SECRETARIA DE MI MÁS PROFUNDO MISTERIO

C O N T E N I D O

INTRODUCCION 3

MISION DE SANTA MARIA FAUSTINA KOWALSKA 4

BREVE BIOGRAFIA DE SANTA MARIA FAUSTINA KOWALSKA 5

LA IMAGEN DE JESUS MISERICORDIOSO 12

FIESTA DE LA DIVINA MISERICORDIA 19

LA HORA DE LA MISERICORDIA 21

CORONILLA A LA DIVINA MISERICORDIA 22

REVELACIONES SOBRE LA ETERNIDAD 25

JACULATORIA 30

I N T R O D U C C I O N

SECRETARIA DE MI MAS PROFUNDO MISTERIO tiene un doble propósito: En pri-mer lugar, propagar la verdad revelada por Dios a Santa María Faustina Kowalska sobre su misericordia, exaltando algunas de las visiones y revelaciones que Jesús manifestó a la Santa, para que a través de Ella se diera a conocer en el mundo entero.

En segundo lugar, invitarlo a Usted, si aún no la ha hecho, para que se acoja a la Mi-sericordia de Dios, única fuente de salvación y, si le es posible, para que sea men-sajero de esta devoción con sus familiares, amigos y personas que lo necesiten.

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MISION DE SANTA MARIA FAUSTINA KOWALSKA

Tu misión – dijo Jesús a Sor María Faustina Kowalska – es la de escribir todo lo que te hago conocer sobre Mi Misericordia para el provecho de aquellos que leyendo estos escritos, encon-trarán en sus almas consuelo y adquirirán valor para acercarse a mí.

No quiero castigar a la humanidad doliente, sino que deseo sanarla, abrazarla a Mi Corazón Misericordioso. Tú eres la Secretaria de Mi Mi-sericordia; te he escogido para este cargo, en ésta y en la vida futura para que des a conocer a las almas la gran misericordia que tengo con ellas, y que las invites a confiar en el abismo de Mi Misericordia.

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BREVE BIOGRAFIA SANTA MARIA FAUSTINA KOWALSKA (25 de Agosto de 1.905 – 5 de Octubre de 1.938)

Helena Kowalska su verdadero nombre, na-ció en Polonia, en la aldea de Glogowiec, actualmente provincia de Konin, el 25 de Agosto de 1.905, en el seno de una pobre y numerosa familia campesina, era la terce-ra de los diez hijos de Mariana y Estanislao Kowalska. Dos días más tarde fue bautiza-da en la Iglesia de la Parroquia de Swinice Warckie.

A los nueve años de edad recibe la Primera Comunión y a los doce inicia su educación en

Glogowiec (Polonia) el lugar de nacimiento de sor Faustina.

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la Escuela Primaria, alcanzado tan sólo año y medio de estudios escolares.

Desde muy pequeña sintió vocación por la vida religiosa, pero sus padres se opusieron a tal propósito; sin embar-go, guiada por la Gracia Divina y des-pués de varios intentos sale a Varsovia con la intención de ingresar al convento.

En Julio de 1.924 se presenta en el Casa de la Congregación de la Madre de Dios de la Misericordia y la Superiora promete recibirla, pero antes debe hacer un apor-te para su ajuar. Como no dispone del di-nero para cumplir con este requisito, se ve obligada a trabajar durante un año como empleada domestica, tiempo en el cual logra ahorrar el importe exigido.

Helena vuelve a presentarse a la Supe-riora del convento, donde finalmente

Recamara de Sor Faustina en su casa de Familia.

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SWINICE, Parroquia donde fue Bau-tizada.

Fue aceptada como postulante el 1 de agosto de 1.925, combinando sus deberes religiosos con las tareas de cocinera, jardinera y portera del con-vento.

A principios de 1.926 la enviaron al no-viciado de Josefow en Cracovia, para terminar su periodo de postulación y el 30 de abril del mismo año tomó el hábito religioso como novicia, reci-biendo el nombre de Sor María Fausti-na del Santísimo Sacramento.Tras el primer año de noviciado, le vinieron experiencias místicas suma-mente dolorosas, las de la llamada “La Noche Oscura”. Durante un perio-do de año y medio se ve sumergida en terribles sufrimientos, producto de las pruebas enviadas por Dios; la esperanza y el amor están puestas a prueba.

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El alma es tentada de incredulidad respecto a las verdades reveladas; ve lo que no le gustaría ver, oye lo que no quiere oír. Satanás, con el permi-so de Dios, la somete a la prueba de las pruebas, en la que se experimenta el rechazo total por parte de Dios, el abandono absoluto y la desesperación.

Sin embargo, Dios que está más cer-ca del alma sufriente no la aban-dona y la sostiene en secreto sin que ella lo sepa, ya que sin su ayu-da no se podría superar las pruebas.

El 30 de Abril de 1.928 termina el no-viciado y cinco años después los votos perpetuos de castidad, po-breza y obediencia, en ceremonia presidida por el Obispo Estanislao Rostov, el 1 de mayo de 1.933. Des-pués de profesar sus votos perpe-tuos, Sor Faustina fue trasladada a

Casa general de la Congregación de la Madre de Dios de la Misericordia, en el que se recluyó sor Faustina. Varsovia (Polonia), ul. Zytnia 3/9

Miguel Sopocko, Director Espiritual y confesor de Sor Faustina.

la casa conventual de Vilna el 25 de mayo del mismo año.

Jesús le había prometido una ayuda visible en la tierra para que Sor Faustina pudiera cumplir sus deseos. Esta promesa se hizo visible en el Padre Miguel Sopocko, a quien la monja había visto en una visión anterior antes de llegar a Vilna. Un día lo vio entre el altar y el con-fesionario y de repente escuchó en su alma una voz: “He aquí la ayuda para ti visible en la tierra. El te ayudará a cumplir mi voluntad en la tierra”. Efectivamente el padre Sopocko, además de convertirse en su confesor, fue su consejero y guía espiritual y le ayudó a hacer realidad los deseos del Señor Jesús. Sin duda alguna lo que más ha caracterizado a Sor Faustina son las visiones y revelaciones

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que Jesús designó en Ella para dar a co-nocer su Misericordia. Estas experiencias quedaron registradas en su diario, conte-nido en seis cuadernos, con algo más de 600 páginas. El diario lo escribió durante los últimos cuatro años de su vida por un claro mandato del Señor Jesús, en la que la autora anota todos los encuentros de su alma con Dios.

Extenuada físicamente, por una tubercu-losis múltiple, que afectó sus pulmones y sistema digestivo, fue internada en el Hos-pital de Pradnik en Cracovia, por varios me-ses y murió el día 5 de Octubre de 1.938, a las onces menos cuarto de la noche, a los 33 años, a la misma edad de Cristo, tal y como Ella misma lo había profetizado, que su vida terrenal duraría lo que duró la de Cristo. Fragmento del manuscrito del

Diario de Sor Faustina.

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La tumba común. Al fondo fue sepultada Sor Faustina.

Su cuerpo fue sepultado en la tumba común, situada al fondo del jardín de la casa de la Congregación de las hermanas de la Madre de Dios de la Misericordia en Cracovia, y luego trasladado a la capilla de la misma Congregación, el 25 de Noviembre de 1.966.

KAROL JOSEF WOJTYLA entonces arzobis-po de Cracovia, fue quien en el año de 1.967 inició los trámites para abrir el proceso de beatificación de Sor Faustina Kowalska.

Más tarde, el 18 de Abril de 1.993, Sor Faus-tina es beatificada por el papa Juan Pablo II y el 30 de Abril de 2.000, es canonizada por el mismo papa Juan Pablo II en Roma, el primer domingo después de la pascua de resurrección y declaró ese día como “EL DOMINGO DE LA DIVINA MISERICOR-DIA” en el mundo entero, tal y como el se-ñor Jesús lo había exigido a Sor Faustina.

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Convento de Plock, donde el Señor Jesús le encomendó a Sor Faustina pintar la imagen.

LA IMAGEN DE JESUS MISERICORDIOSO

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El cuadro de la imagen de Jesús Mise-ricordioso nació en un ambiente lleno de misterio, basado en las experien-cias místicas vividas por Sor Faustina.

El esbozo de la imagen le fue reve-lado a Sor Faustina en la visión del 22 de Febrero de 1.931 en su celda del convento de Plock. “Al anoche-cer, estando yo en mi celda –escri-be en el diario- vi al Señor Jesús vestido con una túnica blanca. Te-nía una mano levantada para ben-decir y con la otra tocaba la túnica sobre el pecho. De la abertura de la túnica en el pecho, salían dos gran-des rayos: uno rojo y otro pálido.

Después de un momento, Jesús me dijo: Pinta una imagen según el mo-delo que ves, y firma: Jesús, en ti confío. Deseo que esta imagen sea venerada primero en su Capilla y lue-go en el mundo entero.” (Diario, 47).

Prometo que el alma que venere esta imagen no perecerá. También pro-meto, ya aquí en la tierra, la victoria sobre los enemigos y, sobre todo, a la hora de la muerte, Yo Mismo la de-fenderé como Mi gloria” (Diario, 48). “Los dos rayos significan la Sangre y el Agua. El rayo pálido simboliza el agua que justifica a las almas. El rayo rojo simboliza la sangre que es la vida de las almas….Ambos rayos brotaron de las entrañas más profundas de Mi Misericordia cuando Mi Corazón agoni-zante fue abierto en la cruz por la lanza.

Estos rayos protegen a las almas de la indignación de Mi Padre. Bien-aventurado quien viva a la som-bra de ellos, porque no le alcanzará la justa mano de Dios” (Diario,299). En la inscripción de la parte de deba-jo de la imagen “Jesús en ti confió” ha de recordar las exigencias de mi Misericordia, porque la fe sin obras, por fuerte que sea, es inútil. “…Debes mostrar misericordia al prójimo siem-pre y en todas partes. No puedes dejar de hacerlo ni excusarte ni justificarte.

Te doy tres formas de ejercer misericordia al prójimo: la primera, la ac-ción; la segunda, la palabra; la terce-ra, la oración. En estas tres formas está contenida la plenitud de la mi-sericordia y es testimonio irrefuta-ble del amor hacia Mí” (Diario, 742).

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Eugeniusz Kazimirowski figlio di August e MariaKossakowska, nato nel 1873 a Wygnanka in Podole, morto nel 1939 a Bialystok.

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Sor Faustina intentaba pintar el cuadro sola pero sin resultados, pues carecía de los conocimientos básicos de crea-ción artística. Entonces, el 2 de Enero de 1.934, el padre Miguel Sopocko le encomendó al pintor Eugenio Kazimi-rowski para pintar el cuadro de Jesús Misericordioso, más por curiosidad de cómo iba a quedar el cuadro, que por la fe en las visiones de Sor Faustina.

El pintor plasma, bajo su propia con-cepción artística, la imagen de Jesús Misericordioso, teniendo en cuenta los detalles y relatos hechos por Sor Faustina, quien visitaba el estudio del pintor por lo menos una vez por se-mana, durante medio año, para aña-dir los detalles e indicar los errores. La obra final queda terminada en ju-nio del mismo año, pero Sor Fausti-na no queda satisfecha y llora mucho

porque la imagen no es tan bella como la de la visión, pero Jesús la tranquilizó diciéndole: “No en la belleza del color, ni en la del pincel esta la grandeza de este cuadro, sino en Mi gracia.“Puedes estar tranquila, pues por medio de esta ima-gen y de esta devoción yo voy a atraer a muchas personas, en diversos paí-ses hacia Mi Misericordia y Mi Perdón”

Un hecho curioso es que la imagen del cuadro sea exactamente del mis-mo tamaño de la figura del sudario de Turín, lo que demuestra el cuidado ex-traordinario que tuvo sor Faustina en transmitir la Santa imagen del Salva-dor grabada en su memoria y la ha-bilidad del artista para que el cuadro haya quedado plasmado exactamen-te según las indicaciones de la Santa.

La casa donde fue pintado el primer cuadro de Jesús

Misericordioso. Actualmente LA CASA DE LA

CONGREGACIÓN DE LAS HERMANAS DE JESÚS

MISERICORDIOSO. Vilna (Vilnius, Lituania), la

calle Rasu 4a.

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El cuadro pintado en la presen-cia de Santa Faustina (Eugenio Kazimirowski, Vilna 1934.)

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Inicialmente el cuadro fue colgado en un pa-sillo oscuro en el convento de las Bernardas, al lado de la Iglesia de San miguel, donde era Rector el Padre Miguel sopocko, porque para colgarlo en la iglesia se requería el permiso del Arzobispo y a El le daba vergüenza hacer esta solicitud, ya que le parecía algo desca-bellado contarle sobre el origen del cuadro. Sor Faustina le exigió que el cua-dro tenía que ser colgado en la iglesia. Finalmente y gracias a los esfuerzos del Padre Sopocko, la imagen de Jesús Misericordioso fue expuesta al público por primera vez duran-te tres días, del 26 al 28 de Abril de 1.935 en la Capilla de la Puerta del Amanecer en Vilna.

Esta celebración coincidió con el primer do-mingo después de pascua y la clausura del ju-bileo de 1.900 años de la redención del mundo.

1.937, con el permiso del Metropoli-tano de Vilna, el Arzobispo Romuald Jalbrzkowski, el cuadro de Jesús Misericordioso, fue bendecido y co-locado en la Iglesia de san Miguel de Vilna, al lado del altar principal.Desde entonces la imagen y la de-voción a Jesús Misericordioso, se ha extendido en el mundo entero.

Cinco años después de la muerte de Sor Faustina, a la Congregación de las Hermanas de la Madre de Dios de la Misericordia, se presentó el pintor Adolf Hyla, quien ofreció pintar un cua-dro de Jesús Misericordioso y regalar-lo a la capilla del convento, en agra-decimiento por el salvamento de su familia en los accidentes de la guerra.

Las Hermanas le presentaron al artis-ta como modelo de reproducción el pri-mer cuadro pintado por Kazimirowski,

A la celebración asistió una gran multitud de fieles y cuando el padre Spocko empezó en el sermón a ha-blar de la Misericordia del Señor, la imagen -relata Sor Faustina- tomó un aspecto vivo y los rayos penetra-ron en los corazones de las perso-nas reunidas, pero no en grado igual, unos recibieron más y otros menos.

Cuando terminaba el oficio y el sa-cerdote tomó el Santísimo Sacra-mento para impartir la bendición, súbitamente Sor Faustina vio al se-ñor Jesús con el mismo aspecto que tiene en esta imagen. El Señor im-partió la bendición y los rayos se ex-tendieron sobre el mundo entero.

Después de la misa el cuadro vol-vió a su sitio anterior, escondido y ahí permaneció todavía durante dos años. Finalmente, el 4 de Abril de

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El cuadro pintado después de la muerte de Santa Faustina (Adolfo Hyla, Cracovia 1944.)

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sin embargo, el artista hizo el encargo se-gún su propia idea. El cuadro fue expuesto en la Iglesia Parroquial del Corazón Divino en Broclaw (Polonia), iglesia que esta re-lacionada con la Casa de la Congregación de la Madre de Dios de la Misericordia.

FIESTA DE LA DIVINA MISERICORDIA

El Santo padre Juan Pablo II oficializó la Fiesta de la Divina Misericordia en la homi-lía de canonización de Santa María Faustina Kowalska, celebrada el 30 de Abril de 2000:

“En todo el mundo, el segundo domingo de pascua recibirá el nombre de Domingo de la Divina Misericordia. Una invitación pe-renne para el mundo cristiano a afrontar, con confianza en la benevolencia divina, las dificultades y las pruebas que esperan al género humano en los años venideros”.

De esta manera se cumplió la exigencia de Jesús a Sor Faustina: “La Fiesta de la Mise-ricordia ha salido de mis entrañas, deseo que se celebre solemnemente el primer do-mingo después de la pascua. La humanidad

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no conocerá la paz hasta que no se dirija a la fuente de Mi Misericordia” (Diario, 699).“…Deseo que la Fiesta de la Misericor-dia sea refugio y amparo para todas las almas y, especialmente, para los pobres pecadores. Ese día están abiertas las en-trañas de Mi misericordia. Derramo todo un mar de gracias sobre las almas que se acercan al manantial de Mi Misericordia.

El alma que se confiese y reciba la San-ta comunión obtendrá el perdón total de las culpas y de las penas. (Diario, 699).

“…Que no tema acercarse a Mi el alma débil, pecadora y aunque tuviera más pecados que granos de arena hay en la tierra, todo se hundirá en el abis-mo de Mi Misericordia” (Diario, 1059).

“…A las almas que propagan la de-voción a Mi Misericordia, las protejo durante toda su vida como una ma-dre cariñosa protege a su hijo recién nacido y a la hora de la muerte no seré para ellas el juez, sino el Sal-vador misericordioso” (Diario, 1075).

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LA HORA DE LA MISERICORDIAEl señor Jesús estableció las tres de la tarde como la hora de la Misericordia. “Te recuerdo, que cuantas veces oigas el reloj dando las tres, sumérgete en Mi Misericordia, adorándola y glorificándo-la; suplica su omnipotencia para el mun-do entero y especialmente, para los po-bres pecadores, ya que en ese momento, se abrió de par en par para cada alma.

En esa hora puedes obtener todo lo que pi-das para ti y para los demás. En esa hora se estableció la gracia para el mundo entero: La Misericordia triunfó sobre la Justicia. En esa hora procura rezar el Vía Cru-cis en cuanto te lo permitan los debe-res; y si no puedes rezar el Vía Crucis, por lo menos entra un momento en la capilla y adora en el Santísimo Sacra-mento a Mi Corazón que está lleno de Misericordia. Y si no puedes entrar en

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la capilla, sumérgete en oración allí donde estés, aunque sea por un brevísimo instante” (Diario, 1572).“Secretaria Mía, escribe que soy más generoso para los pecadores que para los justos. Por Ellos he bajado a la tierra…por Ellos he derramado Mi Sangre; que no tengan miedo de acer-carse a Mi, son los que más necesi-tan Mi Misericordia” (Diario, 1275).

CORONILLA A LA DIVINA MISERI-CORDIA

El señor Jesús dictó esta oración a Sor Faus-tina entre el 13 y el 14 de Septiembre de 1.935 en Vilna, como una oración para aplacar la ira divina. La rezarán durante nueve días con un rosario común, del modo siguiente:

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“Primero rezarás una vez el Padre nuestro y el Ave María y el Credo, después de las cuentas correspondientes al Padre nuestro, dirás las siguientes palabras: Padre Eterno, te ofrezco el Cuerpo y la Sangre, el Alma y la Divinidad de tu Amadísimo Hijo, Nuestro Señor Jesucristo, como propiciación por nuestros pecados y los del mundo entero.

En las cuentas del Ave María, dirás las siguien-tes palabras: Por su dolorosa Pasión, ten Mi-sericordia de nosotros y del mundo entero.

Para terminar, dirás tres veces es-tas palabras: Santo Dios, Santo Fuer-te, Santo Inmortal, ten piedad de noso-tros y del mundo entero” (Diario 476).

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La casa de la Congregación de las Hermanas de la Madre de Dios de

Misericordia en el que en los años 1933-1936

estuvo Santa Faustina.En esta casa Jesús le dictó a Ella el rosario a la Misericordia Divina. Vilna,

ul. Grybo 29

“Anima a las almas a rezar la coronilla que te he dado. A quienes recen esta coronilla, Me complazco en darles lo que pidan. Cuando la recen los pecado-res empedernidos, colmaré sus almas de paz y la hora de su muerte será feliz. Escríbelo para las almas afligidas: Cuan-do un alma vea y conozca la gravedad de sus pecados, cuando a los ojos de su alma se descubra todo el abismo de la miseria en que ha caído, no se desespe-re, sino que se arroje con confianza en brazos de Mi Misericordia, como un niño en brazos de sus madre amadísima. Es-tas almas tienen prioridad en Mi cora-zón compasivo, ellas tienen preferencia en Mi Misericordia. Proclama que ningún alma que ha invocado Mi Misericordia ha quedado decepcionada ni ha sentido

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confusión. Me complazco particularmen-te en el alma que confía en Mi bondad.Escribe: Cuando recen esta coronilla junto a los moribundos, Me pondré en-tre el Padre y el alma agonizante no como el juez justo sino como el Sal-vador Misericordioso” (Diario, 1541).

En Agosto de 1.937 el padre Sopoc-ko visitó a Sor Faustina y encontró en su Diario la Novena a la Misericor-dia Divina y le gusto mucho. Cuando le preguntó cómo la había adquirido, Sor Faustina le respondió que se la había dictado el mismo Jesús. A par-tir de ese momento, el Padre decide publicar la novena y en Octubre del mismo año se distribuía en las libre-rías, junto con la letanía y el rosario.

REVELACIONES SOBRE LA ETERNIDAD

El misterio que nos espera des-pués de la muerte, queda en eviden-cia en las visiones que Sor Faus-tina manifiesta en sus visitas al Purgatorio, el Infierno y el Cielo.

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El Purgatorio: Refiriéndose al Purgatorio, manifiesta: “Vi al ángel de la Guarda que me dijo seguirlo. En un momento me encontré en un lugar nebuloso, lleno de fuego y había allí una multitud de almas sufrientes. Estas almas estaban orando con gran fervor, pero sin eficacia para ellas mismas. Solo noso-tros podemos ayudarlas. Las llamas que las quemaban, a mí no me tocaban. Mi ángel de la Guarda a mí no me abandonó ni por un solo momento. Pregunte a estas almas ¿Cuál era su mayor tormento? Y me consta-ron unánimemente que su mayor tormento era la añoranza de Dios. Vi a la Madre de Dios que visitaba a las almas del purgatorio. Las almas llaman a María “La Estrella del Mar”.

Ella les trae alivio. Deseaba hablar más con ellas, sin embargo mi ángel de la Guarda me hizo seña de salir. Salimos de esa cárcel de sufrimiento. Oí una voz interior que me dijo: Mi Misericordia no lo desea, pero la justicia lo exige. A partir de aquel momento me uno

más estrechamente a las almas sufrientes. (Diario, 19).

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El Infierno: Durante un retiro de ocho días, en Octubre de 1.936, por ordenamiento de Dios, Sor Faustina estuvo en los abismos del infierno, para hablar a las almas y dar testimonio de que el infierno existe. Tengo la orden de dejarlo por escrito y lo que he escrito es una débil sombra de las cosas que he visto. He observado una cosa: la mayor parte de las almas que ahora están son las que no creían que el infierno existe.

Sor Faustina escribió: “Hoy he estado en los abismos del infierno, conducida por un án-gel. Es un lugar de grandes tormentos, ¡que espantosamente grande es su extensión! Los tipos de tormento que he visto: El pri-mer tormento que constituye el infierno, es la perdida de Dios; el segundo, el continuo remordimiento de conciencia; el tercero, aquel destino no cambiará jamás; el cuarto tormento, es el fuego que penetrará al alma, pero no la aniquilará, es un tormento terrible,

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es un fuego puramente espiritual, incen-diado por la ira divina; el quinto tormento, es la oscuridad permanente, un horrible sofocante olor, y a pesar de la oscuridad los demonios y las almas condenadas se ven mutuamente y ven todos el mal de los demás y el suyo; el sexto tormento, es la compañía continua de Satanás; el séptimo tormento, es una desesperación tremenda, odio a Dios, las imprecaciones, las maldi-ciones, las blasfemias. Estos son los tor-mentos que todos los condenados padecen juntos, pero no es el fin de los tormentos.

Hay tormentos particulares para distintas almas, que son los tormentos de los sen-tidos: cada alma es atormentada de modo tremendo e indescriptible con lo que ha pe-cado. Hay horribles calabozos, abismos de tormentos donde un tormento se diferencia de otro. Habría muerto a la vista de aquellas terribles torturas, si no me hubiera sometido

a la omnipotencia de Dios. Que el pecador sepa: con el sentido que peca, con ese será atormentado por toda la eternidad.

Lo escribo por orden de Dios para que ningún alma se excuse diciendo que el infierno no existe o que nadie estu-vo allí ni sabe cómo es” (Diario 741).

El cielo: El 27 de Noviembre de 1.936, cuando la debilidad la llevo a la cama, es-cribió la siguiente visión del Cielo: “Hoy, en espíritu, estuve en el Cielo y vi estas inconcebibles bellezas y la felicidad que nos esperan después de la muerte. Vi como todas las criaturas dan incesante-mente honor y gloria a Dios; vi lo grande que es la felicidad de Dios que se derrama sobre todas las criaturas, haciéndolas fe-lices; y todo honor y la gloria que las hizo felices vuelve a la fuente y ellas entran en la profundidad de Dios, contemplan

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la vida interior de Dios, Padre, Hijo y Espíritu Santo, que nunca entenderán ni penetraran.

Esta fuente de felicidad es invariable en su esencia, pero siempre nueva, brotan-do para hacer felices a todas las criatu-ras. Ahora comprendo a San pablo que dijo: Ni el ojo vio, ni el oído oyó, ni entró al corazón del hombre, lo que Dios pre-paró para los que le aman (Diario, 777). “Dios me dio a conocer una sola y única cosa que a sus ojos tiene el valor infinito, y éste es el amor de Dios, amor, amor y una vez más amor, y con un acto de amor puro de Dios nada puede compararse. Oh qué inefables favores Dios concede al alma que lo ama sinceramente. Oh, felices las almas que ya aquí en la tierra gozan de sus particulares favores, y éstas son las almas pequeñas y humildes (Diario, 778).

“Oh Dios mío, qué lástima me dan los hombres que no creen en la vida eterna; cuánto ruego por Ellos para que los envuelva el rayo de la mi-sericordia y para que Dios los abra-ce en su seno Paterno (Diario, 780).

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J A C U L A T O R I A

Cuando reces esta oración con corazón contrito y con fe por algún peca-dor, le concederé la gracia de la conversión. Esta oración es la siguiente:

“OH SANGRE Y AGUA QUE BROTASTE DEL CORAZON DE JESUS COMO UNA FUENTE DE MISERICORDIA PARA NOSOTROS, EN TI CONFIO”

(Diario, 186)

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