Tema: Nuevas formas de distribución del video: el streaming
En el presente tema, se examina el estado actual de los servicios de streaming en Mexico. La
industria cinematográfica se ha transformado por las elementos tecnológicos que lo rodean
en el siglo XXI.
Transformación en el soporte
Como se ha visto a lo largo del módulo de cine, el primer soporte que se utilizó para la
producción y exhibición cinematográfica fue el celuloide en donde se enlazaban fotografías
en formato analógico. Durante esta etapa, las exhibiciones de películas se hicieron de manera
colectiva o grupal. Los lugares donde se realizan estas exhibiciones se conocen con salas de
cine.
En los años 80 comienza la comercialización del videograma. El soporte del celuloide
cambia a soporte de cinta magnética, aunque el formato de imagen sigue siendo analógico. El
videograma o video permite la creación de equipos caseros y las cintas magnéticas del video
se presentan en videocasetes. Esta tecnología facilita la exhibición de películas en casa y da
origen a la aparición de los videoclubes que se dedicaban a la renta y/o venta de casetes con
videogramas. La marca más notable de videoclubes a nivel internacional se conoció como
Blockbuster. En México proliferaron los videocentros.
En los años noventa, con el uso generalizado de la digitalización, aparece el disco compacto
denominado CD-Rom (Compact Disc Read-Only Memory), un sistema de almacenamiento
en disco óptico mediante la tecnología LASER (light amplification by stimulated emission of
radiation) que se convierte en el nuevo soporte para todo tipo de información digital,
incluida la imagen. Esta tecnología evoluciona a través de diversas etapas: primero era solo la
impresión de datos como textos o cifras; luego se usó la impresión de sonido, sobre todo,
mediante el estándar de compresión conocido como MP3 y luego devino en soporte de video
digital. El primer soporte para video digital en disco compacto se denominó DVD VIDEO
(Disco Versátil Digital Video) en el que, al mismo tiempo, se utiliza el estándar de
codificación MPEG (Moving Picture Experts Group) así como diferentes marcas para
comercializar tanto el soporte digital de video como las máquinas lectoras o reproductoras.
Un estándar con gran capacidad para almacenar y comercializar el video de alta definición
apareció en 2003 y fue conocido como HD DVD (High Density Digital Versatile Disc). Este
formato fue desarrollado por las empresas: Toshiba, Microsoft y NEC así como por varias
compañías productoras de cine. Su capacidad de almacenaje llegó a 30 GB. Sin embargo,
debido a conflictos entre los intereses comerciales surgidos con las empresas productoras
de cine hollywoodense surgió la llamada “guerra de los formatos”. De esta forma, se retiró el
apoyo al estándar HD DVD y se optó por la validadción del estándar conocido como Blu-Ray.
Por otra parte, al tiempo que aparecen diversos soportes digitales para el video de alta
definición, se registran cambios en las pantallas de televisión y video. Se abandona la
tecnología del televisor electrónico que emitía la imagen a través del iconoscopio para
desembocar en la emisión digital a través de los aparatos conocidos genéricamente como
pantallas.
Estas transformaciones se complementan con el establecimiento de la banda ancha de
internet lo que ha permitido las opciones de emitir y sintonizar no solo el video de alta
definición sino también el sonido que permite instalar un verdadero teatro en casa.
De esta forma, han surgido tecnologías muy diversas, primero con la televisión directa a casa
(DTH-TV, Direct to home TV) y después, a través de las diversas plataformas y repositorios
de video construidas en internet cuyas distintas modalidades compiten seriamente con las
cadenas de salas cinematográficas desarrolladas por la industria del cine tradicional.
Qué es el streaming
El proceso tecnológico más reciente, que amenaza con transformar radicalmente la industria
del entretenimiento a través del audio y del video, se denomina streaming. Esta tecnología
afecta tanto a los videojuegos, a la venta de melodías sonoras, a los videogramas y a la
difusión televisiva, así como a las salas cinematográficas y a otras muchas costumbres
relacionadas con la promoción y comercialización del video. Baste poner como ejemplo, los
festivales y las formas de creación, producción y difusión del espectáculo audiovisual.
El término streaming o media streaming se aplica a una serie de productos y técnicas cuyo
objetivo es la divulgación o difusión de contenidos multimedia. Este sistema de distribución
se caracteriza por la visualización de los contenidos en el cliente (equipo que sintoniza) sin la
necesidad de esperar la descarga completa de un fichero.
Con la recepción de una pequeña parte, el cliente es capaz de entregar su contenido al
usuario, mientras continúa recibiendo la corriente o el flujo de datos (streaming) que irá
mostrando posteriormente. La parte almacenada actúa como “colchón” entre el ancho de
banda irregular que caracteriza a las redes TCP/IP (PROTOCOLO DE CONTROL DE
TRANSMISIÓN/PROTOCOLO DE INTERNET) y el débito contínuo que requieren las
transmisiones de audio y video.
Los productos de media streaming contemplan la distribución de contenidos tanto en una
intranet corporativa como en el Internet. Los contenidos pueden estar almacenados
previamente en un servidor (video on demand, media streaming), o crearse en el mismo
momento de su difusión (live media straming). En ambos casos el audio y el video fluyen a
través de un formato de codificacion (CODEC) que comprime la informacián analógica,
reduciendo considerablemente el ancho de banda requerido.
Un servidor de media streaming es un elemento muy valioso para actividades de
teleformación o educación a distancia. Nos permite ofrecer como recurso educativo
verdaderas presentaciones virtuales multimedia, en directo o como video on demand.
Existen soluciones sencillas para ofrecer estos servicios en un entorno universitario. (Los
cuatro párrafos anteriores fueron tomados de: https://www.rediris.es/difusion/publicaciones/boletin/58-
59/ponencia10.html)
Las plataformas que nos brindan el servicio de streaming por Internet son denominadas
Over-The-Top (OTT por sus siglas en inglés), que permiten al usuario disfrutar de millones
de canciones o videos por una suscripción mensual o de manera gratuita (con anuncios) y
pueden ser utilizadas en una amplia variedad de dispositivos tanto móviles como fijos
(computadoras, smartphones, tabletas, consolas de videojuegos, receptores digitales o Smart
TVs).
En México, al tercer trimestre del 2018 (3T18) se contabilizaron 14.4 millones de
suscripciones a plataformas de audio OTT.
Spotify es la plataforma en streaming que cuenta con la mayor cantidad de usuarios en
México, con 89.1% del total, pues ofrece una modalidad gratuita con anuncios y una
premium de pago mensual con paquetes familiares asequibles que otorgan acceso total e
independiente a cada usuario.
Mientras que plataformas como Amazon Prime Music Unlimited, Apple Music, Deezer,
Google Play Music, Stingray, Tidal y YouTube Music, a pesar de ofrecer una mayor
biblioteca, no han logrado un impacto relevante al no ofrecer esquemas gratuitos. (Tomado de
: https://www.eluniversal.com.mx/techbit/evolucion-del-consumo-de-musica-streaming-en-mexico)
Como dato adicional, se pueden mencionar las empresas que difunden streaming de video
juegos: Stadia, Twitch, Playstation Plus, PlayStation Now, Xbox Game Pass, EA Access y
Nintendo Switch Online. (Tomado de: https://selectra.mx/streaming)
Las empresas que funcionan en México para sintonizar video en streaming son:
Videos de tipo general
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Consumo de Contenidos Audiovisuales del
Instituto Federal de Telecomunicaciones, IFT, se obtuvieron los siguientes datos:
⎯ El 46% de los entrevistados declararon consumir contenidos audiovisuales por internet.
⎯ YouTube es utilizado por el 77% de las personas que consumen contenidos por internet,
⎯ 33% de las personas que ven contenidos por internet pagan una suscripcion periodica.
⎯ 41% de los entrevistados que consumen contenidos por internet, ven con mayor
frecuencia peliculas; seguido por videos musicales con el 35%; y series con el 34%.
(http://www.ift.org.mx/sites/default/files/contenidogeneral/medios-y-contenidos-
audiovisuales/encca18nacional.pdf)
En cuanto al porcentaje de usuarios de las principales plataformas de video, se tienen los
siguientes porcentajes:
Netflix 92
Claro Video 11
Youtube Red 9
Blim 5
Amazon Prime 3
(Tomado de ) https://www.eluniversal.com.mx/sites/default/files/u39647/01ene20-netflix.gif
Para tener una referencia númerica relacionada con los anteriores porcentajes, los usuarios
de Netflix en México, el 24 de julio de 2019, alcanzaban un total de 17.6 millones
(https://www.xataka.com.mx/streaming/mexico-segundo-pais-mundo-suscriptores-netflix-kantar)
Para tener conocimiento de las plataformas de video en México, a continuación se muestra
un listado de las que operan durante 2020:
Netflix, ofrece: Contenidos originales, películas, series de televisión, documentales,
programas infantiles.
Amazon Prime Video, ofrece: Contenidos originales, películas, series de televisión,
documentales, programas infantiles, telenovelas, canales por contratación extra,
transmisiones en vivo.
Claro Video, ofrece: Contenidos originales, películas, series de televisión, documentales,
programas infantiles, conciertos, telenovelas, deportivos, canales por contratación extra,
títulos en renta.
AppleTV+, ofrece: Contenidos originales, películas, series de televisión, documentales,
programas infantiles.
HBO Go, ofrece: Contenidos originales, películas, series de televisión, documentales,
transmisiones en vivo.
FilmInLatino, ofrece: Películas, series de televisión, documentales, cortometrajes, títulos en
renta, títulos gratuitos.
BlimTV, ofrece: Contenidos originales, películas, series de televisión, especiales,
transmisiones en vivo. Programación de canales de cable.
Cinépolis KLIC, ofrece: Películas y series de televisión a la renta y venta, transmisiones en
vivo.
Youtube premium, ofrece: Contenidos originales exclusivos, películas originales, series de
televisión.
Starzplay, ofrece: Contenidos originales, películas, series de televisión.
Fox+, ofrece: Contenidos originales, películas, series de televisión, documentales, programas
infantiles.
Mubi, ofrece: Películas, documentales.
AcornTV, ofrece: Películas, series de televisión.
Casa Caníbal, ofrece: Películas y documentales a la renta y venta.
Cinema Uno, ofrece: Películas, documentales, cortometrajes, títulos a la renta.
Paramount+, ofrece: Contenidos originales, películas, series de televisión, documentales.
MGM, ofrece: Películas, series de televisión.
Videos de tipo animación e infantiles
CN Ya!, ofrece: Contenido original de Cartoon Network. Infantiles, series de televisión.
Crunchyroll, ofrece: Contenido original en animación japonesa. Series de televisión.
Cbeebies, ofrece: Contenido original de BBC. Infantiles, series de televisión.
Noggin, ofrece: Contenido original de Nick Jr (Nickelodeon). Infantiles, series de televisión.
Videos con contenido para adultos
Pongalo, ofrece: Telenovelas iberoamericanas.
HotGo, ofrece: Películas y cortometrajes con contenido para adultos.
Viki, ofrece: Películas y dramas para los amantes de los dramas asiáticos. (Tomado de:
https://www.sectorcine.com/noticias-nota/plataformas-de-streaming-en-mexico/)
Sin embargo, detrás de la aparición de la tecnología del streaming y las plataformas OTT se
libra una lucha por conquistar el liderazgo en esta nueva forma de entretenimiento.
Para ilustrar esta lucha, se trascribe el siguiente artículo.
(https://cnnespanol.cnn.com/2019/11/01/nuevas-plataformas-recuperan-sus-producciones-y-desafian-a-netflix/)
La guerra del streaming
Nuevas plataformas recuperan sus producciones y desafían
a Netflix
Por Miguel Ángel Antoñanzas 17:09 ET(21:09 GMT) 1 Noviembre, 2019 (CNN) — Quizá le ha ocurrido: está frente a su televisor con el control en la mano. Frente a usted, un menú extenso. Películas, series, documentales, shows de comediantes… pasan los minutos y nada; escoger entre tantas opciones parece casi imposible
Estoy seguro de que muy pronto aparecerá un nombre para esta condición. Sin duda será curioso; algo así como Ansiedad Netflíxtica. Imagino una definición ya aprobada por la Real Academia de la lengua: Ansiedad Netflíxtica: Dícese del estado emocional producido por la dificultad para decidir ante una oferta variada de entretenimiento audiovisual. Se caracteriza por ser independiente del tamaño de la pantalla en uso.
Mientras llega la aprobación de la RAE, prepárese. En noviembre y el año que viene, esa ansiedad puede agravarse seriamente. Se avecinan tentadoras ofertas audiovisuales que nos evocan infancias eternas, el mundo de Disney o dramones duros como los de los que produce HBO, entre otros. En muy poco tiempo, y si su bolsillo se lo permite, tendrá al alcance de su dedo índice, si ese es el que usa para apretar los botones de su mando a distancia, un menú audiovisual nunca antes visto.
Esto plantea varias cuestiones. La primera, para estas plataformas: ¿hay mercado para todas estas ofertas? Y la segunda, para los usuarios: ¿tenemos realmente suficiente tiempo libre para consumir lo más granado de esta oferta?
Empecemos por el principio, ¿cómo llegamos hasta aquí? ¿Cómo empezó todo? No nos engañemos, la guerra del streaming es una más de las que se han registrado en la industria audiovisual a lo largo de las últimas décadas. En los años 50, la manera más común de ver contenidos audiovisuales gratuitos en casa era a través de la televisión, ese
aparato conectado a una antena que recibía las ondas hertzianas que emitían las estaciones. En muchos países latinoamericanos eran propiedad del Gobierno, aunque en EE.UU. eran privadas. En este último país, y durante las décadas de los 60 y 70 comenzó a expandirse la televisión por cable en las grandes metrópolis. En 1970 apareció el primer canal de pago: Home Box Office, mejor conocido como HBO.
Este pago otorgaba acceso a contenidos de mayor calidad, a espectáculos deportivos muy codiciado o a series y películas recientes. La propuesta provocó un cambio en el panorama televisivo. Ya no había límite para los canales y muchas compañías que ahora se lanzan al streaming, entonces empaquetaron sus contenidos para venderlos a canales especializados a través de distribuidoras como Comcast o Direct TV. Pero, a principios de los 90, el público comenzó a tener acceso a internet y una década más tarde la velocidad de transmisión permitía ya una reproducción decente… aquello de ver televisión que llegaba por internet iba a cambiar una vez más el panorama.
Netflix
Todo esto empezó en 1997 con una compañía de Los Gatos en California que retomó la vieja idea de enviar productos por correo. En esta ocasión eran DVDs. Esto permitía
además que se prescindiera de las tiendas físicas y del personal para atenderlas. También es verdad que se perdió esa tradición de ir al video club temprano los viernes para poder pillar los estrenos de la semana, o pedir consejos a los expertos de camisa azul oscura. Pero eso ya es otra historia.
Años más tarde, cuando la velocidad de internet aumentó considerablemente, comenzaron a distribuir las películas por streaming o transmisión vía internet. Y así llegó el boom, que nos hizo cambiar la manera de consumir películas y series, cambiar nuestros hábitos de entretenimiento casero.
Y lo hizo de dos maneras. La primera: nos trajo a casa el producto, ya no había que ir al famoso videoclub. De hecho, su primera víctima fue la gran cadena de alquiler de vídeos BlockBuster que fue incapaz de ver el potencial del streaming y acabó en bancarrota en 2010. La segunda: te ofrecía un catálogo lo suficientemente atractivo como para competir con las salas de cine convencionales. En estos tiempos, muchos espectadores reservan sus salidas al cine a películas-acontecimiento; ya saben, todas esas de efectos especiales como la última de la saga de Star Wars.
Y la oferta no sólo se limitaba a Estados Unidos, sino se abría a una multitud de mercados. Llegaron producciones europeas, árabes, turcas e indias. Los televidentes comenzaron a disfrutar de las historias y del talento de países hasta entonces ajenos a las pantallas estadounidenses. En el caso de Estados Unidos, se abría todo un mundo para el talento latino. Series como “La casa de papel” y “La casa de las flores” triunfaban en un mercado hasta ahora reacio a abrir sus puertas a todo lo que no fuera hablado en inglés.
Netflix ya no está sólo
Esa gran idea de Netflix, que triunfa en más de 190 países con 150 millones (en marzo de
2020: 165 millones) de suscriptores, ha sido copiada por otras grandes empresas. Estamos en las primeras de cambio en una batalla por la supremacía del contenido audiovisual en dispositivos pequeños y grandes, desde la super pantalla de 75 pulgadas hasta la pequeña del nuevo iPhone 11.
Para el experto en contenidos audiovisuales Angel Zambrano, el producto que se consume también ha cambiado: “Por ejemplo, la cantidad de series que se ven en Netflix ha aumentado la producción de televisión 2 o 3 veces de lo que se producía anteriormente. Han desaparecido las comedias tradicionales que se filmaban y ahora hay series que van más hacia el drama, pensado en el tipo de consumo de las audiencias, son productos que terminan e inmediatamente activan el siguiente contenido disponible”.
Zambrano dice que se está apostando más por producir series de televisión que películas porque para “el consumo de una película, la gente está sentada una hora, una hora y media, y para estas plataformas el tiempo que uno pasa enfrente, consumiendo, es muy importante, por eso el producto que tenga ocho o diez horas tiene mucho valor para su concepción de negocio”.
Todas estas plataformas están apostando mucho dinero en contenidos. Según la publicación de Hollywood, Variety, Netflix podría haber invertido en contenido original hasta US$ 15.000 millones en 2019. Son muchos millones y muchas horas de entretenimiento.
El beneficio de todo esto es para el consumidor, dice Zambrano, pero también para los productores del contenido… unos productores que ahora tendrán más opciones a la hora de vender sus producciones.
Los contenidos son la clave
El secreto de estas nuevas plataformas, al menos en sus primeros años de lanzamiento, es su fondo de contenidos.
La plataforma de Disney cuenta de entrada con una gran filmoteca de famosas películas y series de televisión de sus propios estudios. Además, ha ido adquiriendo más tarde otros codiciados fondos al comprar estudios como los de Marvel, con su saga de “Los Vengadores”; Pixar, dueña de “Los Increíbles” o “Toy Story” o los de Lucasfilm LTD., propietaria de los derechos de “La Guerra de las Galaxias”. HBO Max tiene también los fondos de los estudios Warner Bros. y New Line Cinema además de las exitosas series de HBO desde “Juego de Tronos” y “Los Soprano” hasta las más recientes como “Big Little Lies” o “Sucession”.
El desafío será mayor para las plataformas que no tengan estos tesoros y que dependan de la licencia de series y películas, por eso todas saben que ser dueño del contenido es la única manera de sobrevivir.
Apple TV Plus no tiene una gran librería propia, por eso ha comenzado a crear series como la protagonizada por Resse Whiterspoon, Steve Carrell y Jennifer Aniston, “The Morning Show”; con la última producción del creador de “Peaky Blenders” llamada “See”, con Jason Momoa y con la serie “Dickinson”.
Por su parte, Amazon Prime Video tiene previsto realizar una serie sobre “El Señor de los Anillos” y otra en España sobre el famoso personaje medieval “El Cid Campeador”.
España, pionera en contenidos en español
De hecho, España es uno de los países con más producción audiovisual en español del mundo, los derechos de series producidas en principio para algunos de sus canales de televisión como “La casa de papel” o “Paquita Salas” han sido adquiridos más tarde por Netflix y otras series han sido producidas directamente por la compañía californiana como “Las chicas del cable”.
Recientemente, el conglomerado Atresmedia, propietario de varios canales de televisión en España como Antena 3 y la Sexta, además de una productora de cine, ha llegado a un acuerdo de intenciones con la teleoperadora Telefónica para unir esfuerzos y crear contenidos de ficción en español.
La idea es producir contenidos audiovisuales en formato de películas o series de televisión para distribuirlas en sus propios canales o venderlos a terceros.
Antena 3 es la creadora de éxitos como “El tiempo entre costuras”, “Velvet” y “Vis a Vis”. Por su parte, Telefónica, a través de su plataforma Movistar+, ha creado series como “Arde Madrid”, de Paco León; “La Peste”, de Alberto Rodríguez y Rafa Cobos y acaba de estrenar “Mientras dure la guerra”, la más reciente película de Alejandro Aménabar. Es
una coproducción hispanoargentina que se presentó a concurso en el Festival de Cine de San Sebastián.
Sólo para sus ojos
Así las cosas, Netflix ha perdido la hegemonía de la producción mundial de contenidos para distribuir por internet en plataformas digitales. Ahora, el potencial mercado de espectadores no tiene fronteras ni límites. Sin embargo, los bolsillos de los suscriptores sí los tienen. Finalmente serán ellos quienes terminen haciendo una selección basada en el contenido y, sobre todo, en el precio. Quizás varias de estas plataformas no sobrevivan a esta criba, básicamente porque es tanto el material que ofrece cada plataforma que ya existe una sensación de saturación, que se verá multiplicada ahora sin remedio.
Ahora, si se siente superado o abrumado por tantas opciones, siempre queda la posibilidad de apagar todo y leer un libro, pero que sea de papel.
Para saber más, mira los siguientes artículos:
El talón de Netflix
Algunas de sus producciones propias han sido vistas por más de 80 millones de personas,
su catálogo es inmenso, pero ¿podrá la empresa de Los Gatos hacer frente a una
competencia que hasta ahora no ha tenido? Revelamos algunos de los puntos débiles de este
monstruo del contenido que llega a 151 millones de hogares en 190 países.
(https://cnnespanol.cnn.com/video/netflix-guerra-streaming-antonanzas-pkg/)
La fuerza está con Disney
Disney ha logrado consolidar un enorme imperio con sus viejas y recientes adquisiciones
de los estudios PIXAR, la franquicia de StarWars, los heróes de Marvel y los estudios de la
20th Century Fox. Hasta ahora no le ha importado compartir sus películas más famosas con
Netflix, y otras plataformas, pero a partir de noviembre eso sólo va a estar disponible en su
plataforma Disney +. Su oferta de suscripción es además una de las más baratas del
mercado. (https://cnnespanol.cnn.com/video/disney-guerra-streaming-antonanzas-pkg/)
El juego de HBO
HBO ha sido la cadena de pago con más éxito comercial y de crítica, series como Los
Soprano o Juego de Tronos la han hecho un referente en la venta de contenidos. En
primavera del año que viene presentará su HBO Max con los mejor del conglomerado
Warner Media, recientemente comprada por la telefónica AT/T.
(https://cnnespanol.cnn.com/video/hbo-max-guerra-streaming-antonanzas-pkg/)
Los otros competidores en la guerra del streaming
Hay además otras ofertas relacionadas con empresas de tecnología o ventas por correo, y que
van desde la gigante tecnológica Apple con su Apple TV Plus, pasando por Amazon Prime
TV hasta otras más sencillas y gratuitas como la oferta de Sony Pictures y su Crackle o Pluto
TV de Viacom, una compañía del magnate Sumner Murray Redstone.
(https://cnnespanol.cnn.com/video/apple-amazon-crackle-guerra-streaming-antonanzas-pkg/)
El ranking de las mejores series en streaming
Mira este ranking con las mejores series o producciones de la plataformas de streaming para
este otoño boreal. (https://cnnespanol.cnn.com/video/streaming-guerra-ranking-mejores-5-
pkg-antonanzas/)