Febrera, 1950

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Anuncio aprobada par la C N. B. Oficio K.7. 631-11-2072 de 17 de febrero 1148.

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to actual de este maestro, expresado por l mismo y apoyndose en su obra igualmente actual, y para que se sepa qu hay de cierto en ese aiunm de su conversin al pintoresquismo y al facilkmo sentimental, que le atribuyen arquitecms de talla mucho menor que la suya. Quien escribe esta nota se permite comentar que una doctrina arquitectnica slidamente apretidida y ejercida se conviette en p r t e de uno mismo y llega a constituir una forma de fe lo mismo que una autntica conviccin social, pol'itica o ' teligka. Las moda$, 106 idioma y dialectos decorativas de un cierto momento; la influencia intoxicante de los nuevm ricm, o la asociacin $e las artes publicitarias con la arquitectura, no tienen que ver c m la solidez filosfica de una autntica dktriua de la arquitectura. Y no es seguramente un tcnico de la gran escuela europea como Richard Neutra quien se desprenda de la noche a la maana de la lucidez de pensamiento que lo ha caracterizado siempre, para dedicarse a esa escenografa con de y de .arqueolaga a i a que hoy se da el optimista nombre de "arquitectura orgnica".

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G~andes caiitos rodados. reliquia de un rexiioto glaciar. Y niiawja operada elPctricamrrite. dan ailrnciosa fnniiliaridad a la entra'.::

M.G.M.El construir en un desierto, sin liga con ambiente cultural previo alguno, favorece la discusin simplificada de los principios puros de la coqosicin arquitectnica contemporinei. Porque al,l, y por una sola vez, ese problema no est velado por asociaciones histricas, como se hallan tan freciientemente los problemas de la arquitectura. La casa en el desierto no se presenta aqu como la rcsidencia de un individuo. Es una inversin de fondos y enrtgas en un experimentar y en un iniciar, tan nececarios para todo progreso. Constituye un ejemplo elocuente d t cmo la tcnica moderna faculta al arquitecto a cxtenUn gian espejo de agua plantado de lirios alrededor se extiende a lo largo del frente oeste d e la cara. trata130 rn pulidas persianas de aluminio.

Nada intcrrumpr la ii.iirniiad de los cuartos de hu6spedes. ionsiis 'porches'. al vrtcrlor.

La terraza superior tirtie

tina estnpcnda vi:&

s ~ b r elas maiitaas

haya ideado y, por iltimo, pero no de modo accesoria, en los armoniosos nesultados artsticos que surgeti de un concepto bien integrado de diseo. Naturalmente, una casa en el desierto no ?uede estar arraigada al suelo para "surgir de l": nada se arraiga all, y ni siquiera un rbol puede creier sin auxilia. Un edificio es franca y claramente un artefacto, un objeto ~ransportado en muchas partes fabsri'zadas, y desde grandes distancias, hasta el seno de esa abrupta aridiz. Es tan poro "local>> como puede serlo el agua misma que es llevaida hasta c1 sitio cruzando kilmetros y ki!jmztros. 1-05 prados y arbustos florecidos que rodean esta residencia son "importaciones", lo mismo que su aluminio y paneles de cristal; pzro aistal y aluminioi, y el agua de la alberca, todo refleja intima y sutilmente los camb'ios dinmicos, los ambientes del paisaje; lo azul del cielo, la blancura de las nubs, las plidas o llameantes luces del alba y del crepsculo. Aunque no esti "arraigado", en el desierto, el edificio sin embargo se absorbe profuddamente en su escenario; toma parte en sus eventos, subraya su carcter. La estructura 10 exhib- ninguna pseudo dinmica e ~ ~ c t a c u l que le sea ar propia, sino que se asimila con una serenidad de autntica planeacin humana con la dinmica del lugar, desde su ardiente radiacisn hasta sus tempestades de arena y el fro nocourno bajo el cielo estrellado. La arquitectura contempornea, aqui como nunca antes, resuelve el problema de servir a la vida humana en cir;unstancias radicalmente nuevas.

Desde la entrada, con un plafn luininoso srbre el gabinete laqueado. se tiene una vista hacia el rincn de la chimenea del irea dehabitucibn.

der el rea habitable del planeta hacia lugares hasta aqui inhabitados y desprovistos as de cualquier tradicin de &serio humana. Se encontrarn otras muchos ejemplos ~emejantes las selvas del alto Amazonas o del Congo; en en las re~ionearticas; en las arenosas soledades de Arabia. El diseador del futuro quiz se enfrente con la nercsidad y con lo's medios d; ampliar el alcance de sus proyectos !laxa sitios desnudos en aibsoluto de un precedente cultural, como p e d e serlo un crter en la luna. La arquitectura en un lugar as ya no es slo una especie de trabajo de reacondicionamiento, sino una significativa labor de expansin sin preceidentes. D d t el norte del Per h'asta EI Golfo Prsico las cumpaxas petroleras y los desarrollos industriales erigen ciudades totalmente nuevas c m escuelas, hospitales, habitaciones, teatros e iglesias, todas ellas en sitios abrasados v en elewciones rocosas que Ins nativos acostumbrabar. calificar como lugares para recreo del diablo. Puede tener un edificio una gran signiicacin social : humana aun en el caso de ser ordenado por un propiera1 no individual. Esta significacin radi'ca frecuentemente en la "npicidad"