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República de Papel 3

Date post: 16-Dec-2015
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Revista nicaragüense de cultura general
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19
te Mario Santiago Papasquiaro Año: I Número: III 30 de julio 2015
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  • te

    Mario Santiago Papasquiaro

    Ao: I Nmero: III 30 de julio 2015

  • 2D

    Directorio

    Direccin:Magdiel Midence

    Ilustracin de Portada: Alberto Palma Cerna

    Ilustraciomes Internas:Varios

    Colaboradores (En esta edicin):

    Pep BalcrcelMnica NavarroFabricio EstradaDiego F. Barros

    Contacto:[email protected]

    Managua, Nicaragua, C.A.

    Repblica de Papel es un espacio libre para el anlisis des-de una perspectiva joven, contribuyendo a la difusin de informacin cultural y social, sin ningn tipo de ideolo-ga definida, fomentando un cambio de actitud y crtica reflexiva ante los distintos escenarios de nuestra sociedad.

    Qu es Repblica de Papel?

    SumarioNo LimaAntisexo Pag. 3

    Mnica NavarroComenc a escribir cuando comenc a necesitar huir Pag. 4

    Vania Vargas Poesa Pag. 5

    Fabricio EstradaPlacebo Pag. 6

    Mario Santiago PapasquiaroResea y poemas Pag. 7

    Gustavo MaldonadoHumanos Hydro Pag. 9

    Refugio Pereidapoesa Pag. 10

    Recomendacin MusicalKlaus Y Kinski Pag. 11

    Susana ReyesPoesa Pag. 12

    Antonio CienfuegosDeclogo sobre poesa joven Pag. 13

    Pep Balcrcelpices Pag. 14

    Kenia Patricia Lpezpoesa Pag. 15

    http://razoneseditoriales.blogspot.comPag. 16

    Magdiel MidenceA un poeta que muri joven/ Sobre Helena Pag. 17

    Nestor UlloaPoesa Pag. 18

    Franz Torrezcontraportada

  • 3No Lima / El Salvador ANTISEXO II

    (Ahuachapn, EL Salvador; 1971). Escri-tor, poeta y pintor. Fue miembro fundador y director del grupo literario Tecpn, de la Universidad Dr. Jos Matas Delgado. Des-de 1994 participa en diversos encuentros poticos, dentro y fuera de su pas, entre ellos pueden citarse: Manifestarte, Barrile-te, Industrial (Guatemala), VIII Encuentro Internacional de Escritores Eunice Odio (San Jos, Costa Rica) , II Festival Inter-nacional de Poesa El Turno del Disidente (Tegucigalpa, 2012) , al VIII Festival In-ternacional de Poesa de Quetzaltenango (Guatemala, 2012) y C.A-6 (Managua, Ni-caragua, 2012).

    Dirigi El Taller de Poesa del Parque, grupo literario estrictamente urbano en su ciudad natal y en el cual se encuentran las voces de ruptura de la presente dcada. Fue miembro del equipo coordinador del suplemento cultural Altazor del diario El Mundo de El Salvador. En su haber tiene los libros Efecto Residual (Ediciones Mun-do Bizarro, Guatemala; 2004) y prximos a publicarse: Zumbido, Erosin y Ergena en 3D. Actualmente es miembro del con-sejo editorial de la revista Chinela Carajo.

    El amor suena a chelo resfriado

    el temporal tose sus huecas mariposas oscurassobre el pavimento

    suena a sexo afinando la rabia

    de la lluvia frgil entre los huesoso la calma olvidada en los hierros de una celda

    el encierro del corazn es un metrnomo en esta ciudad pesandosuavecon todos los latidos de los muertosal acabar la ceremonia de un orgasmocomo el estereoscopio de unas bragasrotas por el cristal de las vitrinas

    el amor es un chelo sin hiloatado a los dientesal paladar fruncido por el fro beso de la nieveesa lonja blancapisando lengua arriba el filo de la angustia

    el amor tiene forma de chelo irritado de tanto coger

    apenas se frota la maderala temperatura del mundo se vuelve obesoel humo de los cigarrillos deshila las preguntasvuelve la luz a los ciegos con las cortinas de nencomo astro apagado en el centro del ceniceroque ya no usas

    como ese latidoque dejaste guardadoen medio de ese poema que nunca terminas.

  • 4Ha llegado con las lluvias, camarada, aquel a quien, por lo que dicen, lleva cada uno en la espalda.Ha llegado con las lluvias, triste, y no se ha secado an.

    Yo he arrancado algunas veces desde entonces. He abordado unas cuantas orillas nuevas. Pero no he podido desentristecerlo. Me canso ahora. Mis fuerzas, mis ltimas fuerzas Su ropa mojada dnde est la ma para empezar? me da escalofros.

    Ya va siendo hora de volver a casa

    -Henri Michaux-

    Empec a escribir cuando empec a necesitar huir.

    Y entend que huira constantemente para volver, eventualmente, al punto de partida. La teora del eterno retorno, ese crculo dis-puesto a convertirse en la frontera de fuego, en la ltima prueba, en la ltima puerta.

    Mis escritos fueron y son concebidos por el fro y me entretengo de manera malsana arquitecturando mundos inexistentes, esbo-zando caricias fugaces que desean eternidad en el aliento tibio de la chica en cuyo cuerpo la vida brama; en el hombre que materia-liza su perfidia y la convierte en arte esculpiendo y deformando la inocencia.

    Empec a ficcionalizar la realidad cuando me pareci horrorosa.

    Desde entonces, todo esto es una divina enfermedad que nace de la cpula entre el papel en blanco y la pluma febril; de los dedos necesitados de proferir historias; de la imagen que corrompe las ideas y del intento de comunicar mi motivo de desasosiego, la escri-tura es, pues, gritar la necesidad de proximidad, la necesidad de cerrar los ojos y creer por un momento, que en la pluma de alguien an muriendo no vamos a morir; que an vivos sentimos que estamos muertos, que puedo resucitar y resucitarme en un verso, que toda palabra escrita es como un conjuro lanzado a la violencia de los vientos. Que nuestro interior es esa triste casa donde lloran las bestias cuando nos ocurre el accidente fatal de dejarnos ultrajar por un poema que nos haga crujir.

    Escribo para distraer a la certeza y a la fatalidad. Y as encontr el eje sobre el cual girara mi mundo: dedicarme a contar historias donde la desesperanza, el hedonismo, la muerte, el caos, son estticamente bellos e imaginables pues, al final, forman parte de nuestra realidad y prefiero imaginar que detrs de toda sonrisa, tambin existe el dolor. Exorcizando nuestra maldad elevndola a ficcin, podremos hacer de la nobleza una verdad.

    No escribo para intentar hacer un mundo mejor. Escribo para engaar temporalmente a la tristeza y a la fugacidad. Y en ello he encontrado mi paz. Me desapego absolutamente de la nocin de literatura comprometida socialmente. En todo caso, el compromiso es conmigo misma: un ejercicio de catarsis donde me permito prestidigitar la temporalidad y engaar al vaco: la literariedad y la angustia bastan para darme motivos que derivan en mi intento de devenir literario y filosfico.

    Y esto es as desde la niez. Vivir para imaginar la decadencia de los tiempos y la extincin del sol, para valorar la fragilidad y los fragmentos de esperanza que cada da los hombres dejan caer cuando se dejan vencer por el cansancio. Para encontrar el elemento estoico del amor y su brutalidad. Para permitirme ser y sentirme vulnerable cuando me pongo en el lugar del lector.

    S que no pude haber elegido mejor. Que fue la escritura la que me eligi a m. Solamente presto mis manos para entregarme y concebir ideas en la bsqueda de la lucidez potica. Y esa lucidez puede ser reconocer que somos seres de luz y de oscuridad. Por eso no creo en el absolutismo estatuario de la belleza ni de la bondad. Escribo por el placer esttico de crear y de reconocer que soy un ser receptivo al momento histrico que me contextualiza y esa es mi nocin de hacer el bien.

    Puedo decir que, de todos los peligros, desde siempre escog el ms feroz. Y escribir es, de todos los suicidios, el ms atroz. Por eso mismo, el ms blando y hmedo camino para sembrar elucubraciones que tarde o temprano, darn a luz el pensamiento crtico que nos haga discernir el bien del mal. Ya el lector decidir y crear su propia nocin de belleza y colaborar con la sociedad.

    Por su parte, mucho bien hace a los dems el escritor al domar a sus propios animales del instinto y al convertir en arte sus obsesio-nes. Al entregar oscuridad para que otros puedan eventualmente resplandecer.

    Empece a escribir cuando empece a necesitar huir Mnica Navarro/ Guatemala

  • 5Quetzaltenango, Guatemala, 1978. Poeta y na-rradora. Licenciada en Letras por la Universidad de San Carlos de Guatemala. Autora de los libros de poesa Cuentos infantiles (Catafixia editorial, 2010), Quiz ese da tampoco sea hoy (Editorial Cultura 2010), Los habitantes del aire (Edito-rial Cultura 2014), y Seas particulares y cicatri-ces (Catafixia editorial 2015). Tambin es parte de Microf: poesa guatemalteca contempornea (Catafixia editorial, 2012) y El futuro empez ayer, apuesta por las nuevas escrituras de Guatemala (Catafixia editorial, 2013). Su trabajo narrativo se incluye en las antologas Brevsimos dinosau-rios (CCE, Guatemala, 2009), y en Ni hermosa ni maldita, narrativa guatemalteca actual (Alfaguara 2012). Actualmente trabaja como correctora de estilo y como periodista cultural.

    Vania Vargas / Guatemalax

    Tengo un cancerbero en la puerta de la memoria

    Nunca ladra / solo grue / le brillan los ojos los labios le tiemblan de rabia

    Cualquier mnimo movimiento en su reino es amenazaataca / destruye / me mantiene a salvo

    Nada ni nadie sale / nada ni nadie entra

    Entre l y la oscuridad no hay nadacasi nunca

    porque hay situaciones giles / ligerasque el can piensa que puede arrancarse con una patasin violencia

    Entonces / inevitablemente / recuerdolos das que murieron como pjarosque no aprendieron a volaro la textura de su pelo entre mis dedos

    Y siento como / adentro / el cancerbero corre se choca contra las paredes de mi pecho y de mi espaldase desespera / alla sin remedio con sus tres cabezas hacia el cielocomo si recordara la luna

    Extrado de Seas Particulares y Cicatrices, Publicado por Editorial Catafixia

  • 6Placebo Fabricio Estrada/ HondurasLo escrib hace algn tiempo. Vale la pena devolverlo a luz. Creo.

    La poltica sistmica disea y organiza el hambre del pueblo. No hay ninguna probabilidad de que el pueblo se libre de la necesidad artificialmente construida desde las lites. Se controlan los medios de produccin y se produce escacez, sobretodo en la antesala de toda contienda electo-ral. De esta forma el pueblo est desamparado y sin circulante, condiciones necesarias para la poltica de limosna o de contingencia de los candidatos o candidatas.El sistema electoral tiene slo dos engranajes: la limosna y el decisivo da de elecciones. Con la limosna se regala y se compra, dos muestras definitivas con que la psicologa del necesitado sabe reconocer al poltico que s entiende el asunto. Con la compra, el pueblo negocia humillado su voto y siempre pierde. Pierde porque el circulante del da de elecciones es un plascebo y negocia para sentirse importante o reconocido.El elector no reconoce ni elije candidatos para que gobiernen bien, todo lo contrario, se elije para que el gobierno no exista, ya que el sistema de explotacin transnacional no necesita gobiernos pero si personal en forma de candidatos que repartan el plascebo, o en su defecto la limosna.Hay mucho que reflexionar sobre la idea de desarrollo que tiene para s un pueblo humillado y alienado, despojado y arrinconado. Por lo general, lo nico que desea un pueblo en estas con-diciones es que se le deje en paz y si se le lleva ayuda, que sea rpida como se le puede exigir a un cartero que toca a la puerta con correspondencia, con la salvedad que la carta nunca lleva remitente, ni mensaje, nada, slo una hoja en blanco que crea la sensacin de vaco pero a la vez de poder. Todo enigma es un sin fin de posibilidades, pero en s mismo no es nada.

    F.E.

    Tomado : fabricioestrada.blogspot.com

  • 7SAN JUAN DE LA CRUZ LE DA 1 AVENTN A NEAL CASSADY /EN LA FRONTERA ENTRE EL MITO & EL SUEO/

    La carretera se pandea rumbo al centro de su propio incendio centrfugo Tijuana se desvanece flotando bajo la mollera del ojo Esquirlas de cabaret & colchn empujan la estela de duendes que prea la ilusin de este instante En el radio: Jim Morrison traga esporas crecidas en la cicatriz del diluvio Este puente mental va al volante Estrellado el afuera & adentro Verde mota la selva El destino rodando Todo ser & hasta en zancos escupe ovnis bordados con alas de las ms locas lucirnagas Es de noche / & en carretera / & volando Los Doors con los dientes hacen realidad su voltaje El cuerpo del alma se baa en el viaje El centro se curva La curva es salvaje La carretera es Dios mismo Cada ganglio / cada trozo resbala: se esfuma El pie va braceando La mente desyerba la euforia del eco.

    Mario Santiago Papasquiaro

    Si he de vivir que sea sin timn & en el delirio

    Mario Santiago, ha visto el fuego de Dios en el vaco de los sueos, como pedazos de un espejo roto. Sufrir a Papasquiaro es conocer el infierno y subir al cielo en un sorbo de Mezcal.

    Cada vez que encuentro un poema suyo, me ahoga la ira contra el mundo. Papasquiaro es todas las revoluciones y contracciones en una sociedad muerta por la voracidad de la mquina a la que cada pueblo llama Estado.

    Quisiera en este mundo encontrar ms Marios Santiagos, Ginsbergs, Nervales, y morir con ellos a diario. Sufrir a Mario Santiago es lle-narse la existencia del pulque ms spero y enardeciente, es quererse convertir en uno mismo y no en los dems y obligarse a dar lo mejor, es cortarle la barra de direccin a cualquier Imperio, es soar que existen otros mundos.

    El mundo en sus versos est lleno de referencias histricas, tradicio-nales y literarias. Es vivir el desierto en medio de los coyotes y de un soplido aparecer en Irak. Molerse los pies de tanto caminar, es leer el reflejo de lo que dios esconde por puro egosmo.Fue ah, en sus poemas que conoc los highways sensoriales, Bailan-do como el Rey Lagarto, alucinando esquirlas de fuego desayunando nuestro cerebro, es que yo me senta parte de l y no parte de estos poetas que bailan al son de quin le sacuda la bestia en la cara, en sus versos encontr el verdadero punk; anarqua total, bajo un incendio de amor a la raz.

    Por esas y otras muchas razones, no me gustan los poetas de cpula ni los que huelen a camaradera de oficina; los que visten de corbata. Me gustan los que huelen a calle, los que dicen la verdad, los patti-cos, los que aman a todos y odian a todos y sufren como nadie sufre el sabor de la tristeza. Los que tienen ninguna dignidad vlida entre la sociedad. Esos son los poetas que valen la pena.

    Los que no murieron o morirn en nombre de ninguna bandera, sin dejar un vaco que valga la pena recordar.

    Magdiel Midence

  • 8Papasquiaro

    SCALE LA FLAMA AL DIABLOPara el Poncho Soriano

    1 Clochard mexicano llamado GautierChinche ambulanteLo ms lejos del ruido lechoso de esta vaga ciudadIncrustada en su cooComo mosca ladendose en la orilla de 1 sopeSu botella / dormida & sondose1 fro de la gran putaToda ilusin destrozadaPero l suea & lo hace deverasVuela entre grietasRecorre el olvidado olor de mgicos bosquesEs mexicano & su apodo: franchute revuelto en ajenjoCon la letra que arranca su nombrenos ensearon de chavos a gargarear borborigmosHoy / la luz Lucifer de los otrosse le escamase hundeglugluteante se resbala & se pelal se rasca rebotando en s mismoNo hay banca de parqueni ojos de hadaque le den albergue o sustentoEs 1 chingn de los buenosMuerto s / Pero en vida /En el trompo jugoso sangrante de esta vida risueaAs como no hay dientes sin bocaNi gatos chillones sin ratasNi musgo sin verdeNi sol que de pendejo no se caiga a lamer el aroma de cualquier torva azotea.

    SOY & NO

    Soy & no el ngel cado Que de puro estupor ahoga en sotol sus limpias lgrimas He olvidado hasta el aroma de la liana que me serva de telescopio & de columpio Slo en sueos me veo vagando en esa patria toda entraa Luz de bengala inapagable Manantial de impulsos que la mierda indigestin de estos toscos das me borra Vuelo 1 segundo & me despierta la migra garrienta del do-lor / restregndome en la jeta el desgarrn de mis fronteras / Resortea ardido mi mun Mi aura se espanta de no reflejarse en mis recuerdos La exaltacin termina por resbalarse a 1/2 esquina Allo invocando el chiflido de mi Dios / que se coagula Sin que pueda pellizcarle decibel chisporroteo alcaloide hoyo negro alguno Soy & no este temblor que vaca en s mismo su basura 1 interjeccin de lava arrojada de improviso Manchado de eternidad De lluvias / de escozor De brbaras fiebres que se tragan de 1 bocado a mi destino Soy & no la orina congelada de Can en plena huida El sobresalto que lo impulsara a castrarse sus clulas solares El terror que habra de marcarlo Como a res en brama que enloquece & no embiste a su manada.

    (de Aullido de cisne, 1996.)

    Mario Santiago Papasquiaro (1953-1998)

    Su verdadero nombre era Jos Alfredo Zendejas Pineda, pero lo cambi por Mario Santiago argumentando que Jos Alfredo slo haba uno (Jos Alfredo Jimnez, el compo-sitor de rancheras) y posteriormente agreg Papasquiaro en homenaje al lugar natal del escritor Jos Revueltas. En 1976, junto a Roberto Bolao y otros amigos, fund el in-frarrealismo, corriente literaria de vanguardia y de verda-dera ruptura con el establishment literario mexicano. Si he de vivir que sea sin timn & en el delirio, sola escribir Mario Santiago Papasquiaro cuando le soli-citaban sus seas particulares. Fundador del Infrarrealis-mo, aventurero inagotable, poeta tan desmesurado como el Distrito Federal de Mxico que cartografi en sus versos, Santiago tambin inspir al personaje Ulises Lima en la c-lebre novela Los detectives salvajes, de Roberto Bolao, lo que fortaleci la leyenda de este poeta nmade, vital e irre-ductible para una cultura oficial mexicana que lo conden al silencio y ostracismo.

    Fuente: www.diarioperfil.com.ar

  • 9Humanos HydroGustavo Maldonado

    Compulsiones/ desenfrenos I

    Humanos/ constituidos como cuerpos por torrentes, por dimensiones, ritmos y cadencias hdricas Fenmenos electrolticos, molecularesFisiologas que deambulan movidas por impulsos inicos, es decir elctricos, en alguna parte, en alguna medidauna gota, una chispa, mnimos incendios de vida Como el corazn bombeando ese lquido denso, ese plasma; y ese bombear moviendo en el mundo el cuerpo que somos, lo que solo somos, y nuestra voz puede muchas veces ser la extensin del estallido de las olas de los mares que se estrellan en la pared del acantilado de nuestros recuerdos

    o el trueno que anticipa la llovizna o el sonido leve de esa llovizna cayendo sobre el plano hdrico de una laguna, que podra ser la laguna o el pozo o el acantilado donde se reproducen nuestros ecos, un reproductor acstico que aguarda en silencio que reboten sobre su cuerpo las ondas sonoras de todas esas voces contenidas en nuestro mundo interno

    Me pregunto si ha existido en la historia del mundo despus de los primeros balbuceos y la disemina-cin del lenguaje oral articulado, un solo momento de silencio total de esas voces que se empezaron a escuchar en los primeros momentos de la comunicacin verbal y que, no solo se han seguido re-produciendo en cantidad, sino que -y a esto vena mi pregunta- cabe la posibilidad de que no hayan, como conjunto de sonidos en el mundo, cesado de pronunciarse unas tras otras, unas sobre otras, un solo instante, por diminuto que fuera, por imperceptible, una millonsima de segundo sin una sola voz fluyendo como accin/onda sonora rebotando por las atmsferas, produciendo as un silencio total de las voces humanas que hemos blasfemado, blasfemamos y seguiremos blasfemando en este espacio sonoro/mundo?

    Como estar frente al ro que se mueve sin cesar, como regresar al de Herclito, a aquel de la lectura adolescente del Sidhartha, al de Hesse, o al mar de donde Tales afirmaba que proceda toda forma de vida, a cualquier ro, a cualquier mar, al cuerpo plano de esa laguna en donde al caer, las gotas de la llovizna van conformando las ondas sonoras que podran llegar alguna vez a convertirse en nuestras propias voces

  • 10

    Refugio PereidaMxico

    (Ozumbilla, Estado de Mxico). Estudi Periodismo y Comunicacin Colectiva en la UNAM, y el Diplomado en Creacin Literaria en la Escuela de Escritores de la SOGEM. En 1999 obtuvo el Premio Nacional Ama-do Nervo. Ha publicado Suerte de rabia (Secretara de Cultura del Edomez), Palabra sucia (La Tinta del Alcatraz, 1988); De noche, una calle (Praxis, 2002); y en el libro colectivo Antes de la danza (Praxis. 2012). Es parte del cuerpo editorial de Errancia. Revista de Psicoanlisis, Teora Crtica y Cultura. (FES Iztaca-la, UNAM) y Deriva. Revista de Poesa. Su trabajo literario ha sido publicado en diversas antologas y re-vistas.

    El Perdedor

    Necesita transcurriradentro.Sus paredes de pajadan para dejarse llevar con el viento.Es de madrugada y sale a pelear con los rboles.Abre un peridico atrasado,celebra el robo de un banco.Si de cambiar se trata, se va a la otra acera,en la calle slo caminan las nubes y la luz de la luna,se cambia la piel por un abrigo que encontr en un aparador.Hechos que nos pasan como el fracasono se resuelven ni a golpes.

  • 11

    RecomendacionMusical

    https://youtu.be/UX1fi_OcUW4

    Dream pop de calidad, acaramelado con la voz tenue de Marina... En la escena del indie espaol de no s que linea meldica, porque urge mencionar que carecen de una posicin rtmica definida; lo que los convierte en una banda sin lmites en cuanto a liber-tad musical, sin apartar la calidad literaria y un sonido extraordinario, que va desde el disco hasta el bolero, mejor no sigo redundando y disfrutenlo:

    klaus & Kinski

  • 12

    Susana ReyesEl Salvador

    Profesora y licenciada en Letras por la Universidad Centroamericana Jos Simen Caas UCA. Traba-ja como docente de lenguaje y literatura en diversas universidades y ha participado en programas de for-macin literaria para jvenes y maestros. Es gestora cultural para la formacin y promocin de temas re-lacionados con la literatura y la edicin.Preside la Fundacin Claribel Alegra. Imparte talleres de teatro y ha participado en montajes teatrales. Ha publicado: Los solitarios amamos las ciudades, Posta-les urbanas y vitrales e Historia de los espejos. Apare-ce en diversas antologas nacionales e internacionales, recientemente en la antologa La poesa del siglo XX en El Salvador (Visor, 2012) y Mujeres, reunin poti-ca (Secretara de Cultura del FMLN). Ha participado en investigaciones relacionadas con poesa de mujeres y el estado de la literatura en El Salvador.

    Obituario

    II

    Qu te llevasel sonido de los pasos en las avenidas solitariasel bullicio de los nios rompiendo la tarde sola los besos o los silencios en un cuarto a medianoche

    Qu te llevaslas fotografas abandonadas en los lbumeslas nuevas imgenes que se pierden en el espacio eterno inalcanzablelos das y las voces de quienes ya no volviste a ver

    Qu te llevasnada? todo? vale la pena llevarse algo?realmente te marchas para dejarlo todo?o realmente importa lo que uno deja?

    todo estar perdido alguna vez

    Death Note

    Entonces uno es un pjaro o una luzun surco en el cielo delante de la tormenta

    Bajamos como saetas para habitar el corazny una lista interminable llena las hojasen un cdigo con smbolos de sangre.

    Uno no elije, no es elegido El azar como un capricho de los diosesEl destino como la insistencia de los trenes en una estacin

    La muerte como aburrimientoLa muerte como fin de la justiciaLa muerte como equilibrioLa muerteLa sinfona del equilibrioLa vida siempre a cambio de la muerte.

  • 13

    DECLOGO SOBRE POESA JOVENAntonio Cienfuegos (Mxico)

    1.- No existe la poesa joven. Pienso que es un mero fetiche, hay, por el contrario, obras maduras o inmadu-ras.

    2.- La mayora suele pensar que mientras ms pronto alcance madurez la poesa de un joven ser mejor poeta a futuro. Craso error, muchos poetas, incluido Rimbaud, alcanzaron su clmax a temprana edad y no volvieron a escribir.

    3.- La poesa joven es contestataria y revolucionaria (social y estticamente hablando) a priori. Si bien es cier-to que a una edad las personas tienen mayor mpetu rebelde y sedicioso, esto no significa calidad en la obra, hay quienes se vuelven ms rebeldes con los aos. Por otro lado, la mayora de los poetas jvenes que lanz sus gritos tempestuosos revolucionarios casi siempre se arrepiente de esas obras tempranas y defectuosas, aunque hay algo de cierto en ese primer grito: se contiene la esencia de todo lo que escribirn en un futuro.

    4.- La poesa joven viene a cambiar el mundo. La inexperiencia de los poetas les provee de un halo de inocen-cia. sta es una luz que se va extinguiendo con los aos y la experiencia; aclaro, en algunos casos ese trnsito jams ocurre.

    5.- La poesa joven tiene un carcter de urgencia, de denuncia. Esta premisa me parece la ms acertada, ya que esa ingenuidad del poeta joven conlleva un espritu de mpetu que lo hace ver ciertas cosas que no estn bien en la sociedad, cosas que con el tiempo se acostumbra y suele tomar por propias.

    6.- El poeta joven debe publicar. En la mayora de los casos y pensando en amigos que publicaron jvenes. Los poetas no han alcanzado la madurez esttica, mucho menos ideolgica, y por lo general se terminan arrepintiendo de esas peras primas inmaduras y con bastantes deficiencias.

    7.- El poeta joven puede alcanzar alguna madurez esttica. S, pero ponindolo en palabras de Pound, ten-dran consistencia en su melopea (ritmo) y fanopea (imagen); sin embargo, en rarsimos casos alcanzan la logopea (sentido). Esto pone en la disyuntiva clsica a los escritores jvenes, de si vale o no lo que dicen, y sta ser una diatriba por siglos.

    8.- El joven puede ser poeta y puede ser lo que le d la gana. Sin embargo, no estoy de acuerdo con sacralizar los cnones clsicos y estereotipados de lo que debe ser un poeta, el clich gastado de quin y cmo luce un poeta, de quin y por qu es poeta; en este sentido un joven, un nio, un anciano, un invlido, un indgena o un analfabeta, cualquiera puede ser poeta, porque la poesa no es una cualidad privativa de los ciudadanos cosmopolitas y posmodernos de las grandes capitales del mundo, mucho menos de los abigarrados acadmi-cos, pero mucho, mucho menos de los desgarbados, los alcohlicos, de los bohemios que berrean sin sentido y, por supuesto, jams de los hipsters.

    9.- Me pregunto si realmente existe la poesa joven. O si no es una invencin para crear talleres y dar cursos, para formar; pero qu es esto de formar, dudo que un poeta se pueda formar, que sea como una arcilla que puedas moldear a tu antojo y hacerlo poeta, lo dudo y desconfo totalmente de todos los poetas que as nacieron, de la arcilla.

    10.- La poesa joven en Latinoamrica tiene la virtuosa caracterstica de ser legitimada por la generacin antecesora. Vamos, ni siquiera por los ancianos poetas, sino por los de entremedio, los de entregeneraciones; por qu hablamos de legitimidad, quiz porque realmente sean los poetas de entregeneraciones los que ms necesiten que haya poetas jvenes que sigan sus pasos, que sigan sus escuelas y que se adhieran a sus cotos de poder, que los alaben y lauden en las lecturas, que los sacralicen como los grandes poetas que, quiz, nunca llegarn a ser.

    Coda.- La poesa se ha convertido en una moda. Quiz por su facilidad de mmesis o en trminos sociolgi-cos su isomorfismo; por su desafortunada innocuidad de disciplina, por su facilidad de difusin, impresin y valorizacin; digo que es moda porque, hoy da, las publicaciones se han pauperizado tanto que cualquiera, incluso un nio, tiene ya un par de libros de poemas. Actualmente se ha confundido la promocin de la lec-tura con la promocin de la creacin, en ese sentido es el arte ms fatuo y banal, y por supuesto el ms vulgar.

    Texto ledo en el Conversatorio sobre Poesa joven en el Crculo de Periodistas de ChileSantiago de Chile, 10 de septiembre de 2014

  • 14

    Hace algunos das lleg un sobre manila a la oficina. En su interior haba un disco titulado pices, de Paolo Guinea. Tuve que esperar para salir del trabajo para poder escucharlo. Sucede que las computadoras de ahora no aceptan cosas tan old school como un cd.

    Foto: Cortesa Paolo GuineaPaolo Guinea, adems de msico, es poeta, as que cuando comenzaron a caer las teclas como las rfagas de luz que ves alrededor de esta ciudad, comprend que ambas formas de crear pueden ser uno solo. La primera melo-da, pices, comienza con ternura y lentamente te desgarra.

    Su msica es un poema. A veces triste y otras con tonos para resurgir al lado de una sonrisa tenue. As, las me-lodas bailan al comps del fro de diciembre. La ciudad se quiebra y en el cielo empiezan a verse las primeras estrellas.

    El pice es el extremo superior de un objeto. Pero tambin tiene otros usos dentro del lenguaje: se utiliza para designar algo pequeo (muy pequeo) o en expresiones negativas. Aqu, en esta produccin de Paolo, el pice puede ser los tres significados o ninguno. Es la punta del abismo y la pequea felicidad entre las sucias calles y los bocinazos infernales. Tambin es: no puedo ms.

    Luego se acumulan otros temas como La infancia y otras cosas. S, los recuerdos. Y llega la nostalgia, pero a la vez una pequea alegra. Contina la msica. El piano es un instrumento verdaderamente bello: es dulce y me-lanclico. Te hace mantener un sentimiento extrao durante todo el tiempo, pero que siempre te acompaa.

    En un punto las notas anuncian Pnico. Esta creacin posee, adems, un videoclip con el cual se intenta retratar todo lo que vemos y pasamos por alto. Mientras suena y caen las cenizas de un cigarro, all, en la calle un grupo hace cola en la parada de una camioneta. Uno de ellos re.

    Qu es la poesa y la msica, entonces, sino un cmulo de emociones y vivencias? A veces, para retratar todo lo que sucede necesitamos slo escuchar. Slo sentir. Debo aceptar lo instrumental siempre me ha fascinado. Tengo un gusto especial por bandas como Austin TV y, por otro lado, la msica clsica. Melodas que no necesitan una letra, porque te hablan con su ritmo. Y esto es lo que logra pices.

    Para concluir, es una produccin que vale la pena. Se adapta a diferentes momentos y estados de nimo. Es exce-lente msica para escuchar en el trfico, mientras uno se recuesta en su cama slo a observar el techo o en cual-quier momento. Es un material muy bien trabajado.

    Publicada originalmente en diariodigital.gt

    Apices/ Pep Balcrcel

  • 15

    El S

    alva

    dor

    KENIA PATRICIA LPEZ (1987)Egresada de la Licenciatura en Ciencias Jurdicas (UES). Ex miembro de Taller Literario Serpientem-plumada. Cultiva la poesa y la narrativa. Ha participado en El Simposio Internacional de Poesa Rubn Daro en diferentes ediciones (Len, Nicaragua), en el III Festival Centroamericano de Poesa (Bluefields, 2014) y en el Festival de Poesa en Comayagua, Honduras 2015. Actualmente coordinadora del Festival Internacional de Poesa Ama-da Libertad.Sus textos han sido publicados en las antologas poticas: Retornos (2008), en Una Madrugada del Siglo XXI, Ritual de Besos (2015), A la Izquierda del Corazn II (2015) y en Chamote (Argen-tina, 2015).

    LA SERPIENTE A ADN

    Si le abres o le besas las piernas

    no sabrs soportar la tentacinde ir arriba

    /abajohasta convertirte en su carne.

    Te hundirs en el lago ardiente de sus labioscomers la manzana

    /su verdadno podrs detenerte

    /querrs ms.Tarde

    /te enred en su selva desconocidasers un piojo viviendo de su sangre.

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    No publican a ciegas. Pero mientras que la edicin s, la edicin cultural, trata de englobar cada ttulo en un pro-grama innovador, que sea una revelacin mental, grande o pequea, la apertura de un nuevo mundo por minscu-lo que sea, la gran edicin de consumo, que tiene tambin obras muy meritorias e islotes de gran calidad, publica sin embargo cualquier cosa que tenga una posibilidad de venta. No aspira, pues, a poner en primer lugar lo nuevo, sino lo ya conocido, aunque est bien contado.

    La diferencia sustancial es que las tiradas en la experiencia de la Einaudi, se calibran sobre las exigencias del lector. En cambio las tiradas de la edicin no y no hablo slo y ne-cesariamente de los grandes grupos editoriales, cada uno de nosotros puede convertirse en editor no, no es nada definitivo, es una lnea sutil que separa las opciones que se toman- se calibran sobre las exigencias de los editores. No-sotros hemos tratado siempre de calibrar la produccin se-gn la idea que nos hacamos de las exigencias del lector, de un lector autntico y fiel que conocamos muy bien gracias a una relacin continua.

    (...)

    Cesari

    Has ido contraponiendo cada vez ms, en el libro, el abs-tracto proyecto a un ms concreto y operativo progra-ma o plan editorial. Cul es en sntesis el criterio que lo gua? Existe uno?

    Einaudi

    Magnelli, Alberto. Ouverture N 2, 1969.Un criterio vlido en general? Ms vale un enemigo fue-ra de casa que en casa. El plan editorial puede desembocar tambin en la avidez. En vez de publicar otro libro nuevo, reeditemos ms bien muchos libros preciosos agotados, tratndolos como novedades, o sea con una presentacin de hoy, que hable de la suerte del libro y dela utilidad de su lectura, hoy. As se mueve un editor cultural. Y al mismo tiempo, restringir el plan, o sea el programa de novedades, lo cual favorecer tambin el impacto sobre el pblico. Cla-ro que si aumentas el nmero de noes aumentas el nme-ro de enemigos. Pero a un enemigo ms vale tenerlo lejos de la puerta de casa, porque un mal autor en la casa siembra veneno, alimenta los celos y rebaja a los dems a su nivel.

    Si debo condensar en una imagen este meollo fundamental de la empresa editorial que es la formacin de un programa, termino pensando en algunos personajes importantsimos fundamentales en mi pericia editorial, que sin ser asesores, ni mucho menos redactores, siempre tuvieron un peso, por el mero hecho de estar publicados.

    Einaudi (www.einaudi.it) es una editorial estrechamente ligada a la cultura italiana de la segunda mitad del siglo XX. Fundada en 1933 por Giulio Einaudi (1912-1999), su apellido se confunde -ade-ms de con una familia vinculada al mundo de la poltica por ser hijo del presidente de la Repblica durante los aos cuarenta-, con los principales del mundo intelectual de la posguerra: Pavese, los Ginzburg, Vittorini, Calvino, Levi

    En 1991 en el contexto mismo de la ola de concentracin editorial de la que su propia editorial no estuvo ajena-Einaudi sostuvo un dilogo con el tambin editor Severino Cesari. De la edicin espao-la publicada en 2009 se presentan a continuacin algunos fragmentos relacionadas con su particular concepcin acerca de la edicin.

    http://razoneseditoriales.blogspot.com/

    Diego F. Barros

    Pie a la cita (XIII): Einaudi: edicin s; edicin no

    Cesari

    Si no hay un proyecto frreo, hay sin embargo un criterio general que resume, o que ha guiado, tu experiencia como editor?

    Einaudi

    Llamo a ese criterio edicin o no, y no quiero decir con ello, desde luego, que los de la Einaudi seamos la edicin y los otros no. Edicin o no, no porque la editorial Einau-di sea la mejor, sino para subrayar un compromiso cvico que una parte de la edicin ha asumido en la sociedad. La edicin s es la que, en vez de salir al encuentro del gusto del pblico, gusto que se asegura conocer y que a menudo se confunde con el propio, introduce en la cultu-ra las nuevas tendencias de la investigacin en todos los campos, literario, artstico, cientfico, histrico o social, y trabaja para que emerjan los intereses profundos, aunque vayan a contracorriente. En vez de suscitar el inters epi-drmico, de secundar las expresiones ms superficiales y efmeras del gusto, favorecer la formacin duradera. De un gusto, justamente; y tambin, si quieres, de un pblico y de un mercado. El no de edicin o no caracteriza en cambio a los editores que no comparten este enfoque, sino que tratan de satisfacer los deseos ms obvios del pblico. Y en eso basan su empresa.

    (...)

    Cesari

    Magnelli, Alberto. Composizione, 1962. Cul es el trabajo de un editor s? Qu es el trabajo editorial?

    Einaudi

    Lo digo a menudo: la edicin es conocimiento de los hombres. Y lo bonito, la clave de este trabajo, es que debe primarse la inteligencia, que a su vez se alimenta justa-mente de la relacin con los hombres, adems de con los textos. Pero no debe ser nunca una inteligencia como fin en s misma, improductiva, perezosa. No debes ahogarla, asfixiarla bajo la monotona de una exagerada rutina. El trabajo rutinario ha de hacerse, Cesare Pavese lo haca y estaba orgulloso de ello, a veces hasta el punto de aparen-tar, aunque slo aparentar, que aqul era su nico orgullo: pero era l quien controlaba, no era controlado.

    (...)

    Cesari

    Entonces, es un lugar comn del periodismo cultural que los grandes editores publican a ciegas, inundan el mercado con tiradas absurdas con el efecto de desalojar de l a los libros de calidad?

    Magnelli, Alberto. Elments, 1964.Einaudi

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    A Un Poeta que muri JovenPor Magdiel Midence

    Sobre Helena

    Hoy en un performance potico musical grupo de artistas me hizo recordar y comprender algunas co-sas del viejo Rigo Paredes. De sus 200 aos de edad y todas aquellas cosas que le gustaba conversar con los jvenes, no tengo ms que decir que hoy acab por entender las influencias, s las influencias de Don Poe-ta, como le decan las meseras de Paradiso, sobre mi poesa.

    Todava recuerdo que me deca que estudiara a los greco-romanos, insista en que leyera a Homero, Ho-racio, Virgilio luego Pavese, Kavafis, Baudelaire, Ner-val, Maupassant y Trakl entre otros. Hoy en Helena, la obra montada por Ariel Merlo Y compaa; Basada en la obra Partituras para Cello y Caramba del mis-msimo Rigo; pude sentir a mi amigo, al poeta que todas las tardes se sentaba a ensearme que la vida es un viaje y que siempre el retorno es ms agitado que la partida. Un verdadero intelectual debe saber pre-guntar deca.

    MIr viejito remarcaba y comenzaba a hablar de Pars, de Dal, de Pizarnik, de Miles Davis, de John Coltrane etc. Y todos le hacamos rueda al viejo de doscientos aos; al gran maestro. Todava recuerdo las veces que me defendi de las jauras de poetas viejos ensaados contra el novato y aquellas veces en las que me regaaba por no leer todo lo que l quera que le-yera, cuando se molestaba porque yo le deca que me encantaba Leopoldo Mara Panero (Conocido suyo).

    Hoy record a mi amigo, al gentil seor con el vaso de agua en la mano que amaba recitarle poemas a las mu-chachas, al que me puteaba cuando le deca que Oc-tavio Paz no es de mi poetas de cabecera, hoy record todas las lecturas que por l llegu a tener, hoy record aquel libro de Robert Lowell que me regal y que he ledo y reledo. Hoy revivi uno de los ms grandes poetas de estos tiempos.

    Gracias a Rigoberto por todo lo que nos ense y gracias al violinista Ariel Merlo por revivirlo. Rigoberto Paredes (1948-2015)

  • 18

    Nstor Omar Ulloa Anariba.Poeta. Es maestro de educacin primaria, graduado en la Escuela Normal Centroamrica, de Comaya-gua. Estudi una licenciatura en literatura en la Uni-versidad Pedaggica Nacional Francisco Morazn y en el ao 2012 fue becado por la Universidad de Sa-lamanca y el Banco Santander, para cursar un Ms-ter en Literatura Espaola e Hispanoamericana.Ha publicado los poemarios Soldemedianoche, en el ao 2003 y Los espejos de Carlos, en el ao 2006 y Detrs de la sed, en 2015.Ha sido invitado a representar a Honduras en festi-vales de poesa en Guatemala, El Salvador y Nicara-gua y Espaa.

    Parte de su produccin potica ha sido traducida al francs e ingls y publicada en revistas de Canad, Francia e Inglaterra.Se ha desempeado como docente en los niveles B-sico, Medio y Superior, del sistema educativo hon-dureo. Actualmente labora en la Editorial Uni-versitaria de la Universidad Nacional Autnoma de Honduras

    Nestor ulloa JONS NUNCA MS FUE EL MISMODespus de vomitarse a s mismo desde la ballena, Jons nunca ms fue el mismo.

    Se le vio andar de poblado en poblado,dibujando constelaciones de estrellas de maren la ribera de las manosy perdonando la vidaa todo el que domara su propia ballena.

    Pero sobre todo, descubri que era ficticia su fobia al mar.

    AUDIENCIA

    Vengo a que resucits desde mis cruces;a que redimslos mundos gravitantes en los agujeros negros.

    Vengoa que rescats los pecesque quedaron hurfanos cuando se multiplicaron los charcos.

    Vengo por mi pan.Porque s se vive de pan de donde vengo(y hasta se muere)

    NMESIS

    Por dentro,el agua ha devorado su frontera.

    El mar pende de las ventanasque abrimos en mitad de la nochey se traga las lunasque oscurecen la garganta de los lobos.

    Por dentro, la arena se pierde tras las huellas.

    Un viento poblado de mariposas violentasacuchilla los misterios encerrados en los escapula-rios.

    Por dentro,el fuego torna los arados en espadas.

  • Metamorfosis colgada al infinitoBusco colgar un poema en el cosmos Busco la humildad en un agujero sin pretensionesdonde descansen las aves convulsas de mi vozUn armario donde la sombra cambie su vestuarioUna lengua anclada a un barco sumergidoMuebles sumidos en la belleza muda de su inmvilMiradas en la fosa donde yace un corazn sin rostroPero s que la palabra es un misterio de estambreUna piedra ya nombrada por el tiempo

    Con las palabras afilo las espadas de mi vozCon ellas atrapo una soledad de arena y de nostalgiay unas cuantas cosas que reptan al olvidoLas palabras son un instrumento de precisin donde el verso es un aroma de reloj sin horas

    Mis palabras reclinan su cabellera en la raz cuadrada Tienen un frente de guerra adentro de tu vozuna nacin que ruge en el fondo de ti mismoEllas escapan sin lavar la ropa sucia de sus das Y en una percha cuelgo el cansancio de sus noches

    Mis palabras son un evangelio de nostalgiaun rengln de tinta y un escalpelo que vibra con la sangreall se tienden las lgrimas como se tienden las camas de las putasAusencia clandestina que recorre las calles nutriendo su cantoParlante de las cosas mudas rodando por las callesSon un luto de barro que llevo entre las venas

    Buscan calles clandestinas acechando con el pual de Maldoror calles de ti mismo en la angostura del suicidioHacen sintaxis en evasin con el pie heridoMetforas que inclina su cabeza caen por la gravedad en la garra cotidiana

    Franz TOrrezNicaragua


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