arrojde su mente con su paralizante poder.

Jadeando, se dobl y enterr su cabeza palpitante en sus manos.

Tienes una patada que hara sentirse orgulloso a un semental, Isabel.

Poda sentir su angustia cuando ella puso sus palmas sobre su frente.

Lo siento, yo... yo no pude controlar mi reaccin.

l cerr los ojos, dando la bienvenida a su suave toque.

Estoy tratando de ensearte en un da lo que un Guardin aprende a

lo largo de los aos. Ests progresando muy bien.

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Pero no lo suficientemente bien.

l no estaba seguro de si sus palabras suaves fueron pensadas o dichasen voz alta.

Tal vez maana encontraremos una buena tormenta de verano paratrabajar. Trat de proyectar confianza. Eso har la mayor parte del trabajopor nosotros.

Ella no lo crey ms de lo que l lo hizo, pero no discuti el punto. Losdos estaban unidos en el pesimismo.

No tenan ms remedio que intentar otro gran hechizo por la maana,esta vez a una distancia mucho mayor que Zeeland y con ninguna tormentamayor disponible para aadir.

Isabel conoca los peligros..., despus de todo, lo haba cuidado de lacasi mortal fiebre cerebral cuando su primer intento fracas. Haba aceptado elhecho de que podan morir en el intento. De hecho, ella lo acept mejor que l.

Cuando cay en su cama, agotado, l pronunci una oracin silenciosa.Que Dios les concediera xito por el bien de Escocia... y si una vida debaperderse en el proceso, que fuera la suya.

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Macrae se sacudi en su estado de vigilia, su corazn latiendo cuandorecogi una nota distante del cambio de clima. Nubes, lluvia y viento se mecanen el Atlntico.

Cunto tiempo haba dormido? Slo unas pocas horas, adivin, ya queno haba seal de madrugada. Encendi una vela y se puso su ropa, entoncesavanz por la casa silenciosa al cuarto de Isabel. Cuando l abri la puerta, dijo,

Isabel, el mal tiempo se est acercando rpidamente desde el oeste.No es una gran tormenta, pero lo suficiente como para darnos una mejoroportunidad si comenzamos a trabajar de inmediato.

l ech hacia atrs las cortinas de la cama. Su vela le revel a Isabelparpadeando adormilada mientras se mova a una posicin sentada. Su cabellooscuro cay sobre su hombro en una gruesa trenza, y ella pareci ms joven y

ms vulnerable que durante el da.

l se congel cuando se dio cuenta que estaba vestida solo con sucamisn de noche, y el ligero tejido hizo poco para disimular su cuerposuavemente curvado. Con las rodillas dbiles, retrocedi, poniendo el gruesopilar de la cama tallado entre ellos. Maldijo el xito de los esfuerzos para reducirlas barreras entre ellos, por el momento era imposible ocultar su deseo. Isabel lo

vera justo como una gran bestia cachonda.

Ella se puso escarlata cuando ley su reaccin. Las emocionesreverberaron entre ellos como imgenes en espejos opuestos, y el vello

hormigue en sus brazos ante la gran tensin ertica en la habitacin.

Recuperndose primero, ella se llev las mantas a sus hombros.

Muy bien, vamos a empezar. Me reunir contigo en el crculo depiedra.

Agradecido por la excusa para retirarse, encendi una de sus velas conla suya, luego sali disparado. Era un tonto por permitir que la atraccinenredara las cosas, cuando toda su atencin deba fijarse en su objetivo comn.

Era tristemente consciente de que, aun con el cambio de clima, lasprobabilidades no les favorecan. Aunque se estaba recuperando bien de su

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anterior colapso, todava estaba muy por debajo de su fuerza normal. Isabel, apesar de su enorme poder, no tena un talento innato para trabajar con eltiempo. Si no pudiera tejer los hechizos lo suficientemente bien, fallaran.

Peor an, a pesar de que haban bajado las barreras entre ellos lo

bastante como para abochornarse, lamentablemente an estaban lejos de serplenamente capaces de compartir la energa. Si necesitara ms de lo que Isabelestaba dispuesta a dar, ella podra arremeter contra l por instinto, conresultados desastrosos.

Sin embargo, deban tratar. La Armada estaba peligrosamente cerca deEdimburgo, y si no actuaban de inmediato, sera demasiado tarde.

Con su mente todava acosndole, se detuvo en la cocina para unarpida comida de pan y queso, y luego se encamin hacia el crculo de piedra.Era apropiada para una noche de brujas, las lneas de ley que cruzaban el crculo

resplandecan como una telaraa de poder. El viento se elevaba en rfagasirregulares, formando y rasgando nubes de modo que el equilibrio en el senderoera incierto. El mar ms all del acantilado era ms claro que la tierra, y podaor el fuerte golpe de las olas contra la orilla.

Sinti un curioso fatalismo cuando limpi su mente y comenz a sentarlas bases de su hechizo. Hara todo lo posible; ningn hombre podra hacer ms.Si no sobreviva a este ltimo gran trabajo, que Dios defendiera a Escocia y a losque amaba.

Silenciosa como el viento, Isabel se uni a l, casi invisible en una capaoscura. Ella le dio una capa similar.

Usa esto. La noche es fra, y el buen tiempo no volver pronto.

Acept la capa, pero dijo ligeramente,

Un mago debe ser capaz de superar el calor y el fro.

Por qu malgastar energa si suprimiendo la incomodidad puedesutilizarla en tu trabajo meteorolgico?

l sonri en la oscuridad. Una hechicera prctica. Los contornos de su

rostro eran apenas perceptibles. Haba pensado en su rostro austeramentehermoso desde su primera reunin, y el profundo conocimiento que habaadquirido durante su trabajo juntos haba multiplicado su belleza mil veces.

Ests listo?

Tan listo como puedo estarlo.

Sabiendo que quizs no sobreviviera al trabajo de esa noche, le hizo unaceremoniosa reverencia, la capa ondeando a su alrededor.

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Ha sido un placer trabajar contigo, Isabel de Cortes. Luego enterrsus reflexiones personales, se concentr en la energa de la tierra del crculo, yse extendi hacia los vientos.

Cuando su conciencia se movi en espiral hacia arriba, vio que el

Atlntico del Norte estaba cubierto con un rea enorme de nubes picadas ylluvia ventosa. Los buques espaoles estaban a lo largo de los Narrow Seas, ellder acercndose ya a Firth of Forth, la puerta de entrada a Edimburgo.

Comenz por incorporar los vientos cruzando Escocia, hacindole difcila la Armada navegar hasta el estuario. Pero era slo una medida temporal pararetrasarlos mientras construa una tempestad.

Pieza por pieza meticulosamente, comenz a tejer vientos feroces,ahogando la lluvia, y el relmpago que podra rasgar el cielo y arder las jarcias.Deba ser tan poderoso, tan bien forjado, que seguira adelante incluso despus

de que su propia fuerza fallara. La tormenta deba rabiar durante das,hundiendo los buques, conduciendo a otros a las orillas rocosas y a las garras dela muerte de las corrientes del Mar del Norte. La Armada deba ser destruidahasta el punto en que no ofreciera ninguna amenaza... y que el cielo se apiadarade las almas de los marineros.

Ya recurra en gran medida a la profunda reserva de poder de Isabel. Subrillante conocimiento lo sigui mientras hilaba los vientos en un patrn que sealimentaba de s mismo. Ella lo ayud a concentrar la lluvia de muchas miles demillas cuadradas en una tormenta ms pequea y ms mortal. Y ella se elevcon l cuando l forj el relmpago.

Un oscuro, hosco amanecer rompa, el sol slo un tenue resplandor enel horizonte. El hechizo general estaba completo, pero la estructura era frgil. lnecesitaba una enorme inyeccin de energa para establecer un patrn de modoque la tormenta pudiera convertirse en una fuerza en su propio derecho.

Una rfaga de lluvia lo hizo caer de rodillas. Jadeando, se extendi a sucompaera, pero por primera vez no pudo aprovechar su fuerza. A pesar de queella an tena reservas, estaban ms all de su alcance.

Isabel... Trat de llamarla, pero su voz fue un dbil susurro perdidoen el viento creciente. l estaba a gatas, la mayor parte de su fuerza y concienciadedicada a estabilizar la tempestad con nada para sostenerlo.

Sus brazos rodearon sus hombros. A pesar de que su toque agit unapizca de energa, no bastaba como para sellar el hechizo. l intent con msfuerza conectar con el fondo brillante de su poder. Ella estaba luchando porigual, sinti su esfuerzo frentico, pero podra haber habido una pared de vidrioentre ellos. Impenetrable. Imposible...

Macrae. Su voz ronca le susurr en el odo. El matrimonioalqumico es el apareamiento de los opuestos para formar un todo mayor. Es lanica solucin que nos queda.

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Conmocionado, se dio cuenta de que ella quera decir un apareamientofsico. Su mente aturdida intent evaluar si su propuesta tena algunaposibilidad de funcionar. Haba habido una fuerte atraccin desde el principio.En otro tiempo y lugar la habra cortejado, o quizs arrastrado a su caballo yllevado a las Tierras Altas, pero l haba enterrado tales pensamientos como

inadecuados debido a la labor que estaban llevando a cabo juntos.Ella podra tener razn en que la pasin poda forjar sus espritus en

una sola hoja invencible, pero la fra voz de su conciencia seal que queradesesperadamente creer que la entrega a la lujuria era la clave de la victoria.Era un Guardin, un hombre de honor, o un canalla que menta para obtener loque deseaba?

Sus labios tocaron los suyos con un beso vacilante. Su aroma a rosaslavado con la lluvia.

Su cuerpo entumecido empez a hormiguear a la vida. Sintiendo elcambio, el beso de Isabel se hizo feroz, rodeado con una demanda de energa.

Una pasin primitiva explot a travs de l, con lo que cada fibra de sucuerpo llame a la vida. Malditas fueran sus dudas... l quera y necesitaba aIsabel ms que la razn, ms que la conciencia, ms que el honor.

Cuando l le devolvi el bes, los escudos que l haba erigido desde lacuna se disolvieron, permitiendo su acceso a las profundidades de su alma. Sufrrea determinacin para conquistar entr en su propia alma, hacindolos laespada invencible que haba imaginado. La suave lluvia se intensific en unaguacero, fluido y frtil, mientras se apareaba con la tierra.

Isabel, mi hechicera... l rod por encima de ella, presionando sucuerpo largo en la hierba mojada mientras la besaba hambriento, mezclando suesencia con la suya.

Su copula rompi el cielo cuando las ltimas barreras se derrumbaron.El poder era abundante, ilimitado, fluyendo por ellos y en la tempestad,estabilizando la intrincada estructura del hechizo. El relmpago centell hastaque l no estuvo seguro si ellos estaban en Kent o en lo alto sobre el Mar delNorte en el centro de la tormenta.

Cuando sus espritus se unieron, l descubri en el centro de su poderque era una solitaria nia, una extraa entre los que amaba, con la conviccinde que era demasiado extraa, demasiado poco atractiva, para encontrar lacercana que ella anhelaba. Incluso John Dee, el mayor alquimista de la poca,haba encontrado a su alumna desconcertante.

Tiernamente, Macrae le mostr su visin de su nica y fascinantebelleza. Cmo era un modelo entre las mujeres, una maestra de los magos. Acambio, lo reflej a s mismo. Era realmente tan oscuramente intimidante? Sinembargo, ella se senta atrada por su fuerza, intrigada por sus contradicciones,por lo que se enorgulleci de su oscuridad.

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Fue distantemente consciente del hundimiento de los buques espaoles,velas triturndose y mstiles rompindose. Sin las anclas que haban arrojadocerca de los Pases Bajos para escapar del fuego de los buques ingleses, estabanimpotentes ante la tempestad.

Con un ltimo paroxismo de poder, el huracn se materializ en unaentidad viva, ya no dependiente de su creador. Haban tenido xito. Contratodos los pronsticos, haban ganado.

Drenado de cada pizca de fuerza y pasin, l cay una vez ms en laoscuridad.

* * * * *

Plida de agotamiento y entumecida, Isabel acun a su amante en supecho mientras la lluvia tabaleaba sus cuerpos jadeantes. Ella no saba que el

universo contena tal placer, o dolor, como lo haba descubierto con Macrae.

Parte de ella habra estado contenta de yacer all y ahogarse, pero ahoraque la pasin se haba consumido era consciente que la tierra empapada y el

viento fro, eran terriblemente incmodos. Se las arregl para salir de debajo desu peso muerto.

Muerto? Alarmada, puso sus dedos en su garganta. Su pulso era firme.Con esfuerzo invoc sentidos ms sutiles para examinar ms hondamente ydecidi que no estaba profundamente herido como lo haba estado en suanterior intento con la Armada. Slo... agotado. El dormira por lo menos un

da, quizs ms.

Tir su capa sobre l, protegiendo su cara de la lluvia, luego camin atropezones por el largo sendero hasta la casa. Afortunadamente, el torrentedisfrazaba su desalio. En su casa estaban acostumbrados a sus extraasactividades; no sospecharan de algo tan plebeyo como unirse con un apuestoextrao.

Un extrao? Su boca se curv. Ella conoca a Sir Adam Macrae hastalas profundidades de su tormentosa, impaciente, y generosa alma.

Cuando sus dedos entumecidos manosearon la puerta de la cocina, stase abri de golpe, y la sra. Heath la atrajo al calor de la cocina.

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Gracias al Seor que usted est bien, milady! exclam el ama dellaves. Estaba preocupada.

Aterrorizada, lo ms probable, pero todos los empleados de Isabelsaban que no tenan que molestarla cuando estaba trabajando.

Todo est bien, sra. Heath, pero enve a los hombres al crculo depiedra para traer a Sir Adam a la casa. l... l no se ha recuperado totalmentede su enfermedad y ha sido vencido por... sus esfuerzos.

La capa empapada fue barrida de sus hombros y una taza de caldo decarne caliente presion sus manos.

Tome esto, milady, dijo la sra. Heath enrgicamente. En elmomento que haya terminado, un bao caliente la estar esperando. Luego laayudar a acostarse. Voy a ver a su salvaje escocs.

Agradeciendo ser cuidada como una nia, Isabel bebi su caldo y, acontinuacin, se permiti ser conducida a su habitacin. Macrae estaba siendotransportado cuando ella dej la cocina, chorreando agua l y los criados que lohaban recogido. Cuando ella ech un vistazo atrs, la sra. Heath firmemente latir hacia adelante.

El bao caliente estaba enriquecido con lavanda, la hierba que curara ycalmara su espritu rado. Isabel cerr los ojos y se oblig a s misma atranquilizarse. Lo importante era que haban tenido xito. Ellos haban forjadoun matrimonio alqumico que gener el poder que necesitaron, e Inglaterranunca volvera a verse amenazada por Espaa. Incluso sin su cristal de videncia,lo saba con una certeza absoluta. Pronunci una oracin por las almas de losmarineros espaoles.

Cansada, descans su cabeza contra el borde de la tina de madera. Ellahaba jurado que iba a pagar cualquier precio, y su virginidad era un costo lo

bastante pequeo. Mucho ms difcil fue perder la mitad de su alma... habrasido ms fcil renunciar a su vida. Pero esa prdida no era algo que poda odeba ser deshecha.

Ella haba hallado un placer casi mayor en el acto de su unin. Ahoradeba enfrentar la angustia de saber que tenan que separarse. Profundamente

en la mente de Macrae ella haba visto su disgusto ante la perspectiva de serencadenado por el matrimonio. Pero los Guardianes estaban sujetos a una granpresin para casarse, de preferencia con otros Guardianes para que la sangre yel poder permanecieran siendo fuertes. l haba aceptado el matrimonio comosu destino.

Antes de que su falta de moderacin lo hubiera llevado a la Torre deLondres, haba estado dispuesto a proponrselo a una dulce doncella Guardinllamada Anne, una rubia de naturaleza tan afable como hermosa. Lo mejor detodo a los ojos de Macrae es que Anne es escocesa, cuando la mayora de lashijas de Guardianes eran inglesas. l no podra haber tolerado una esposa

inglesa... su disgusto ante la perspectiva haba estado dolorosamente claro.

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Isabel sali de la tina y comenz a secarse. Su cuerpo estaba tibio ahora,aunque su alma estaba helada. Sbitamente aor a su madre, que nunca habaentendido realmente a su extraa hija, pero que la amaba de todas formas.

Cuando se puso su camisn de noche y se arrastr en su cama, Isabel se

oblig a aceptar que Macrae estaba destinado a otra mujer. Incluso si no loestuviera, su gusto no se decantaba por brujas de pelo negro, especialmenteinglesas. Que as fuera.

Haban ganado una gran victoria hoy. Era suficiente.

Deba ser suficiente.

* * * * *

El sol brillaba cuando Macrae despert. Fuera de los cristales en forma

de diamante, dos alondras se posaron en una rama y gorjearon la una a la otra.Escuch en una paz perezosa, apenas capaz de creer que haban triunfado, ysobrevivido. De la supervivencia de Isabel no tena duda, por el resto de su vida,sera consciente de cada aliento que ella exhalara. Fue subiendo con cautela enla cama cuando entr el ama de llaves. Ansiosos por ver a Isabel, dijo,

Dgale a la sra. Cortes que deseo hablarle.

El ama de llaves arque las cejas.

Tendr que esperar, entonces. Mi seora parti a Londres el da de

ayer.l la mir, sin poder creer que ella se hubiera ido.

Por qu diablos hizo eso?

La sra. Heath se encogi de hombros.

No me corresponde a m decirlo.

Ella, sin duda, ira a la casa de su padre.

En dnde vive la familia de Cortes?

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Haciendo caso omiso de la pregunta, la sra. Heath se gir para salir.

Uno de los hombres le traer agua caliente y comida. La puerta secerr fuertemente detrs de ella.

Isabel lo haba dejado. La maldita inglesa lo haba dejado! Cmo seatreva?

Jurando, abri el armario y extrajo las prendas limpias y dobladas. Estopodra haberse resuelto con facilidad, pero nada acerca de Isabel de Cortes erafcil. Ella iba a pagar por ese insulto.

Si, ella iba a pagar.

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Tan pronto como su madre abandon la habitacin, Isabel derram loltimo de la tisana en la jardinera que colgaba de su umbral. Aunque sus floresse haban destrozado por la gran tormenta, ya se estaban recuperando. Quizslas infusiones de hierbas fueran buenas para ellas.

En los brazos de su madre haba encontrado la calidez y el alivio queanhelaba, pero la agitacin de su madre simplemente la estaba conduciendo a lalocura, al igual que las incesantes preguntas acerca de lo que haba sucedido. Tal

vez algn da Isabel sera capaz de hablar de ello. Pero probablemente no.

Maese Dee la haba visitado y le haba dado un magnfico anillo de rubde mano de la propia reina en agradecimiento por lo que ella y Macrae habanlogrado. Pero la visita fue breve, ya que el mago real, estaba ansioso por regresarcon su familia en Bohemia.

Isabel pase a la ventana, preguntndose qu ms podra contener suvida. Sus habituales estudios no tenan ningn inters para ella, e incluso sucristal de videncia estuvo nublado cuando trat de ver su futuro. Ella habaformado parte de un gran trabajo que cambi el curso de naciones, as quequizs era codicioso querer algo ms all que una larga y rida soltera. Aunquea diferencia de la reina, ella ya no era virgen...

Escuch golpes a la distancia, como si soldados golpearan la puertaprincipal. Entonces estall un escndalo abajo. Su sangre se congel en virtudde un ataque de horror por recuerdos ancestrales de la Inquisicin que venan allevarse a los miembros de la familia de Cortes a la tortura y la muerte.

Seguramente no aqu en Londres, no otra vez!

Con el corazn acelerado, sali disparada de su habitacin y a lasescaleras. Se detuvo de golpe cuando mir hacia abajo al hall de entrada.Magnficamente vestido y feroz como un lobo, Adam Macrae mantena a dos delos criados de su padre a raya con una espada.

Sus padres irrumpieron en la sala. Al ver la espada, su padre lanz unbrazo protector delante de su esposa mientras gritaba,

Qu significa esto, diablo insolente?

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Usted debera estar agradecido, Maese de Cortes, Macrae respondicon voz de trueno. He venido a sacar a su terca hija soltera de sus manos.

Su madre contuvo el aliento.

Usted no la tocar, grandsima bestia! Mi esposo es amigo del LordMayor de Londres, y usted ser colgado, encarcelado, y descuartizado si ustedasalta a una doncella virtuosa.

Una doncella virtuosa? Macrae se ri en voz alta. Esa no es laIsabel que conozco.

Su choque se disolvi por la furia, Isabel barri por las escaleras como sifuera una de las propias tempestades de Macrae.

Cmo te atreves a entrar a la fuerza y aterrorizar la casa de mi padre?Vete de vuelta a Escocia y csate con esa dulce rubia tuya.

Su mirada se alz bruscamente.

Isabel.

Con una sonrisa como el sol en pleno medioda, enfund su espada ysubi al galope los escalones de tres en tres. Encontrndola en el descansillo, laarras en un abrazo que magull sus labios. Truenos y relmpagos, unatormenta en la sangre. Su deseo de empujarlo por las escaleras se disolvi, y ellale devolvi el beso. El condenado hombre!

l murmur en su odo,

Pensaste que podas alejarte de un matrimonio alqumico, mihermosa bruja?

Pero... pero Anne, la mujer con la que ests prometido...

Probablemente sea la esposa de otro ahora. Sus dedos largos,inteligentes comenzaron a acariciar la parte ms estrecha de su espalda. Anano tena escasez de pretendientes, y ella me encontr pavoroso, que es por loque los contratos an no se haban firmado.

Un hombre se aclar su garganta fuertemente. Con la cara roja comouna remolacha, Isabel mir hacia abajo para encontrar que ella y Macrae eran elobjeto de miradas fascinadas de la mitad los miembros de la casa. Su padre dijoseveramente:

Conoces a ese pcaro?

S-Su nombre es Sir Adam Macrae, y l es un noble escocs, ellabalbuce.

Un escocs? Su padre buf. No es de extraar que se comportecomo un salvaje.

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Acostmbrese. Macrae levant su mano, revelando un anillo dezafiro, cuyo engaste haca juego con el de Isabel. Su propia reina Isabel haordenado que Isabel se case conmigo, a cambio de mis servicios a Inglaterra.

Visitaste a la Reina Isabel? Isabel abri los ojos de golpe.

Quera asegurarme de tener cierta ventaja por si eras tan tonta comopara tratar de rechazarme. l envolvi un brazo alrededor de su cintura y mirhacia abajo a los padres de Isabel. Soy lo suficientemente rico para alegrar elcorazn de cualquier padre, y lo suficientemente valiente como para encargarmede su bruja. En este caso, ella y yo compartimos algunos... talentos e interesesinusuales. Ahora, si nos disculpa, quiero hablar con mi prometida en privado.

Los ojos de su padre se estrecharon, mostrando al formidablecomerciante que haba prosperado en buenos y malos tiempos.

No me importa si usted es rico, o si el mismo Dios le ha dado permisopara casarse con mi hija. Ningn hombre tendr a Isabel a menos que ella estde acuerdo con la unin, y si intenta forzarla, usted se enfrentar a las espadasde m y de mis tres hijos.

La madre de Isabel coloc una mano sobre el brazo de su marido, unaleve sonrisa astuta juguete en sus labios.

Dudo que algo se est haciendo contra de la voluntad de Isabel. Dalesla oportunidad de resolver sus asuntos en privado, David.

El padre de Isabel comenz a protestar, luego call.

Muy bien, si Isabel est dispuesta a hablar con este pcaro.

Estoy dispuesta. Hay asuntos entre nosotros que deben ser resueltos.Aunque, ella no estaba segura de si aceptara a Macrae o partira su corazn.

Cuando l subi detrs de Isabel, ella mir hacia atrs y vio que suspadres estaban sonriendo. Sonriendo! Tan fcilmente como eso, ese brbaroescocs los haba persuadido.

l la condujo infaliblemente a su dormitorio.

Cmo supiste dnde encontrarme? pregunt mientras l cerraba lapuerta detrs de ellos.

Hubiera sido bastante difcil de ocultarte a un mago, pero esimposible ocultarte de tu compaero vinculado. Estamos vinculados, Isabel.

Acptalo.

La hizo girar alrededor de modo que su espalda diera hacia l y comenzhbilmente a desenlazar su vestido. Con una rapidez realmente mgica desatsu rgido cors de cuero, en seguida, ahuec sus pechos con sus grandes manos

calientes.Cuando ella jade distrada de placer, su ligereza disminuy.

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Te amo, Isabel, dijo suavemente. Acepta el hecho de que estamosunidos por la vida, y muy posiblemente tambin por la eternidad. Elmatrimonio es tan malo? Se nos ha concedido un raro don de pasin y cercana,mi amor.

Ella se solt y se volvi hacia l. No fue posible leer sus pensamientos...el calor blanco que los haba unido cuando ellos conjuraron la tempestad eraslo un pulso lejano, a pesar de que siempre estara all cuando lo convocaran.Pero ellos seguan en resonancia uno con el otro, y maravillada se dio cuenta deque ya no estaba sola.

En sus ojos, vio el reflejo de su propia alma y el salvaje destello de sudeseo. Incluso, para su sorpresa, el temor de que siguiera resistindose a l.

Ella siempre haba tenido fe en sus capacidades mgicas, pero porprimera vez, una agradable sensacin de poder femenino comenz a fluir a

travs de ella. Macrae, a pesar de su fanfarronera, era bien consciente de queun mago de su poder no poda ser llevado reacio al altar. Este gran escocstemerario se humillaba. La humildad no era uno de sus dones, que era la raznpor la que estaba hacindolo tan mal.

Segura de su poder como hechicera y mujer, pregunt,

As que me has exigido como una recompensa de mi reina, invadistemi casa, y aterrorizaste a nuestros criados porque quieres casarte conmigoaunque yo no sea, ni escocesa ni Guardin?

l sonri irnicamente.

Si. No importa que seas inglesa y no de sangre Guardin. T eresIsabel... la ms poderosa hechicera en Gran Bretaa y mi compaera vinculada,

y mi familia se alegrar cuando te lleve a casa. Debo aterrorizar a alguien mspara obtener tu consentimiento?

Mi querido, e insensato pcaro. Con una rpida cascada de alegra,pas sus brazos alrededor de su cuello. Ella no necesit su cristal de visin parasaber que compartiran pasin, batallas y un amor inquebrantable. Macrae erasuyo, tanto como ella era suya, unidos por la eternidad en un matrimonioalqumico. Todo lo que tenas que hacer erapreguntar!

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Nota del Autor

La derrota de la Armada Espaola es uno de los puntos culminantes dela historia que casi todo el mundo recuerda de las clases de historia de lasecundaria. Fue un hito que estableci el predominio de Inglaterra como unagran potencia naval, y tambin un significante del descenso de Espaa. Laexpulsin de los Judos de Espaa sin duda contribuy a ese descenso. Esirnico que la palabra marrano, que significaba cerdo y era muy ofensiva, seconvirtiera en Marranos, el trmino por el que son ahora conocidos losexiliados.

John Dee es una figura histrica, famosa como mago de la reina. Unerudito metafsico, alquimista, escritor y astrlogo, hizo una carta astral paraelegir el mejor momento de la coronacin de Isabel. Dado el xito de sureinado, fue, obviamente, bueno en su trabajo! Se deca que l puso un maleficiosobre la Armada Invencible, que es por eso que el tiempo era excepcionalmentemalo ese verano y los Ingleses triunfaron. Las luchas continuas en el CanalIngls slo provoc regulares daos... fue la tormenta, cuando la Armada tratde navegar al norte alrededor de Gran Bretaa, lo que destruy la mayor partede la flota espaola.

Dee tambin fue fundador de la Orden Rosacruz, una respuestaprotestante a los Jesuitas. Un devoto cristiano, fue a la vez alabado y

vilipendiado en su vida. Se dice que fue el modelo para el Prspero deShakespeare en La Tempestad. Su biblioteca de ms de cuatro mil volmenesfue la ms grande en Inglaterra.

Los Guardianes son mi propia invencin. Sus descendientes sepublicarn en algunos de mis futuros romances histricos, comenzando con A

Kiss of Fate (El beso del Destino), procedente de Ballantine Books en el veranodel 2004.

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Putney, Mary Jo - The Guardians 01 - The cal Marriage (Traducc)

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