Ruben Dario: El triunfo de Caliban 1898 [Edicion e intro. Jauregui]

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Revista Iberoamericana. Vol. LXIV, Ntums. 184-185, Julio-Diciembre 1998; 451-455

EL TRIUNFO DE CALIBAN' (1898)

POR

RUB1N DARG

No, no puedo, no quiero estar de parte de esos bifalos de dientes de plata. Sonenemigos mios, son los aborrecedores de la sangre latina, son los Brbaros. Asi se estremecehoy todo noble coraz6n, asi protesta todo digno hombre que algo conserve de la leche dela Loba.2

Y los he visto a esosyankees, en sus abrumadoras ciudades de hierro y piedray las horasque entre ellos he vivido las he pasado con una vaga angustia. Pareciame sentir la opresionde una montafa, sentia respirar en un pais de ciclopes, comedores de came cruda, herrerosbestiales, habitadores de casas de mastodontes. Colorados, pesados, groseros, van por suscalles empujandose y rozandose animalmente, a la caza del dollar. El ideal de esos calibanesesta circunscrito a la bolsa y a la fAbrica. Comen, comen, calculan, beben whisky y hacenmillones. Cantan iHome, sweet home! y su hogar es unacuentacorriente, un banjo, unnegroy una pipa. Enemigos de toda idealidad, son en su progreso apopldtico, perpetuos espejosde aumento; pero su Emerson bien calificado esta como luna de Carlyle; su Whitman consus versiculos a hacha, es un profeta dem6crata, al uso del Tio Sam; y su Poe,' su gran Poe,pobre cisne borracho de pena y de alcohol, fue el mArtir de su sueflo en un pais en dondejamas sera comprendido. En cuanto a Lanier,4 se salva de ser un poeta para pastoresprotestantes y para bucaneros y cowboys, por la gota latina que brilla en su nombre.

' El Tiempo, Buenos Aires, 20 de mayo de 1898. El articulo tambidn se public6 con el encabezado"Ruben Dario combatiente"~ en El Cojo Ilustrado de Caracas (1 de octubre de 1898) cuya copia, encomparacion con el texto de El Tiempo, reproducido en Escritos ineditos (1938) y el publicado en ElModernismo visto por los modernistas (1980), sirvi6 para efectos de esta edicion. He modernizadola ortografia y corregido algunos errores de las ediciones de Mapes y de Gullon que el lector que quieracomparar los tres trabajos advertiri.2 El uso de las mayusculas se reprodujo en los casos en que parecia significativo. Sobre el discursode la latinidad ver nota numero 15 en la introduccion.3En Los raros (1894-96) ya habia anticipado a Caliba1n. Ver introduccion.4Sidney Clopton Lanier (1842-1881), poeta de Georgia, inspirado en Byron, Tennyson y los

romAnticos, el cual condenaba, desde sus sentimientos dtico-religiosos, los males que el espiritucomercial traf a a la sociedad.

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"ITenemos -dicen- todas las cosas ma's grandes del mundo!" En efecto, estamosalli en el pais de Brobdingnag: 5 tienen el Niagara, el puente de Brooklyn, la estatua de laLibertad, los cubos de veinte pisos, el cai6n de dinamita, Vanderbilt, Gould,' sus diariosy sus patas. Nos miran, desde la torre de sus hombros, a los que no nos ingurgitamos de bifesy no decimos all right, como a seres inferiores. Paris es el guignol 7 de esos enormes ni'ossalvajes. AllA van a divertirse y a dejar los cheques; pues entre ellos, la alegria misma es duray la hembra, aunque bellisima, de goma elastica.

Miman al ingles -but English you know?- como el parvenu' al caballero dedistinci6n gentilicia.

Tienen templos para todos los dioses y no creen en ninguno; sus grandes hombrescomo no ser Edison, se Ilaman Lynch, Monroe, y ese Grant cuya figura poddis confrontaren Hugo, en El aho terrible.' En el arte, en la ciencia, todo lo imitan y lo contrahacen losestupendos gorilas colorados. Mas todas las rachas de los siglos no podr.n pulir la enormeBestia.

No, no puedo estar de parte de ellos, no puedo estar por el triunfo de Caliban.Por eso mi alma se llen6 de alegria la otra noche, cuando tres hombres representativos

de nuestra raza fueron a protestar en una fiesta solemne y simpAtica, por la agresion delyankee contra la hidalga y hoy agobiada Espania.

El uno era Roque Saenz Peia, el argentino cuya voz en el Congreso panamericanoopuso al slang fanfarr6n de Monroe una alta f6rmula de grandeza continental,' 0 y demostr6en su propia casa al piel roja que hay quienes velan en nuestras republicas por la asechanzade la boca del barbaro.

5 Pais de gigantes en Gulliver's Travels (1726) de Jonathan Swift. Comparacion que tambien usaGroussac: "Estamos como Gulliver en el reino de Brobdingnag" (Del Plata al Niagara 337). En eltexto de El Cojo Ilustrado aparece la errata "Dorbdinac".6 Se refiere al magnate de ferrocarriles y especulador Jay Gould (1836-1892) que caus6 el "BlackFriday" (24 de septiembre de 1869) con sus maniobras con el precio del oro, y a quien Marti criticaraagrianmente como "gran monopolizador [...] sobre la espalda del trabajador" y "millonario duro ydesdefioso" (Obras completas X, 84-86; 423).7"Guignol es el nombre de unamarioneta francesa creadaen Lyon a finales del siglo XVII; para la dpocaen que Dario escribe, guignol era el nombre que se le daba 'a los cabarets que presentaban showsdecadentes yen este sentido parece usarse en el texto. A partir 1897 vino a nombrar el teatro del horrorcon efectos o trucos especiales. Resulta poco probable, aunque no imposible, que Dario ya estuvieraal tanto del dxito de este teatro.8 Parvenu significa "advenedizo". Es paradbjico que Dario critique este deslumbramientonorteamericano con los ingleses y para hacerlo use una palabra en francds.9 L'annde terrible (1872) de Victor Hugo. En "A Roosevelt" (1905) repite la idea: "Ya Hugo a Grantlo dijo: Las estrellas son vuestras". Hugo habia atacado a Grant en varios articulos. Gullbn corrige eltexto como: "en el nitro terrible" (405).10 Roque Saenz Pefna (185 1-1914), presidente de Ia Argentina (1910-1914). Contradictor de Blamnedurante la Conferencia Internacional Americana (1889-1890), donde opuso a la doctrina Monroe ysu slogan "America para los americanos", la formula: "America para la humanidad" (Marti Obrascompletas VI, 81; Arellano, "Los raros: una lectura" 84).

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Saenz Pena habl6 conmovido en esta noche de Espana, y no se podia menos que evocarsus triunfos de Washington. iAsi debe haber sorprendido at Blame" de las engafifas, consu noble elocuencia, at Blaine y todos sus algodoneros, tocineros y locomoteros!

En este discurso de la fiesta de La Victoria'2 el estadista votvi6 a surgir junto con elvaron cordial. Habl6 repitiendo to que siempre ha sustentado, sus ideas sobre el peligro queentraflan esas mandibulas de boa todavia abiertas tras ta tragada de Tejas; Ia codicia delanglosaj6n, el apetitoyankee demostrado, la infamia politicadel gobiemo del Norte; to (til,to necesario que es para las nacionalidades espafiolas de America estar a la expectativa deun estiramiento del constrictor.

Solo una alma ha sido tan previsora sobre este concepto, tan previsora y persistentecomo lade Saenz Penla: y esa fue -i curiosa ironia del tiempo!- Ia del padre de Cuba libre,la de Jose Marti. Marti no ces6 nunca de predicar a las naciones de su sangre que tuviesencuidado con aquellos hombres de rapifa, que no mirasen en esos acercamientos y cosaspanamericanas, sino la afiagaza y la trampa de los comerciantes de tayankeria. ,,Que diriahoy el cubano al ver que so color de ayuda para ta ansiada Perla, et monstruo se la traga conostra y todo?

En el discurso de que trato he dicho que el estadista iba del brazo con el hombre cordial.Que to es Saenz Peia to dice su vida. Tat debia aparecer en defensa de Ia mas noblede lasnaciones, caida at bote de esos yangileses, en defensa del desarmado caballero que aceptael dueto con el Goliat dinamitero y mecanico.

En nombre de Francia, Paul Groussac. Un reconfortante especticulo el ver a esehombre eminente y solitario, salir de su gruta de tibros,'3 del aislamiento estudioso en quevive, para protestar tambidn por ta injusticia y el material triunfo de la fuerza. No es oradorel maestro, pero su lectura concurri6 y entusiasm6, sobre todo at etemento intetectuat de taconcurrencia. Su discurso, de un alto decoro literario como todo to suyo, era el arte vigorosoy nobte ayudando a tajusticia. Y [ha] de oirse decir: "%Qud? LEs ste el hombre que devoravivas las gentes? ,Este es el descuartizador? ZEs ste el condestable de la crueldad?"

Los que habdis teido su filtima obra,' 4 concentrada, metaitica, maciza, en que juzga atyankee, su cuttura adventicia, su civilizacion, sus instintos, sus tendencias y su peligro, no

"James G. Blaine (1830-1893) emipresario de ferrocarriles y candidato presidencial por el partidoRepublicano en 1884; sirvi6 como Secretario de Estado durante las administraciones de Garfield(t88t-t883) y Harrison (t889-1893) en las que fue portavoz de los intereses norteamericanos paraLatinoamerica y cabeza visible de Ia injerencia politica y economica de los Estados Unidos en el aireabajo Ia politica del "Pan-Americanism". Las opiniones de Dari estaban influenciadas por Marti quienvela en Blamne encamnada la codicia imperialista de los magnates republicanos. De Blamne decia elcubano "A su pais silo tuviera en las manos, le pondria buques por espuelas y un ejercito por caballo,y to echarla en son de conquista por todos los Ambitos de la tierra", "Blamne que no habla de poner enorden su casa sino de entrarse por las ajenas so pretexto de tratados de comercio y paz" (Obrascompletas X, 53, 199).12 El 2 de mayo de 1898, bajo el patrocinio del Club espaiiol de Buenos Aires, Groussac, Tarnassi ySaenz-Peflapronunciaron sus conferencias aproposito de laguerraentre EE.UU. y Espafla, en el teatroLa Victoria.'1 Era director de la Biblioteca Nacional.'4 Se refiere a Del Plata a! Niagara (1897).

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os sorprenderiais al escucharle en esa hora en que habl6 despues de oirse la Marsellesa. Si,Francia debia de estar de parte de Espaia. La vibrante alondra gala no podia sino maldecirel hacha que ataca una de las mas ilustres cepas de la vena latina. Y al grito de Groussacemocionado: "i Viva Espaia con honra!" nunca brot6 mejor de pechos espaioles esta inicarespuesta: " Viva Francia!"

Por Italia el senior Tarnassi. En una misica manzoniana, entusiasta, ferviente, italiana,expres6 el voto de la sangre del Lacio; habl6 en el la vieja madre Roma, clarine6guerreramente, con bravura, sus decasilabos. Y la gran concurrencia se sinti6 sacudida portan Ilameante "squillo di tromba. "'5

Pues bien; todos los que escuchamos a esos tres hombres, representantes de tresgrandes naciones de raza latina, todos pensamos y sentimos cuan justo era ese desahogo,cuan necesaria esa actitud y vimos palpable la urgencia de trabajar y luchar porque Ia Unionlatina no siga siendo una fatamorgana'6 del reino de Utopia, pues los pueblos, sobre laspoliticas y los intereses de otra especie, sienten, llegado el instante preciso, la oleada de lasangre y la oleada del comhn espiritu. iNo veis como el ingks se regocija con el triunfo delnorteamericano, guardando en la caja del Banco de Inglaterra, los antiguos rencores, elrecuerdo de las bregas pasadas? iNo veis como el yankee, democrata y plebeyo, lanza sustres hurrasj y canta el God save the Queen, cuando pasa cercano un barco que lleve al vientoIa bandera del ingles? Y piensan juntos: "El dia llegara en que, los Estados Unidos eInglaterra sean duenios del mundo".

De tal manera la raza nuestra debiera unirse, como se une en alma y corazdn, eninstantes atribulados; somos Ia raza sentimental, pero hemos sido tambien duenos de lafuerza. El sol no nos ha abandonado y el renacimiento es propio de nuestro Arbol secular.

Desde Mejico hasta la Tierra del Fuego hay un inmenso continente en donde la antiguasemilla se fecunda, y prepara en Ia savia vital, la futura grandeza de nuestra raza; de Europa,del universo, nos Ilega un vasto soplo cosmopolita que ayudarf a vigorizar Ia selva propia.Mas he ahi que del Norte, parten tentAculos de ferrocarriles, brazos de hierro, bocasabsorbentes.

Esas pobres repiublicas de la America Central ya no sera con el bucanero Walker conquien tendran que luchar, sino con los canalizadoresyankees de Nicaragua; Mejico estfi ojoatento, y siente todavia el dolor de Ia mutilacion; Colombia tiene su istmo trufado de hullay fierro norteamericano; Venezuela se deja fascinar por la doctrina de Monroe ylto sucedidoen la pasada emergencia con Inglaterra, sin fijarse en que con doctrina de Monroe y todo,losyankees permitieron que los soldados de la reina Victoria ocupasen el puerto nicaragfiensede Corinto; en el Peru hay manifestaciones simpAticas por el triunfo de los Estados Unidos;y el Brasil, penoso es observarlo, ha demostrado ma's que visible interes en juegos de dacay toma con el Uncle Sam.

Cuando lo porvenir peligroso es indicado por pensadores dirigentes, y cuando a la vistaestA la gula del Norte, no queda sino preparar la defensa.

15 Toque de trompeta.'6 Fatamorgana: espejismo que se veia en el estrecho de Mesina y se atribuia a Morgana, hermana del

rey Arturo.

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Pero hay quienes me digan: "No ye usted que son los mas fuertes? LNo sabe usted quepor ley fatal hemos de perecer tragados o aplastados por el coloso? No reconoce usted susuperioridad?" Si, como no voy a ver el monte que forma el lomo del mamut? Pero anteDarwin y Spencer no voy a poner la cabeza sobre la piedra para que me aplaste el craneola gran Bestia.

Behemot' 7 es gigantesco; pero no he de sacrificarme por mi propia voluntad bajo suspatas, y si me logra atrapar, al menos mi lengua ha de concluir de dar su maldicion (ltima,con el uiltimo aliento de vida. Y yo que he sido partidario de Cuba libre, siquier fuese poracompaiar en su sueflo atanto soflador y en su heroismo a tanto mArtir, soy amigo de Espanaen el instante en que la miro agredida por un enemigo brutal, que Ileva como ensefla laviolencia, la fuerza y la injusticia.

"Y usted ,no ha atacado siempre a Espania?" Jamas. Espafa no es el fanAtico curial, niel pedanton, ni el domine infeliz, desdefioso de la America que no conoce; la Espana queyo defiendo se llama Hidalguia, Ideal, Nobleza; se llama Cervantes, Quevedo, Gongora,Gracifin, Velaizquez; se llama el Cid, Loyola, Isabel; se llama la Hija de Roma, Ia Hermanade Francia, la Madre de Ameirica.

~Miranda ipreferira siempre a Ariel; Miranda es la gracia del espiritu; y todas lasmontaflas de piedras, de hierros, de oros y de tocinos, no bastardn para que mi alma Jatinase prostituya a Caliban!

Edicion y notasCarlos Jauregui

University of Pittsburgh

1" Animal monstruoso descrito por Job (40:15-24).

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Revista Iberoamericana. Vol. LXIV, Nu'ms. 184-185, Julio-Diciembre 1998; 441-449

CALIBAN, ICONO DEL 98.A PROPOSITO DE UN ARTICULO DE RUBEN DARIO'

POR

CARLOS JAUREGUI

University of Pittsburgh

Para Lucas

1898 fue un aiio fundamental en la redefinici6n de la identidad latinoamericanapor losintelectuales de fin de siglo. El "destino manifiesto", laaplicacion heterodoxa 2 de la doctrinaMonroe y la tesis expansiva de Frederick Jackson Turner sobre las fronteras (1893),amenazaban no s6lo a las Antillas; los intereses de los Estados Unidos (para usar laexpresi6n de Theodore Roosevelt) crecian en Centroamdrica de manera peligrosa para lasoberania de sus reptblicas y Ia experiencia de Cuba ese aito confirmaba los peores temoresde la generaci6n modernista. Mexico, Cuba, Puerto Rico y Filipinas eran -en el momentocumbre del imperialismo expansionista que alcanzaria a Panama unos anos mss tarde- losnombres de una geografia territorial, cultural y econ6mica, inestable. En este contextopodemos leer la fiebre verbal y el arrebato hispanico de los modemistas que, confiados en

el poder de la letra, declaraban (en terminos Norte/Sur) la identidad continental de la queMarti llam6 "Nuestra America" y Dario la "Uni6n latina".

La comprension del momento se intent6 nombrando la amenaza de diversas formas:

utilitarismo, materialismo, barbarie, vulgaridad democrAtica, y oponiendole el Hispanismo3

en sus versiones moral, racial y lingilistica. Los referentes simbolicos de esos discursosfueron idilicos lugares comunes: la invocacibn de valores espirituales e idealistas, lalatinidad que hacia a America "hija de Espania", "sobrina de Francia" y "nieta de Roma",y la lengua, que permitia la conexion con el pasado espai'ol.

' Esta breve nota sobre un momento (el modernista de Dario) en el itinerario laberintico de Calibidnen Latinoamerica se inscribe en un trabajo ma.s amplio sobre las metdforas de identidad en elcontinente.2 Me refiero a la aplicaci6n a la ofensiva iniciada por el Secretario de Estado James G Blamne, bajola administracion Garfield (1881-1883) durante la cual se decidi6 una nueva concepci6n de la doctrinaMonroe en el marco de la carrera imperialista entre las potencias por territorios y mercado. Blamneocup6 el mismo puesto durante la presidencia de Harrison (1889-1893) y deline6 alli los objetivoscomerciales (y militares) de los Estados Unidos en el Caribe y Suramerica. Para una lista de loside6logos del imperialismo norteamericano en la decada de 1890 ver Daniel Rodriguez (5-21).3 E Hispanismo desde mitad del siglo XIX le hacia juego a la nostalgia imperial peninsular (Reid 123)como la idea de la latinidad al liderazgo politico intemnacional frances (ver nota 15).

442 ~CARLOS JAU REGIJ

El personaje Calib6an de La tempestad(161 1) de William Shakespeare, icono canonizadopor Jose Enrique Rod6 en su ensayo Ariel (1900), sirvi6 para la composicion utopica delimaginario hist6rico en un presente conflictivo e inasible, y para impugnar el materialismovulgar de los nuevos tiempos.4 La apropiaci6n latinoamericana de los personajes del drama(Caliban, Ariel, Miranda, Pr6spero) es, sin embargo, generacional, modernista; antes de quela propusiera Rod6 estaba ya en el imaginario de la dpoca. Esta breve nota quiere introduciruno de los documentos que da cuenta de ello, un articulo de Ruben Dario que qued6 maso menos sepultado entre su prosa periodistica y que ha sido descuidado por la critica:5 "Eltriunfo de Caliban" aparecido en El Tiempo de Buenos Aires (20 de mayo de 1898) y en ElCoo Ilustrado de Caracas (1 de octubre de 1898).

Dos afios antes que Rodo lo hiciera, Dario -un Dario de 1898, visto tradicionalmentecomo el escapista y esteta de la "torre de marfil"- usaba con una retorica frontal laoposicion Ariel/Caliban en su condena a los Estados Unidos, a proposito de la guerra deCuba.' Rod6, empero, establece una genealogia francesa (Ernest Renan) en la que no sehalla Dario, 7 ni tampoco el franco-argentino Paul Groussac, director de la BibliotecaNacional, de quien -se dice- el y Dario habrian tomado la idea. Algunas exposiciones,en efecto, tienden a darle ese papel central a Groussac, lo cual es menester aclarar. El 2 demayo de 1898, en el teatro La Victoria, en un evento patrocinado por el Club espaiol deBuenos Aires a raiz de la guerra entre los Estados Unidos y Espana, Groussac se habiareferido a la agresi6n "yankee", y al cuerpo monstruoso (calibanesco) de los EstadosUnidos. En medio de sus reflexiones sobre las bondades de la Conquista, las excelencias dela literatura espafiola, y la observacion sobre la inmadurez de Cuba para la independencia(!), decia:

en el umbral del siglo XX ella [la civilizaci6n latina] mira erguirse un enemigo ma'sformidable y temible que las hordas brbaras [...] desde la guerra de Secesin y la brutalinvasion del Oeste, se ha desprendido libremente el espirituyankee del cuerpo informe y'calibanesco'; [...] Esta civilizacion, embrionaria e incompleta en su deformidad, quieresustituir la razon con la fuerza[...] No tiene alma, mejor dicho: solo posee esa almaapetitiva que en el sistema de Platon es fuente de las pasiones groseras y de los instintosfisicos (dnfasis mio, Viae intelectual 100, 101).

Antes de la publicacion de Ariel y casi simultaneamente con Ia referencia citada deGroussac, Dario propuso en "El triunfo de Caliban" el "personaje metafora" que le

4 Para Fernaindez-Retamar, Calib6an funciona como un "concepto-metafora" (Spivak) o "personajeconceptual" (Deleuze y Guattari), ("Adios a Calib6an" 79).5 Hacen menciones y referencias breves al texto: Arciniegas (315), Arellano ("Ruben Dario" 106; Losraros: una lectura 83), Allen (387-89), Balseiro (120-2 1), Castells (165). Castro-Morales (en Rodo152), Reid (195), Rodriguez-Monegal (80), Vaughan (147), etc. De estos trabajos el de Balseiro(1967) es el ma's extenso en su comentario.6 E 11 de abril de 1898 el presidente William McKinley solicit6 autorizacion al Congreso (obtenidadias despuds) para intervenir en Cuba "para parar la guerra" entre Espania y los independentistascubanos que Ia tenian prActicamente ganada.7 Asi mismo ocurri6 en el ensayo de Femnandez-Retamar, aunque una nota a pie de pdgina aparecidaen la edicion de 1995 corrige la omision (33).

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permitiria articular ese alegato desgarrado en favor de una idilica cultura hispinica fundadaen valores espirituales, contra el modelo igualitario y capitalista de los Estados Unidos.8

Cuatro afios antes de los eventos del teatro La Victoria y del articulo que se publica, Darioya habia adelantado a Calibin en su semblanza de Edgar Allan Poe publicada en la RevistaNacionaP en enero de 1894, que incluyera luego en Los raros (1896). Al comienzo de estahace un recuento de su viaje a la ciudad de New York (1893) que recuerda bajo elacaloramiento y disgusto que le causaba "la sanguinea, la ciclopea, la monstruosa ... capitaldel cheque" (14, 15) y anticipa al Caliban de su articulo de 1898:

"esos ciclopes ..." dice Groussac; "esos feroces calibanes..." escribe Peladan. Tuvo razdnel raro Sar al lamar asi a estos hombres de la Ameica del Norte? Caliban reina en Ia islade Manhattan, en San Francisco, en Boston, en Washington, en todo el pais. Ha conseguidoestablecer el imperio de la materia desde su estado misterioso con Edison, hasta laapoteosis del puerco, '" en esa abrumadora ciudad de Chicago. Caliban se satura de whisky,como en el drama de Shakespeare de vino; se desarrollay crece; y sin seresclavo de ningunProspero, ni martirizado por ningun genio del aire, engorda y se multiplica; su nombre esLegi6n. Por voluntad de Dios suele brotar de entre esos poderosos monstruos, algin serde superior naturaleza, que tiende las alas a la eternaMirandade lo ideal. Entonces Calibanmueve contra el a Sicorax, y se le destierra o se le mata. Esto vio el mundo con Edgar AllanPoe, el cisne desdichado que mejor ha conocido el ensuetlo y la muerte [...] Poe, como unAriel hecho hombre, diriase que ha pasado su vida bajo el flotante influjo de un extraflomisterio. Nacido en un pais de vida practica y material, Ia influencia del medio obra en elal contrario (16, 17, 19).

David Allen (386) supone que "Chicago: la ciudad y la exposicion" de Del Plata alNiagara (1897) de Groussac habria influido en la nota sobre Poe de Dario. Segun el, esecapitulo fue publicado en 1883 en un peri6dico -- que no cita- en Buenos Aires. Aunqueel texto esta fechado en octubre de 1883 y Ia hip6tesis de Allen es interesante y muyprobable, la noticia de publicacion que tenemos es lade la edicion de 1897 (Canter 12). Aimaceptando que el capitulo de Groussac hubiera sido publicado antes, Ia mencion que alliaparece estit referida a la belleza "calibanesca" de Chicago (345), lo que de cualquier manerano tiene el alcance de la oposicion binaria Ariel/Caliban; ademiis ... jNo ignorariamos que

K Recurrira de nuevo a este motivo, aunque sin la centralidad del ensayo del 98, en "Los anglosajones"de Peregrinaciones: "Entre esos millones de Calibanes nacen los mas maravillosos Arieles" (Balseiro126). El calibanismo es unaclave de lectura de una serie de articulos y poemas que incluyen entre otrostextos: "D.Q." (1899), "La invasion de los barbaros del norte" (1901), "Invasiomn anglosajona:Centroamdrica yanqui" (1902), "A Roosevelt" (1905) y "Salutacimn al Aguila" (1907).9 Arellano refiere esta publicacimn temprana (Los raros: una lectura 28). Tambidn hay una mencimnde Caliban en Ia semblanza "Augusto de Armas" de Los raros, como lo seiialm Pedro Lastra (enSchulman 205); en ese escrito Dario dice de Stuart Merrill que: "como Poe, nacion en ese pais quePeladan tiene razimn en Ilamar de Calibanes". Este texto, publicado en La Nacion el 4 de septiembrede 1893 (Arellano, Los raros: una lectura integral 26-27), constituye una referencia, si bien breve,temprana y significativa, especialmente por Ia fuente mencionada, vale decir: Peladan.

"Esta alusiimn coincide con lade Groussac en Del Plata al Niagara (1897) en donde llama a ChicagoPorcimpolis (298).

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Dario en Los raros declara a Peladan como su fuente cuando dice: "'esos feroces calibanes[...]' escribe Peladan"?

El Sar, Josdphin Peladan (1858-1918), a quien Dario "leja con particular devocion"(Arciniegas 315), fue un novelista y ocultista frances en la corriente angelista (opuesta alsatanismo) y fundador de la orden Rose-Croix (1892), que gozaba de gran prestigioentonces (Pincus 2-9). Peladan habia profetizado el triunfo del materialismo (Arellano, Losraros: una lectura 85) y de alli la conveniencia y pertinencia de la adopcion de ese iconoque coadyuvaba la oposicion al positivismo cientifico y al materialismo. La declaracion deDario sobre su fuente es clara y le queda a la critica el rastreo de ese Caliban, hijo putativode America, del espiritismo frances y de las ciencias ocultas a las que fue propenso elModernismo."1

Dario, se dijo, poco le deberia a la menci6n pasajera de Groussac sobre Chicago, ahnen el caso de haber sido dsta publicada antes de 1894. Me inclino a pensar que hubo ciertasimultaneidad en el uso de una metAfora afrancesada que estaba en el ambiente. Ahora bien,Si se acepta como probable la deuda de Dario con Groussac, no sucede lo mismo con lasupuesta influencia de Renan; no tenemos indicios que permitan una lectura extensiva delas fuentes de Ariel como si fueran las mismas de "El triunfo de Caliban".

"El triunfo de Caliban" fue reescrito a partir del texto sobre Poe. Rodo, por su parte,no obstante que conoci6 Los raros (Balseiro 121) y muy probablemente habia leido "Eltriunfo de Caliban" antes de escribir su Ariel, no menciona a Dario. Renan le sirve deautoridad "mejor" que el nicaragUense. Por otra parte aunque ambos ensayos tienen como

presupuesto "los valores de la latinidad", el de Rod6 difiere por su tono reposado y porqueen e1 la oposicion Ariel/CalibAn es menos explicita. Ariel "presupone la amenaza deCaliban" (Ramos 217) pero no la hace manifiesta; el genio del aire se opone casi tAcitamentea un escasamente mencionado Caliban.

El texto sobre Poe en Los raros precede y contiene la mayoria de las asociaciones delalegato del 98: el yankee es el monstruo CalibAn, un ser moralmente inferior que sucumbeal vicio de la bebida,' 2 y que reemplaza la razon con la fuerza, en contraste con Ariel querepresenta las alturas del espiritu; la bestia encarna el materialismo, una forma satAnica delmal ("su nombre es Legion"13) vinculada al modelo norteamericano cuyas ciudades sonemblemAticas de la "civilizacion barbara" (oximoron que conjuga los extremos de laproposicion de Sarmiento); Miranda aparece como un etemno femenino virginal/maternalque extiende sus brazos al idealismo' 4 "latino"; y por uiltimo, las excepciones confirman laregla: Poe y Lanier (quien "se salva por la gota latina que brilla en su nombre") se batencontra -y existen a pesar de- un medio corrupto que ha quebrado la aristocracia delespiritu.

"Sobre esta relacion, la credulidad de la Apoca, y en especial Ia de Dario, ver "Espiritismo ymodernismo" (Gullbn en Schulman 86-122).12A Caliban solo lo doblega el vino que Esteban y Trinculo usan para domesticarlo (2024-25) y bajo

cuya influencia los cree dioses convirtiendose en "iel mas credulo de los monstruos!" (2026)dispuesto a lamer los zapatos de Esteban (2029).13 (Marcos 5:9).14 En el articulo del 98 dice: "Miranda preferira siempre a Ariel; Miranda es la gracia del espiritu".

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El discurso elitista de la crisis finisecular modernista no pens6 la epoca fuera delantipragmatico y aristociftico manifiesto de la latinidad. Esta vision del imperialismo"como una contradiccion a la tradici6n hispnica, y un ataque a los fueros de la inelligentsiaelevada por encima de la masa" (Morava, Literatura y cultura 67), Cs un sintoma deldesencuentro de estos intelectuales con la modernidad (parafraseando una expresion deJulio Ramos) y una marca de los limites de su lectura de Ia cultura y Ia historia. Al nombrarsu causa de identidad como lade la raza latina, acudian a una idea racista, de factura francesay parad6jicamente disefada en el proceso de constitucion del botin americano' que sedisputaban potencias como Inglaterra, Francia y Los Estados Unidos, esos "gigantes queIlevan siete leguas en las botas" -como decia Marti en 1891- que libraban una "pelea decometas en el cielo" y que iban "por el aire dormido engullendo mundos" ("NuestraAmerica", Oc VI, 15). A esta contradicci6n debe sumarse, en el caso de Dario, lainconstancia de la beligerancia espiritual "latina" contra el "imperio de la materia" y la"apoteosis del puerco" yankee; el latinismo que en 1898 concluye: "i Miranda preferiffisiempre a Ariel; Miranda es Ia gracia del espiritu; y todas las montatas de piedras, de hierros,de oros y de tocinos, no bastaran para que mi alma latina se prostituya a Caliban!" ("Eltriunfo" 455),16 no resiste Ia lectura de los versos de "Salutacion al aguila" (1907): "Traenoslos secretos de las labores del Norte, / y que los hijos nuestros dejen de ser los retores Latinos/ y aprendan de los yanquis Ia constancia, el vigor, el carActer" (Poesias Competas II, 707-709).

Tres paradojas adicionales pueden ilustrar los limites del discurso calibanico del 98:1. En "El triunfo de Caliban" Dario insiste repetida y prodigamente en imagenes de

consumicion:

comedores de came cruda [..] Comen, comen [...] Ia asechanza de Ia boca del barbaro [..]el peligro que entrafian esas mandibulas de boa todavia abiertas tras la tragada de Tejas;la codicia del anglosajon, el apetitoyankee [...] 6Qu diria hoy el cubano [Marti] al ver queso color de ayuda para Ia ansiada Perla, el monstruo se Ia traga con ostra y todo? [...] Mashe ahi que del norte, parten [...] bocas absorbentes [...] a la vista esta la gula del Norte, etc.(451, 452, 453, 454).

En "Invasion anglosajona: Centroamerica yanqui" (1902) denunciara de nuevo elapetito de los Estados Unidos justo antes de la intervencion en Panama y temiendola enNicaragua:

'' El Panlatinismo en Ia segunda mitad del siglo estaba ligado a los intereses de la politica exteriorfrancesa que queria colocarse al frente de los paises latinos y hacer contrapeso a las "nacionesanglosajonas". Desde la decada de 1850 esa idea tuvo defensores como Michel Chevalier(l1806-1879)y Ernest Renan (1823-1892) que habian impulsado un modelo geoideologico que legitimaba Iaexpansion economica de Francia y su patronazgo cultural. En Suramerica la idea resurge a partir dela decada 1880 y es usada por los modernistas contra los Estados Unidos (Phelan 5-21).6 Todas las citas y referencias de paginas del articulo de Dario "El triunfo de Calibain" se realizan de

acuerdo a Ia edicion del mismo en este volumen.

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Un ministro de la Repilica de Nicaragua -el senor Gomez- decia al celebre escritorcolombiano Vargas Vila: "Que los americanos nos han de corer, es un hecho. No nosqueda mais que escoger la salsa con que hemos de ser comidos" (Escritos dispersos 142).

Sin embargo Dario, que tenia frente a si esta imagen del imperio voraz, no relacion6a Caliban con el termino canibal, mas acorde con el campo lexico de su caracterizacion delos Estados Unidos. El anagrama, que suponemos obvio, no lo era tanto para Dario, o no deltodo.

2. La resistencia humanista a la consolidaci6n del poder hegemonico norteamericanoy al imperialismo no encuentra un icono en Caliban, como sucedera posteriormente con laavanzada contracolonial en el Caribe (Lamming, Cesaire, Fernandez-Retamar). Dario YRod6 no se reconocen en el monstruo colonizado que maldice al usurpador, sino en Arielo en Pr6spero.' 7

Caliban maldice a Pr6spero en un gesto de rebeldia maniatado por el poder del invasor.Dario, en 1898, sabe o se declara sujeto de un heroismo de la inutilidad, pero no reconoceen sus palabras el drama calibanico:

Pero hay quienes me digan: "%No ye usted que son mas fuertes? No sabe usted que porley fatal hemos de perecer tragados o aplastados por el coloso? No reconoce usted susuperioridad? Si, Lc6mo no voy a ver el monte que forma el lomo del mamut? Pero anteDarwin y Spencerno voy a poner Ia cabeza sobre lapiedraPara que me aplaste lagran bestia[...] no he de sacrificarme por mi propia voluntad bajo sus patas, y si me logra atrapar, almenos mi lengua ha de concluir de dar su maldici6on ttima, con el ultimo aliento de vida(455).

3. De la pluma de Marti obtuvo Dario el material de una lectura intensa de los EstadosUnidos (el lector de "El triunfo de Caliban" notary cierta intertextualidad, por ejemplo enlosjuicios severos a Blaine y a Gould), pero su defensa de Espana en las condiciones de esemomento era un alegato contra Cuba y contra la herencia politica de Marti, pese a los golpesde pecho al final del texto.'8

Dario dirige su "panfleto cultural"' 9 contra los Estados Unidos, no contra Espafia 2 0 y,en este sentido, la identificacion con Ariel, el sirviente del Prospero, es coherente con elpapel instrumental del intelectual defensor de los intereses peninsulares.

'" Dario probablemente no estaba al tanto, o no le interesaba, Ia lectura romAntica de La tempestadhecha por William Hazlitt (1818) -a rafz de una discusion con Coleridge sobre la imputacion queeste hiciera a los Jacobinos de ser usurpadores, ba.rbaros y calibanes- en que cuestion6 el derechodel invasor "civilizado" y afirm6 el derecho a resistir que asistia a Caliban, "the legitimate sovereignof the isle", contra "Prospero and the rest of the usurpers" (Oc III, 207).18 Esas simpatias pueden rastrearse en las celebraciones del "Descubrimiento" en las que particip6Dario en 1892.19 Jameson usa esta expresion al hablar del "Caliban" de Femnandez-Retamar (6).20 Dario por momentos estA respecto a Fernandez-Retamar mas cerca de lo que pudierapensarse. Tieneuna diferencia de tropos pero el sentido de su alegato es direccionalmente paralelo: el reclamo de unaidentidad y unidad latinoamericana, opuesta a la intervencion y avance de los Estados Unidos.

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Arturo Andres Roig, hablando de Marti, Hostos, Dario y Rod6, dice que el discursodel 98 americano no es

expresado en lo que en la Peninsula se llam6 "literatura del desastre" o de la "decadenciaespai'ola", expresi6n de la frustraci6n historica, de sentimientos injustificados de desalientoy derrota. iC6mo iban a lamentar los caribeflos el fin de un imperio? Lo que si habian delamentar y lamentamos todavia, fue el remplazo de aquel por otro (135, 136).

Por lo que respecta a "El triunfo de Caliban" no se puede aceptar la tesis de Roig; esediscurso antiimperialista se prestaba a la politica exterior espaflola;2' la simpatia de Dariopor la causa martiana es apenas sentimental: "Y yo que he sido partidario de Cuba libre,siquier fuese por acompafiar en su sueflo a tanto soflador y en su heroismo a tanto mTir,soy amigo de Espafla en el instante en que la miro agredida por un enemigo brutal" (455).Dario lamenta el surgimiento del nuevo imperio, es cierto, pero no deja de llorar ci fin delanterior.

Estos limites de la metafora -el que no relacione Caliban/Canial, que no asocieCaliban/America Latina, y/o que no extienda el escenario conceptual de La tempesad aEspafia- pueden tener relaci6n causal con las pobres herramientas del humanismo burguespara entender su tiempo allende su espiritualismo antipragmftico. Lo que se ha indicadorespecto de Ariel, es decir, que no se detuvo en "las causas politico-econ micas delfen6meno imperialista" sino que se qued6 en la resistencia axiologica programAtica(Morafla en Iiigo 660), puede bien hacerse extensivo a "El triunfo de Caliban".

La posicion problemAtica de esta generacion tiene su nudo en la perdida de autoridadde su quehacer letrado y en el correspondiente intento por legitimar la literatura en la medidade su resistencia a los flujos de lamodernizacion (Ramos 10), al tiempo que-para defendera una potencia decadente contra una emergente -, se permitiaretozos eurocentricos 22 comoIa construcci6n de un discurso de identidad con fuentes en Shakespeare, en los ideologosdel imperialismo frances, o, en el mejor de los casos, en sus espiritistas.

Por ello Groussac, sin rubor, habla de Ia inmadurez de Cuba para la independencia yDario trae a su monologo a una Espafla vetusta y no a la que libr6 una guerra contra loscubanos y que, de alguna manera, con su insistencia en conservar las colonias, sirvi6 a Cubaen bandeja a la intervencion de los Estados Unidos: "la Espan'a que yo defiendo -decia-se llama Hidalguja, Ideal, Nobleza; se llama Cervantes, Quevedo, Go'ngora, GraciAn,Velazquez; se llama ci Cid, Loyola, Isabel; se llama la 1lTi tde Roma, la Hermana de Francia,la Madre de America" ("El triunfo" 455). Obviaba la Espafla que hizo de la poblacion civil

21 Tambien puede pensarse en otros intereses como los del proyecto liberal argentino que tenia Iapretensioln de erigir una potencia en ci sur dcl continente: "Saenz Pen'a, ci argentino cuya voz en ciCongreso panamericano [.. demostr6 en su propia casa al piel roja que hay quienes velan en nuestrasrepflblicas por la asechanza de Ia boca dcl barbaro" ("El triunfo" 452). Esta lflgica dcl contrapeso serepite en "A Roosevelt": "Apenas brilla, alzandose, ci argentino sol" (Poesias Completas II, 639-64 1).22 Marti habia denunciado este pensar en frances o en ingks o en ci caso del ensayo que nos ocupa,pensar a Cuba desde Madrid ("Nuestra America", Oc VI, 15-23).

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de la isla un objetivo militar en la campiiade tierra arrasada del general espafol ValerianoWeyler en 1896.

"El triunfo de Caliban", en conclusion, tiene un valor representativo de los debates dela epocay del imaginario del 98, de los alcances y limites del discursofrente ala modemidad,

el imperialismo y la identidad continental, e indica el rumbo de la imaginacion historicageneracional del fin de siglo. Cuando Rod6 escribe su ensayo interpelando en su dedicatoriaa "Ia juventud de America" parece mirar al futuro; en realidad cerraba, bajo el ropaje depropuesta de un deber ser, una epoca en agonia. Detrfts de la grandilocuencia de ese texto,y de Ia vehemencia enconada del de Dario, estaba Ia misma frustracion e impotencia, la deuna generacion que hizo un discurso ut6pico en las puertas de su Apocalipsis.

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